El Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), informó que en el 2020 el número de pobres en México se incrementó en cerca de 10 millones de personas, lo que pone en evidencia el fracaso de la política del gobierno de la cuarta transformación, encabezada por Andrés Manuel López Obrador a nivel federal y por Cuitláhuac García Jiménez en Veracruz.
Que crezca en número de personas en pobreza y en pobreza extrema en el país es un indicador claro del fracaso del actual gobierno y, éste, no tendrá ahora a quien culpar, alegando que tiene otros datos, porque el Coneval es un organismo, junto con el Inegi, central en la medición de la pobreza, formado por el propio gobierno, con una gran capacidad de reflejar la realidad a través de instrumentos técnicos y científicos y porque tienen a profesionales de alto perfil haciendo la tarea que tienen encomendada.
El actual gobierno prometió acabar con la pobreza y no lo ha logrado, así como tampoco ha acabado con la corrupción ni con la inseguridad, y ahora lo mexicanos sufriremos las consecuencias de ello.
La pobreza es la verdadera madre de los problemas que existen en la actual sociedad, es la culpable de que millones de personas no tengan recursos para comprar los alimentos indispensables en sus hogares y de que mucha gente viva con hambre; de no contar con una vivienda digna con los servicios básicos indispensables; de que haya gente que muera de enfermedades curables por la falta de servicios de salud; de que gente capaz no pueda hacer una carrera profesional, de la ignorancia; es culpable de la prostitución y la drogadicción. De todos los males que hoy padece nuestro país.
La política social del presidente Andrés Manuel López Obrador, basada en los programas que entregan dinero en efectivo, intentó contener los estragos de la pandemia, sin embargo, dichos programas no fueron suficientes, porque éstos no incluyen a todos los grupos afectados por la covid-19, como son los trabajadores urbanos que viven al día que perdieron sus trabajos o a los campesinos que cuentan con una superficie muy pequeña de tierra o que carecen de ella.
El Coneval también informó que la política social vigente se caracteriza por la falta de integración de los programas, por la ausencia de un padrón único de beneficiarios, la falta de profesionalización de los servidores de la nación y sostuvo que habrá un retroceso de una década en los avances que se habían obtenido en la reducción de la pobreza.
La Organización Internacional de Trabajadores señaló que la pérdida de ingresos en las familias aumentará la incorporación prematura de niñas, niños y adolescentes al mercado laboral, teniendo que abandonar sus estudios y en condiciones de lacerante explotación.
La situación del país es grave y la única salida real a los problemas que padecemos, es la organización y la toma de conciencia de la clase trabajadora de la necesidad de construir un país distinto, una patria en la cual se produzca mucha riqueza y ésta se distribuya de forma más equitativa. Pero para ello se requiere elevar el nivel educativo, desarrollar la ciencia y la tecnología para alcanzar los niveles de conocimiento que tienen las potencias económicas del planeta. Pero esta tarea le corresponde al verdadero pueblo que crea con sus manos la riqueza, y no a quienes se digan ser sus representantes y que solo hablen en nombre de él.
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