MOVIMIENTO ANTORCHISTA NACIONAL

El Presupuesto del 2020 y el combate a la pobreza: más de lo mismo

image

Se entregó por parte de la secretaría de Hacienda y Crédito Público el proyecto de presupuesto del país para el año 2020. Debe saberse que sí va a haber aumento de impuestos, pero no sobre las grandes ganancias de los mayores potentados de México, sino sobre los magros ingresos de las mayorías trabajadoras, ya que, para ser significativos en el rubro de los ingresos, los incrementos tienen que afectar a millones de trabajadores. Van a aumentar los impuestos a los cigarros, a los refrescos, al uso de plataformas digitales (como Uber, Netflix y Airbnb), van a pagar impuestos que antes no pagaban, los modestos vendedores por catálogo (tales como los de Avon, Natura, Price Shoes, Jafra, Tupperware y otros). El presupuesto completo deberá ser discutido y aprobado en los próximos días por la Cámara de Diputados.

El crecimiento de la economía que el presupuesto prevé para el año que entra, está lejos del presumido por el presidente de la república como promedio durante su administración que, como se recordará, es del 4 por ciento, el presupuesto para el 2020 prevé un mínimo de 1.5 por ciento y un máximo de crecimiento del orden del 2.5 por ciento, porcentajes muy modestos para las aspiraciones y promesas del régimen de la 4T. A lo más que aspira el gobierno actual es a crecer menos que el gobierno anterior. Importa aclarar, no obstante, que hay analistas competentes que consideran que el crecimiento económico previsto por el gobierno está sobreestimado.

Los programas de Transferencia Monetaria Directa siguen siendo los programas más importantes del régimen de la 4T. Ayudas para las personas de la tercera edad, de 68 años o más, el accidentado y problemático programa de Jóvenes Construyendo el Futuro (apenas se informó que en Morelos se manifestaron becarios de este programa acusando a funcionarios de desviar recursos del programa y de desconocer empresas donde han venido laborando), las Becas Benito Juárez y otros muy parecidos que tienen en común el reparto de dinero proveniente de los impuestos entre la gente. Se consideran tan importantes estos programas que la Secretaría del Bienestar, encargada de operar varios de ellos, se ha reservado un importante aumento en su gasto de propaganda y evaluación del orden del 400 por ciento, la partida correspondiente pasaría de mil 103 millones 253 mil pesos, asignados en 2019, a 4 mil 239 millones 402 mil pesos en el 2020 y, además, el gobierno federal destinará 298 mil 709 millones de pesos a 17 programas, cantidad muy superior a la destinada a seguridad ya que se solicitó para la secretaría del ramo y la Fiscalía General de la República (PGR) 77 mil 353 millones de pesos, lo que significa un poco menos de 26 por ciento de lo requerido para los programas sociales.

De acuerdo con el proyecto de ingresos y egresos que comento, presentado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público para el año 2020, Michoacán sería uno de los estados que recibirían menos recursos reales ya que, en términos nominales el proyecto prevé un aumento de mil 926 millones de pesos, pero en términos reales es una disminución de 0.39 por ciento. En efecto, en este 2019, de los fondos 28 y 33, al estado se le asignaron 60 mil 292 millones de pesos y para el próximo año el monto ascenderá a 62 mil 218 millones de pesos, aumento que es menor al índice inflacionario, por lo que en términos reales se dispondrá de menos recursos.

Ahora bien, mientras que se informa que "pierde fuerza el incremento de los salarios" ya que los aumentos contractuales pactados recientemente perdieron distancia con respecto a la inflación y mientras que se anuncia que la creación de empleos formales es la más baja de los últimos diez años, el proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación, prevé que el gobierno federal funcione el año que entra con 10 mil 272 servidores públicos menos. El combate a la corrupción se instala con despidos masivos en la austeridad republicana.

El Ramo 23, la partida que se utilizaba para obras básicas de agua potable, drenaje, pavimento, escuelas, clínicas, etc., se sigue considerando, por parte del presidente de la república, como la partida de los moches y las tranzas y, lejos de tratar de corregir las desviaciones que pudieran existir, prácticamente se tiene cancelada. Importa mucho decir que los estados y municipios carecerán de estos recursos para promover el desarrollo y el crecimiento de la economía por la vía de una inversión vigorosa que promueva el empleo y las mejores condiciones de vida de la población. Los recursos destinados por el gobierno federal a obra pública se encuentran ya en el menor nivel de los últimos once años, el rezago más acusado es tanto, el gasto en educación que ya tiene cuatro años seguidos reduciéndose, como el gasto en agua potable y alcantarillado que se encuentra en su peor nivel en los últimos 15 años.

El camino para una vida más digna pasa por el aumento del gasto, pasa por el aumento en la inversión física que posibilite, no solamente regalar dinero, sino dar empleo y pagar mejores salarios. Se necesita un Estado fuerte con recursos suficientes para promover el crecimiento y, consecuentemente, una mejor distribución de la riqueza. La medida de combatir la pobreza extrema y la pobreza simple, tener un país más equitativo, es una urgente medida estratégica para un México mejor, no debemos olvidar que cada vez es mayor la cantidad de mexicanos y, quizá más grave, de mexicanos jóvenes que no tienen nada que perder.

  • Etiquetas:

0 Comentarios:

Dejar un Comentario

Su dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados *

TRABAJOS ESPECIALES

Ver más

FOTOGALERÍAS