Durante octubre, como parte de las acciones para impulsar a las y los jóvenes de Coahuila, a través de la estrategia Mejora, el secretario de Inclusión y Desarrollo Social, Manolo Jiménez Salinas, en representación del gobernador Miguel Ángel Riquelme Solís, encabezó el Congreso Juvenil 300, en donde dio una conferencia de liderazgo y exhortó a los jóvenes a continuar con el desarrollo del estado.

Con el membrete de que estos son los mejores líderes del estado de Coahuila, el evento se ha llevado a cabo en tres ciudades del estado; Saltillo, Torreón y Monclova, en total 900 jovenes han estado presentes en dichas conferencias, donde empieza su jornada desde las 9:00 AM hasta las 6:00 PM, con diferentes actividades que ayuden a mejorar la convivencia. 

Pero, ¿De dónde salen todos estos líderes? ¿Qué tipo de líderes son? Bueno, son estudiantes en su mayoría de nivel superior de las distintas instituciones educativas de la zona donde se lleve a cabo el evento, en pocas palabras son estudiantes seleccionados por los directivos de las escuelas, por ciertas cualidades como por ejemplo los jefes de grupo, el individuo que está solo detrás de los profes, el atento y así podría describir a los jóvenes que se seleccionan para esto, y no es algo en contra de esas cualidades por parte de quien escribe esta opinión, pero si es importante señalarlo, ya que es preciso decirlo, no son líderes, son acarreados (como coloquialmente decimos), que solo fueron llevados para llenar el evento de este personaje político que va por otra línea más clientelar que de mejorar el desarrollo social del estado.

Manolo Jiménez es como comúnmente se dice en política, el gallo para la próxima elección por la gubernatura del estado por parte del partido politíco que gobierna y que se disputa en 2023. 

Las y los coahuilenses que vivimos en este estado fronterizo vemos que la campaña electoral ya está a todo, los principales contendientes son funcionarios públicos que a través de ese puesto están haciendo propaganda política, por parte del PRI está el expresidente de Saltillo, Manolo y de Morena vemos al secretario de Seguridad Publica federal, Ricardo Mejía Berdeja que tiene más cuentas que rendirle al pueblo mexicano por como se encuentra el país en materia de seguridad pública que estar haciendo campaña prematura. 

"Entonces, uno se encuentra a veces con jóvenes, y los que han leído el Manifiesto Comunista, o lo han llevado largo rato debajo del brazo, creen que lo han asimilado y dictan cátedra y exigen actitudes y critican a hombres, que por lo menos, tienen consecuencia en su vida. Y ser joven y no ser revolucionario es una contradicción hasta biológica; pero ir avanzando en los caminos de la vida y mantenerse como revolucionario, en una sociedad burguesa, es difícil". (Salvador Allende, discurso en la Universidad de Guadalajara.

Recordar esta parte del discurso de Salvador Allende, no es cualquier cosa y en muchas ocasiones vemos que la frase se replica y replica sin ni siquiera saber cuál es el sentido profundo de sus palabras, pareciera que es más por moda cuando se acerca la conmemoración del dos de octubre y se hacen ejercicios de concientización, pero después se olvida y, como se dice, “pero ir avanzando en los caminos de la vida y mantenerse como revolucionario, en una sociedad burguesa, es difícil”, lo es. 

Por ello no todos los jóvenes lo siguen. Ser revolucionario desde el momento de cuestionar al estado, está bien, porque al final la lucha de todos y todas es en contra del sistema que nos maneja, es en contra del estado y los poderosos, pero son estos mismos los que están haciendo que las luchas se dividan; ambientalistas, feministas, LGTB, religiosos y entre otros para que la gran fuerza que estos puedan hacer juntos se parta en varias partes y no luzca como ello, es tarea fundamental de los jóvenes que de verdad estén comprometidos con el cambio, con la revolución para unir todas las luchas en una sola, solo así vamos a tirar al sistema, juntos y luchando nada más y nada menos, la lucha del pueblo es contra el poder que solo se concentra en unas cuentas manos, no es una lucha entre nosotros la gran mayoría de los que vivimos en desigualdad.