¿Quiénes somos?
Es necesario educar y a las masas para que sean ellas las que impulsen sostengan y desarrollen el cambio que se busca
Aquiles Córdova Morán
A principios de los años 70 un grupo de profesores y estudiantes de la Escuela Nacional de Agricultura (ENA) encabezó un movimiento en defensa de una universidad nacionalista, que tuviera como propósito fundamental ayudar al campo y a los campesinos mexicanos a resolver su problemática de elevar su producción y, en consecuencia, su nivel de vida. Luchaban por una universidad popular que garantizara que entraran a estudiar los hijos de la gente humilde.
Aquiles Córdova Morán, ahora dirigente nacional del Movimiento Antorchista y en ese entonces profesor de la escuela, dirigía al grupo que luchaba por la transformación de la ENA en Universidad; participó activamente en la elaboración del “Proyecto Universidad Autónoma Chapingo” (Proyecto UACh) hasta que el movimiento logró que la Cámara de Diputados lo aprobara y se publicara la Ley Orgánica de la Universidad Autónoma Chapingo en el Diario Oficial de la Federación el 31 de diciembre de 1974.
Una vez aprobada la ley, mucha gente que aspiraba a ocupar el cargo de rector y, en consecuencia, tener el control sobre la Universidad, desató una campaña en contra del grupo que encabezaba la lucha y, a pesar de que éste ganó un plebiscito en el que se votó a favor de su permanencia en la universidad, finalmente fue expulsado por medio de la violencia y con la ayuda del Ejército mexicano; es decir, con la ayuda del Estado. A pesar de su expulsión, se logró el cambio que garantizaba el ingreso, de forma preferente, de los hijos de campesinos pobres, obreros y artesanos; es decir, de los hijos del verdadero pueblo. Hasta el día de hoy, la UACh es la única institución que reconoce como autoridad a la comunidad magisterial, estudiantil y de trabajadores, y es la única universidad en donde está garantizado, por ley, que el rector tiene que ser electo por voto universal, directo y secreto de toda la comunidad.
A raíz de su expulsión de la UACh, con todo el cúmulo de experiencia, ideas y afinaciones, el grupo llegó a la conclusión de que había que fundar un movimiento que, a diferencia de su labor en la Universidad, que era meramente estudiantil, organizara y educara a las grandes masas.
En aquellos años, el grupo encabezado por el ingeniero Aquiles Córdova Morán detectó los problemas que presentaba el socialismo de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS): “eso nos llevó a replantear nuestra ideología, nuestra manera de ver las cosas y, antes de que cayera el socialismo en la URSS, ya habíamos llegado a la conclusión de que debíamos cambiar la ruta, que debíamos convertirnos en un movimiento político más adaptado a la situación nacional, que teníamos que elaborar un programa nacionalista en favor de los grupos más necesitados del pueblo mexicano y que encauzara la lucha de manera constructiva. En fin, teníamos que convertirnos en un grupo que realmente organizara a la gente para que mejorara su suerte, pero hoy, no dentro de muchos años”, menciona el ingeniero Aquiles Córdova.
Nosotros nos proponemos ser los que alumbremos al pueblo el camino del progreso, del trabajo, un camino constructivo para el bienestar del pueblo pobre de México lo más pronto que se pueda”
Aquiles Córdova Morán
Aquiles Córdova Morán nació en 1941 en Tecomatlán, Puebla, que se encuentra en la Mixteca baja poblana, lugar que estaba sumido en la miseria y en el atraso en todos los aspectos. Los caciques del pueblo tenían el control político y económico, acaparaban todos los productos agrícolas, estaban ahorcando al campo mexicano y no dejaban a los lugareños ninguna opción más que vivir en la más profunda de las pobrezas. Actualmente, Tecomatlán se ha convertido en la “Atenas de la Mixteca” por los altos niveles de desarrollo que presenta y la buena calidad de vida que da a sus habitantes.
No hay una fecha exacta del momento en que nació el Movimiento Antorchista, aunque éste reconoce como oficial el año de 1974. De hecho, cuando oficialmente se reunieron cerca de 30 elementos en Tecomatlán y decidieron formar el grupo, lo que se estaba haciendo era materializar la idea que había ido creciendo desde tiempo atrás. En la fundación estaban presentes el ingeniero Aquiles, algunos de sus hermanos, dos o tres profesionistas y el resto eran campesinos, de ahí que originalmente la organización se llamara Antorcha Campesina; es decir, Antorcha nació de los campesinos, de personas muy modestas que vieron bien el proyecto y se pusieron a trabajar para llevarlo a cabo.
“Cuando empezamos a discutir cómo le íbamos a poner a esta nueva organización que queríamos formar, mi madre (Margarita Morán), que estaba cerca de allí, mencionó que había conocido una revista que se llamaba ‘Antorcha Campesina’ (…) pero, además, nos dijo: ‘si lo que ustedes quieren es ayudar al pobre, ayudar al pueblo a salir de la oscuridad, pues pónganse Antorcha, porque ustedes son los que van a alumbrar a los campesinos en el camino oscuro en el que vive’. Y, efectivamente, nosotros nos proponemos ser los que alumbremos al pueblo para llevarlo por el camino del progreso, del trabajo, un camino constructivo para el bienestar del pueblo pobre de México”, resume Córdova Morán sobre el surgimiento y nombre de la organización, que ahora cuenta con millones de afiliados en todo el territorio nacional.