MOVIMIENTO ANTORCHISTA NACIONAL

El campo de Veracruz, en el abandono

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El abandono del campo por parte de las autoridades estatales y federales, en los últimos años, es uno de los problemas que más ha afectado a los campesinos de Veracruz, pues la producción ha disminuido, lo que ha representado bajísimos ingresos para las familias, ya sean de productores o asalariados agrícolas, y porque los precios de los productos se han encarecido cada vez más. 

A pesar de que se ha denunciado, en infinidad de ocasiones esta realidad, los funcionarios han preferido ignorarla y seguir destinando recursos en programas o proyectos sin que se haya probado la efectividad de éstos.  

Con la llegada de la Cuarta Transformación, el problema se ha agudizado por dos razones, por la eliminación de fondos y programas que estaban destinados a este rubro y que resolvían parcialmente el problema y porque los nuevos programas como Sembrando Vida son descaradamente electoreros, lo que ha implicado que solo se beneficien aquellas personas que se declaran abiertamente morenistas. 

Con esto, no se propone que los anteriores no hayan tenido errores, sino únicamente que los actuales tampoco están resolviendo la dificultad e incluso la están agudizando.

Con relación a la primera razón, es de conocimiento común que cuando llegó al gobierno federal, Andrés Manuel López Obrador comenzó eliminó programas y fondos sin previamente haber demostrado su inutilidad, poca efectividad o corrupción, simplemente prescindió de ellos y propuso otros que, como ya se indicó líneas atrás, no se ha demostrado que sean mejores.

En su ensayo “Los mitos de la política social de la 4T”, Máximo Ernesto Jaramillo, menciona que, aunque el Gobierno federal ha vendido la idea de que estamos viviendo una época de grandes modificaciones en la política social, la realidad indica que dicha consigna no pasa de ser una mentira, incluso se ha demostrado que la focalización de los programas actualmente es peor que en los tiempos del PRI y del PAN, pues con base en información de la Encuesta Nacional de Empleo y Ocupación (ENOE) del Inegi, se puede afirmar que sólo tres de cada 10 hogares en el país son beneficiarios de algún programa social. 

El Gobierno federal también ha mencionado que la política social actual es la más ambiciosa en la historia de México, lo cual también es una mentira porque ni siquiera se ha alcanzado el máximo histórico, que fue en 2015 (Nexos, 2021).

Hasta el momento, en el sector primario, se han eliminado 29 programas entre los que se encuentran los de crédito, para la productividad y competitividad, de fomento, sanidad animal (Lupa Legislativa). A cambio de lo anterior, los pequeños y medianos productores no han recibido nada, lo que ha implicado que sus condiciones de vida se hayan visto mermadas.

En segunda razón, los nuevos programas prácticamente se crearon para ganar votos, y los que ya estaban y se les ha dado continuidad, también se han orientado al mismo objetivo. Sobre el programa Sembrando Vida existen diversos ensayos, investigaciones y entrevistas en donde se exhibe la opacidad, la discrecionalidad y demás irregularidades con que se maneja.

En este mismo sentido, campesinos de diversos municipios de la zona centro del estado, nos han comentado que los servidores de la nación y los técnicos, desde que llegaron a afiliarlos les dijeron que la condición es que tienen que votar por los candidatos morenistas, no asistir a eventos de otras organizaciones sociales y entregar una parte del apoyo para crear fondos comunes, no obstante, en ninguna ocasión se les ha esclarecido donde queda dicho recurso.

También nos han comentado que en momentos complicados, como cuando bajan los precios de las cosechas y los productores incluso terminan con pérdidas, no encuentran apoyo por parte de las instituciones estatales encargadas del sector primario ni del Poder Ejecutivo estatal. La respuesta que siempre reciben es que no hay dinero para ese tipo de necesidades y que no pueden hacer otra cosa.

La contestación que reciben los campesinos y productores contrasta con lo que se mira todos los días en las calles de cualquier municipio de nuestro estado, derroche de dinero en campañas anticipadas de personajes de la 4T.  Lo real no es que no haya dinero, sino que no lo quieren usar para apoyar a la gente que verdaderamente lo requiere o lo están guardando para la compra de votos en el año que viene.

Ante tal situación, la única alternativa es la lucha organizada de todos aquellos que se han visto afectados por las pésimas políticas de la 4T; los campesinos, pequeños productores y demás población debemos unir fuerzas para exigir que se destinen recursos al campo y se dejen de utilizar de manera electorera los programas sociales. Hay que hacerlo, más adelante quizá sea tarde.

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