Al cierre del primer trimestre de 2022 los precios de la canasta básica incrementaron 13.4% provocando que la tasa anual de inflación se ubique en 7.29%, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), más de tres puntos porcentuales de lo que Banxico pronosticaba.
El incremento en los precios de la canasta básica afectan los bolsillos de los más pobres, pues dificulta la adquisición de estos productos. De acuerdo con datos de la Asociación Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec), una familia promedio de cuatro personas necesita mil 223 pesos para adquirir 38 productos básicos, cuando un año antes bastaba con mil 66 pesos.
El caso más alarmante es el aumento de 24% en el precio de las tortillas de maíz, base de la dieta mexicana, que según el Sistema Nacional de Información e Integración de Mercados (SIINM) de la Secretaría de Economía, la tortilla de maíz, se vende hasta 27 pesos por kilo en algunas ciudades del país, precio que podría alcanzar los 30 pesos.
Desde el pasado lunes, productores de maíz alertaron que los altos precios de este producto han disparado los precios de la tortilla a máximos históricos en el pasado mes de marzo.
Álvaro López Ríos, secretario general de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA), precisó que esto es derivado al alza de 21% en el precio del maíz en el mercado nacional entre marzo de 2021 a marzo de 2022, al pasar de 6 mil 057 pesos a 7 mil 327 pesos la tonelada.
Al contrario de la opinión generalizada de que el conflicto Rusia-Ucrania es la causante del aumento de los precios, el Doctor en Economía, Abel Pérez Zamorano, asegura que no es el conflicto en sí lo que provoca el alza en los precios, sino que son las sanciones que imponen Estados Unidos y la Unión Europea a Rusia las que generan la alza en los precios de energéticos y fertilizantes, sanciones que tienen como objetivo arrebatar mercados a Rusia, para monopolizarlos.
Afirma que la inflación mundial afecta a México de forma más directa, debido a la creciente dependencia alimentaria. Según datos del Consejo Nacional Agropecuario, México ocupa el primer lugar como comprador de maíz, cubriendo el 40% de su consumo con importaciones.
Esto se suma al hecho de que en los últimos siete años la producción de maíz en México no sólo no se ha incrementado, si no que ha registrado una tasa media anual de crecimiento negativa de 0.6%.
“Aquí radica la responsabilidad directa de este y los anteriores gobiernos, cuya política económica nos sigue hundiendo en una terrible dependencia alimentaria. Y eso no lo causó la guerra de Ucrania, como pretenden hacernos creer”, precisó Pérez Zamorano.
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