Desde el año 2018 la mayoría de los ayutecos decidieron dejar la forma de elegir sus autoridades municipales por medio de partidos políticos para pasar a gobernarse por usos y costumbres. ¿En qué consiste este método de elección? Básicamente en nombrar a un representante por cada comunidad, colonia, pueblo, etc., que es elegido en asamblea general y que es la máxima autoridad de su comunidad; cuando se han nombrado a todos los representantes de las comunidades, se reúnen en asamblea para elegir a quién los va a representar como ejecutivo municipal, así como todos los cargos que deben tener un ayuntamiento municipal, cabe aclarar que todo se decide por mayoría.
Se llegó a la decisión de gobernarse por medio de usos y costumbres y dejar la forma de los partidos políticos por las siguientes consideraciones: Primero, por estar en desacuerdo con que los gobernara una familia únicamente; es decir, no querían que un cacique los gobernara nada más, ya sea con las siglas de un partido u otro. Segundo, con el argumento de que era muy poco el presupuesto que se destinaba para obras públicas en sus comunidades año con año y a veces no se hacía nada en sus pueblos, es decir vivían en el abandono. Tercero, con los programas sociales y apoyos diversos pasaba lo mismo que con las obras. Cuarto, para acabar con la corrupción y el enriquecimiento de los servidores públicos que llegaban a ocupar algún cargo en el gobierno municipal. Estas fueron las banderas que enarbolarón. para cambiar la forma de elegir a sus autoridades.
Es importante mencionar que la mayoría de la población es indígena, esto hace que sean manipulables por los que siempre buscan sus intereses particulares y esto fue precisamente lo que sucedió, que había resentidos porque al tener el control político una familia no podían o no tenían posibilidades de tener un puesto en la administración municipal, además de que el descontento social era grande; fue así como se hizo posible que la mayoría de los pobladores apoyaran el cambio, además de que les prometieron que se haría un gobierno totalmente diferente a los anteriores. Fue en el 2018 que quedo instalada la primera administración por usos y costumbres, que terminaría su gestión en el 2021. En este periodo no se vieron avances significativos con los que la población pudiera decir que estaban mejor que antes, al contrario se dieron pleitos por los que llegaron hasta a quitarse la vida por algunas posiciones administrativas, esto abrió la puerta para que se planteara que regresaran a la forma de elección del pasado, pero el tiempo no les alcanzó; además de maniobras administrativas y políticas que llevaron a no cambiar, sumado a esto se formó otro municipio con territorio y población que era parte de Ayutla, es decir los que ahora eran dueños del balón hicieron todo para seguir conservando el poder.
Así llegamos al 2021 donde la segunda administración gobernará hasta el 2024, pero, aunque es muy poco tiempo el que lleva la actual administración, podemos decir que la gobernalidad del municipio está peor que antes, llevan la mayor parte de gobierno peleándose la representación, es decir quién presidirá el Ayuntamiento; estuvo tomada La Casa del Pueblo, es decir la Presidencia Municipal, por más de dos meses por los seguidores de José Gregorio Morales, que actualmente está reconocido por el Tribunal Electoral del Estado y recientemente el grupo de Ysabel de los Santos Morales sacó a golpes a la gente que tenía en resguardo el inmueble municipal, podemos decir que la mayoría del tiempo se la han pasado en idas y vueltas, comisiones, marchas, plantones, queriendo resolver quién encabezará la autoridad municipal, mientras que las obras, servicios y problemas del pueblo duermen el sueño de los justos, hasta aquí una breve relatoría de lo sucedido en Ayutla de los Libres.
¿Dónde quedó lo que iban a combatir, donde quedaron las obras y los programas sociales, qué pasó con no seguir con cacicazgos? En pura demagogia. Lo que querían lo lograron: tener el poder municipal, pero a costa de que los indígenas de esta región cada día estén más pobres.
Por lo escrito líneas arriba no es difícil concluir que el problema no es la forma que se utilice para elegir a las autoridades municipales, nada de eso el verdadero problema, sino que no tenemos a hombres y mujeres buenos que sientan el dolor de sus hermanos como propio y se pongan al frente sin ningún interés político, económico y junto con su pueblo trabajen para levantar un gobierno que les dé lo elemental a sus hijos, por tanto debemos seguir trabajando en ello o, de lo contrario, seguiremos viendo casos como el de Ayutla y cada vez más desesperanza en la fuerza del pueblo.
Sumémonos con hombres, mujeres de todas las edades y de todos los estratos sociales y trabajemos por una patria más generosa, a eso los invita el Movimiento Antorchista Nacional.
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