Acaba de renunciar –martes 21 de mayo -el titular del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Germán Martínez. Las declaraciones de Martínez "ponen el dedo en la llaga" sobre la esencia de lo que representa en realidad la llamada 4ª transformación (4T), encabezada por el actual presidente de la República Andrés Manuel López Obrador (AMLO). Germán Martínez señaló que: "Quiero decirlo lo más claro que puedo y debo: algunos funcionarios de la Secretaría de Hacienda tienen una injerencia perniciosa el IMSS y ponen en riesgo la vocación igualitaria, de justicia y, concretamente, de prestación de servicios de salud que tiene el seguro social...el Presidente del Gobierno de México proclamó el fin del neoliberalismo, pero en el IMSS algunas injerencias de Hacienda son de esencia neoliberal: ahorro y más ahorro, recortes de personal y más recortes de personal, y un rediseño institucional donde importa más el cargo, que el ‘encargo’." Y Germán Martínez a manera de conclusión dice: "Se requiere una reforma LEGAL y no una pequeña reforma REGLAMENTARIA, la cuarta transformación no son cambios burocráticos, sino revolución cultural".
Pero no es sólo ni mucho menos lo que está señalando el ex titular del IMSS sobre la 4T, son muchos hechos que están desnudando la verdadera catadura del gobierno de la 4ª transformación. En esta colaboración quiero sólo mencionar algunos de las acciones y medidas que ha instrumentado en medio año el gobierno de AMLO. Veamos:
1.- El gobierno de AMLO prometió que gobernaría para los pobres, sin embargo hasta el momento, ninguna acción importante ha instrumentado para mejorar la situación de los trabajadores mexicanos; los salarios siguen siendo de los más bajos del Mundo, las jornadas laborales son las más altas del mundo (promedio nacional de 9 horas diarias, mientras países en donde sí se han aplicado medidas para bajar la jornada diaria es de apenas 6 horas promedio, en los países nórdicos de Europa, por ejemplo). Ahora, como han señalado algunas analistas, la nueva "reforma laboral" que exigió el presidente norteamericano, Donald Trump y el gobierno canadiense, como una condicionante para que se aprobara el nuevo tratado de libre comercio –TEMEC- no es más que una farsa, pues es una reedición de las reformas laborales de los gobiernos de Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto. Pero lo más grave de esta política en materia de trabajo que está impulsando la 4T, es el hecho de que decenas, tal vez centenas de miles de trabajadores del Estado han perdido su trabajo, debido a los recortes en la mayoría de dependencias federales, bajo el argumento de que hay que "acabar con la corrupción y con los gastos excesivos". Ayer apenas, por ejemplo, se manifestaron en la Ciudad de México cientos de odontólogos que atendían a decenas de miles de ex beneficiarios del programa "Prospera", programa que ha desaparecido para dar paso al programa de becas "Benito Juárez" para estudiantes de preparatoria. Son ya cientos de miles de mexicanos los que han perdido el empleo, por esa política de reducir el costo del Estado (ya lo había señalado Marx hace más de siglo y medio: una demanda de los grandes capitalistas es un "Estado barato"). Por tanto, no es en beneficio de la clase trabajadora la mal llamada "austeridad republicana" y son millones de niños, jóvenes y adultos pobres los que han perdido la atención médica, pues no sólo son odontólogos los que han dejado de laborar, también son otros miles de médicos que daban atención a los beneficiarios de "Prospera". Pero, hablando de "austeridad" resulta también una aberración, no sólo jurídica, sino sobre todo económica la "Ley federal de remuneraciones", la cual a iniciativa de AMLO aprobó el poder legislativo, en la que se establece que ningún funcionario debe ganar más de 108 mil pesos mensuales. En cualquier país capitalista –y México sigue siendo capitalista- los salarios no se pueden fijar por decreto, los salarios se deben pagar por factores como el grado de especialización y la productividad de cualquier, obrero, empleado, técnico o administrador. Y ahora resulta que con la 4T decenas de miles de funcionarios, técnicos o especialistas, deben ganar menos de lo que realmente vale su trabajo, muchos han abandonado su trabajo para buscar las empresas o lugares en los que se les pague, tal y como vale su desempeño laboral, ateniéndose a las leyes de la economía. Y tiene mucha razón la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), ahora que ha determinado como "acción inconstitucional" esa ley, por lo que deberá ser revisada en el poder legislativo (la SCJN ordena que se determine por qué el presidente de la República debe ganar lo que establece la ley mencionada). Ahora AMLO acaba de anunciar su Programa de Rediseño de la Estructura Organizacional (PREO), que contempla despedir a miles de burócratas del IMSS y demás dependencias federales para lograr "ahorrar hasta un 25% del presupuesto" ¿No es acaso fortalecer al neoliberalismo el hecho mantener los salarios bajos para los trabajadores, mantener las jornadas más largas y despedir a miles de trabajadores de la burocracia estatal?
