En su sesión extraordinaria del 12 de enero pasado, el Instituto Nacional Electoral (INE), aprobó solicitar a la Secretaria de Hacienda y Crédito Público (SHCP), recursos adicionales que le permitan continuar con el proceso de revocación de mandato. Sin embargo, dicha dependencia federal rechazó este lunes otorgar al organismo los recursos extraordinarios que solicitó.
“No es viable jurídicamente otorgar recursos adicionales al INE, pues, se reitera, que el Presupuesto de Egresos de la Federación para el ejercicio fiscal 2022 aprobado por la Cámara de Diputados no existe disposición y asignación específica de recursos que permita aumentar presupuesto del INE u otorgar recursos excepcionalmente recursos adicionales”, señala el documento firmado por el procurador fiscal, Félix Medina, y enviado al INE. A lo que Lorenzo Córdova, Consejero Presidente, señalo “si no recibimos la ampliación presupuestal solamente se instalará un monto cercano a la tercera parte de las mesas de votación. Sin diálogo, sin respeto por el Estado de Derecho, sin la colaboración autentica, no se puede recrear adecuadamente la democracia”.
Diversos analistas políticos han señalado que, en teoría, la posibilidad de revocar un gobierno podría generar una rendición de cuentas muy necesaria en nuestro país; pero, lamentablemente López Obrador y Morena, su partido político, han utilizado la ley como propaganda electoral. El presidente y su partido se han dedicado a promover un proceso contra él, acto seguido, luchan con todo para derrotarlo. Es por ello, que, en los últimos meses, hemos visto al morenismo apoyar de forma activa la celebración del refrendo que podría, de hecho, ponerle fin a su presidencia.
Pero la realidad nos dice otra cosa. Nos enfrentamos a una combinación de narcisismo político y de buscar desmantelar la confianza que los mexicanos tenemos a las Instituciones independientes en nuestro país. No debemos olvidar que, el INE es una institución respetada y que fue creada para evitar las incertidumbres en un país marcado por artimañas electorales. Así se explica que López Obrador esté intentando socavar su apoyo a la par que busca la aprobación de una reforma electoral que debilite su autonomía y si es posible permita su desaparición, para perpetuarse en el poder.
La muerte del INE, si lo permitimos, será el paso decisivo para que se implante una autocracia o una dictadura en nuestro país. Es por ello, que AMLO y sus incondicionales se aplican a fondo y recurren, una vez más, al argumento de combate a la corrupción y los privilegios, como una condición indispensable para alcanzar la austeridad republicana y la Cuarta Transformación del país, con el objetivo de ganar para su lucha, al pueblo que está cansado de los abusos de poder.
Una prueba de que a Morena actúa de manera tramposa para lograr que se lleve a cabo la revocación de mandato, es el hecho de que el INE reportó que, el 25 por ciento de los firmantes de la revocación negó haber dado su apoyo y la revisión minuciosa de las firmas entregadas arrojó que 2.6 millones de firmas eran falsas y que 50 mil eran de personas muertas. No le importa hacer chicanadas al morenismo con tal de complacer el capricho de su mesías.
Mientras tanto, el país vive problemas verdaderamente graves: la pandemia ya ha cobrado la vida de millones de mexicanos y la respuesta del gobierno federal sigue siendo muy irresponsable. La vacunación y el acceso a pruebas adecuadas es insuficiente, baste recordar que durante el último fin de semana hubo cerca de 100 mil contagios y más de mil fallecimientos. La violencia no para de crecer y en este gobierno han transcurrido los años más sangrientos y más horrendos en el país. Se sabe que regiones enteras son controladas por el crimen organizado y la estrategia de “abrazos, no balazos” sigue sin funcionar. El día de ayer, se asesinó al periodista Roberto Toledo, en el estado de Michoacán, es el cuarto comunicador que le quitan la vida en el primer mes del año. Fueron otros 7 periodistas asesinados el año pasado y 23 más en 2018, es por ello que se considera a México como la nación más mortífera del mundo para la prensa y aquí también el presidente elude la crítica y las autoridades judiciales recurrentemente difunden la idea de que dichas muertes no tienen que ver con su ejercicio periodístico. La economía está estancada y las perspectivas de crecimiento son pocas y por el contrario se señala una contracción y una inflación histórica que golpeará aún más el bolsillo de millones de mexicanos.
Ante esta desgracia que estamos viviendo, es necesario que reaccionemos y nos demos cuenta que hoy estamos peor que antes y que tras el ataque al INE y la supuesta lucha contra la corrupción se esconden intereses mezquinos que pretenden destruir todo lo que represente un contrapeso a los abusos y ansias de poder por parte de Morena. Y para ello, el mejor antídoto es la educación y organización del pueblo para que decididamente saquemos al país de este barranco al que lo ha llevado este gobierno.
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