2.- Pero, no sólo en materia laboral, sino también se manifiesta el neoliberalismo de AMLO y su 4T en cómo se aplica el presupuesto público manejado por el gobierno federal en beneficio de las clases que producen la riqueza social, para calificar a un modelo económico. Y resulta que el gobierno de la 4ª transformación se le puede ya denominar como el "gobierno de los recortes". Hay recortes en todos los rubros que daban a los pobres mexicanos un respiro, para sobrellevar la pobreza que es el principal azote de la mayoría de los mexicanos. Recorte en salud (como lo refleja crudamente la renuncia del titular del IMSS, el cual en su carta al consejo directivo del IMSS, denuncia las largas filas en los hospitales y clínicas y el trato inhumano hacia los pacientes, lo cual no es algo nuevo, pero que se está agravando con el gobierno de la 4T, dado que la Secretaría de Hacienda no ha liberado desde que llegó el gobierno de AMLO 1400 millones de pesos al IMSS, y el desabasto en medicamentos, la negación a aplicar recursos para infraestructura hospitalaria, etc.); en cultura, recorte en investigación científica recorte (al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología –Conacyt- se le recortaron más de 3 mil millones de pesos. En cuanto a obra pública desapareció el ramo 23, el cual permitió los años que duró, el realizar miles de obras como electrificaciones, introducción de pozos y redes de agua potable, clínicas, pavimentación de calles, construcción de espacios deportivos y culturales, etc., lo que evidencia con meridiana claridad que a la 4T no le importa realmente elevar los niveles de bienestar a las comunidades más necesitadas, dado su grado de pobreza, de todo el país. Se acabaron las guarderías infantiles (dejando a más de 300 mil familias –la mayoría de madres solteras- sin poder dar atención para una cantidad mayor de infantes; se eliminaron 5542 comedores comunitarios que atendían a más de medio millón de personas catalogadas como las más vulnerables (ancianos, discapacitados o simplemente de pobreza extrema) ¿No es esto vil neoliberalismo? ¿Acaso los "geniales" políticos de MORENA, están pensando en cómo acabar con la pobreza, si más bien la están aumentando en los hechos? Se dio un recorte de más del 30 por ciento a la Conafor (Comisión Nacional Forestal), lo cual es muy grave, pues en todo el país se han incrementado drásticamente los incendios. Pero un caso particular de relevante importancia es la cancelación del programa "Prospera", que beneficiaba al 20 por ciento de la población – la más pobre del país-, que ayudaba a 6 millones de estudiantes -para que pudiesen terminar primaria, secundaria y bachillerato-, que atendía a 1.5 millones de niños menores de 5 años en alimentación y en atención a su salud, dejó de funcionar. Los personeros de la 4T han dicho que este programa desaparece por ser "neoliberal" y "clientelar" Pero ¿Cuáles son los programas con que piensa AMLO acabar con la pobreza? ¿Será que el dinero que se da a los "ninis", "becarios", y personas de la 3ª edad sacará de la pobreza a millones de mexicanos? Los hechos de más de 20 años de "Prospera" y otros programas de transferencia monetaria directa (PTMD) dicen que con su aplicación la pobreza no desaparece, pero "Prospera", por lo menos, le ayudaba de mejor manera a los pobres. ¿Y si "Prospera" era "neoliberal" y "clientelar", acaso los programas de becas, de apoyo a "ninis", a "adultos mayores", etc., no lo son? El neoliberalismo y el clientelismo electoral son la esencia de los programas PTMD de AMLO y su 4T.
3.- Germán Martínez, con su misiva –que es un misil explosivo-, evidencia la existencia de una "nomenclatura", una nueva "mafia en el poder" que está más interesada en colocar a los incondicionales, los cuales no les importa trabajar "para el bien de todos", sino estar en el poder, para medrar del poder. La 4T es el instrumento de los más ricos de México para seguir prolongando las viejas políticas neoliberales. Cuando cayó el bloque socialista, a principios de los años 90 del siglo pasado, el Imperialismo triunfante impuso a la mayoría de naciones sus políticas económicas neoliberales, en ese sentido, las recomendaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI) para todas las naciones del Globo terráqueo fueron: contención de los aumentos salariales de los trabajadores, disminución de las prestaciones sociales a la población (bajar pensiones, bajar prestaciones, quitar apoyos a la salud, a la vivienda, a la cultura, etc.), adelgazamiento del Estado (desde la presidencia de Miguel de la Madrid, y con los subsecuentes presidentes, el Estado fue "adelgazando", con Carlos Salinas de Gortari, ese adelgazamiento consistió, sobre todo en la venta de muchas empresas que fueron del Estado). El neoliberalismo ha consistido, sobre todo, en que todos los problemas económicos de un país, los debería resolver "la mano invisible del mercado" (o sea, que fuesen los grandes potentados de cada país y del Mundo quienes decidieran toda las políticas económicas, para así acumular y acumular la riqueza que han creado las capas trabajadoras). El resultado de ese "fundamentalismo de mercado" o "capitalismo salvaje" o "neoliberalismo" ha sido que la riqueza social se ha concentrado descomunalmente en unas cuantas manos, y la pobreza y desigualdad también han crecido vertiginosamente en la mayor parte del planeta. Y al ver lo que está haciendo AMLO -y su 4ª transformación-, no nos debe caber la duda de que aunque haya prometido antes de ser presidente, y, ahora insista en que el neoliberalismo "ya se acabó", y que"México ya cambió", el presidente y su partido MORENA, al buscar "adelgazar el Estado", al reducir los recursos del presupuesto público para atender las necesidades de las capas empobrecidas del país y al instrumentar las mismas políticas de dar dinero a la gente, pero de manera más selectiva, pero a costa de cancelar otros apoyos mejores y de mayor impacto en la población vulnerable, nos viene a demostrar que la 4ªtransformación es una gran mentira; la 4T es el neoliberalismo aplicado por una nueva "mafia en el poder".
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