A unos días de finalizar el año 2020, trascendió en la opinión pública que al presidente Andrés Manuel López Obrador le preocupa la alianza opositora que conforman los partidos Revolucionario Institucional, Acción Nacional y de la Revolución Democrática y en algunas notas periodísticas se maneja que esa es la razón por la que volvió a arremeter contra esta alianza. Es sabido que el inquilino del Palacio Nacional tiene un total desprecio al conocimiento científico y una persistencia a negar y tergiversar la realidad, pero para esta vez dijo poder demostrar ‘técnica y científicamente’ que el objetivo de la alianza opositora es quitarles el presupuesto a los pobres. Con lo cual, se ve que pretende hacer valer sus acusaciones.
El tabasqueño acusó, poniendo como ejemplo su reforma aprobada para elevar a rango Constitucional los apoyos sociales a adultos mayores, niños con discapacidad y estudiantes de escasos recursos, que hace menos de un año, esos de la alianza, votaron en contra de la pensión. Es indudable que estos señalamientos, entre otros que hace diariamente el mandatario federal, a muchos mexicanos poco informados harán suyas estas acusaciones pues, a pesar de que estos programas asistenciales existen desde hace algunas décadas, en ninguno de los sexenios anteriores fueron manejados con tanta presunción como lo está haciendo el gobierno lopezobadorista, tratando de hacer creer que con estas dádivas efectivamente se está atacando la pobreza en que están sumidos millones y millones de mexicanos.
En efecto, pese a que en las administraciones federales priistas y panistas los apoyos asistenciales se entregaban y vigilaban con mecanismos muchos más eficaces que la actual administración morenista, no se sabe que en alguna de ellas se hayan manejado como programas estelares. Asimismo, contrario a la acusación perversa de los morenistas en el sentido de que los críticos de su jefe e ideólogo Andrés Manuel López Obrador nunca dijeron nada contra los gobiernos "neoliberales” y ahora lo critican fuertemente con el fin de desprestigiar su gobierno; desde los mismos sexenios anteriores al lopezobradorismo, varios expertos en políticas económicas y sociales, así como, organismos encargados de medir la pobreza y la desigualdad en nuestro país como el Coneval, con base a las cifras del Inegi dieron a conocer que durante el periodo 2008-2018 el número de personas en situación de pobreza pasó de 49.5 a 52.4 millones, a pesar que desde hace varios años la política social de apoyar con recursos en forma directa a la gente pobre ha sido la prioridad.
En estos dos años de gobierno morenista, de acuerdo con datos del Inegi, la pobreza ha aumentado en más de 10 millones de personas, gran parte se debe al impacto económico de la pandemia, pero ya desde el año pasado la falta de crecimiento económico y del empleo provocó el aumento de la pobreza, aún con el incremento de los programas sociales. Como van las cosas, el sexenio de la 4T será en el que aumente más el número de pobres y volverá a poner en evidencia el fracaso de una política social que no va de la mano con el crecimiento económico y de la creación de empleos dignos. Lo que implica que la supuesta defensa al presupuesto de los pobres es una estrategia electoral de López Obrador. No le interesa y no puede acabar con la pobreza y solamente está buscando afanosamente convencer a los electores que vuelvan a votar por Morena.
Tan solo con el obscuro panorama en que ha sumido la 4T al pueblo mexicano, queda claro que si la mencionada Alianza Opositora no logra arrebatarles el poder a los morenistas no es porque AMLO sea el mejor presidente, como dicen sus defensores gratuitos, sino porque los partidos que lo conforman no logran o no están dispuestos a corregir los vicios y errores que los llevaron a la derrota, ya que además de lo descrito párrafos arriba hay dos problemas candentes en México que demuestran el pésimo gobierno de Morena y Andrés Manuel López Obrador. Veamos:
En Tabasco, tras casi tres meses de las inundaciones, gracias a las lluvias torrenciales y al desfogue de la presa "Peñitas&rdquo, ordenada por el Gobierno federal, están afectadas, en mayor o menor medida, miles y miles de viviendas, cientos de miles de tabasqueños perdieron todo lo que habían construido en su vida y ahora padecen hambre y la inacción de Morena. Ahora el gobierno inició un programa para supuestamente ayudar a quienes deben reparar sus viviendas. Sin embargo, AMLO destinó únicamente 10 mil pesos a cada familia con pérdidas, lo que realmente no es una ayuda a los damnificados. Aunado a esto, el censo de beneficiarios fue levantado por los servidores de la nación, que son un grupo de asalariados de filiación morenista cuya tarea principal es el proselitismo electoral de Morena. No se trató de un censo para ayudar, sino de un censo electoral. Es decir, ahí tenemos ya un gran problema.
A todos los beneficiarios se les ayudará con 10 mil pesos para la reconstrucción de sus viviendas. De qué tipo de viviendas hablan, porque con 10 mil pesos no reconstruyes una vivienda ni por error. De aquí sólo se desprende una conclusión: el dinero es sólo un apoyo con fines electorales, es decir, que busca ganarse, una vez más, la confianza de quienes no tienen nada en favor de Morena. Eso es lo único que le importa a López Obrador. Hay consenso entre los damnificados de que la ayuda del gobierno es tardía y totalmente insuficiente.
El segundo problema es el coronavirus. Debido a las pésimas decisiones de López Obrador, México se ha convertido en un país con casi millón y medio de casos registrados, al momento de redactar esta colaboración hay 121,837 muertes. Asimismo, en redes sociales circulan imágenes y comentarios, revelando que en la adquisición de la vacuna contra la covid-19, el gobierno federal hace más espectáculo cuyo costo, supera al precio de las vacunas compradas.
Estos dos problemas brevemente descritos, demuestran que AMLO y sus seguidores están jugando irresponsablemente con la vida de los mexicanos. Por lo que el pueblo de México debe aprender de su cruda realidad y los afectados, unidos en un frente único se deben prestar a quitarles el poder a los morenistas, a través del voto masivo. Pues es evidente que será un error volver a votar por Morena en las elecciones de 2021. Es la oportunidad de quitar a los falsos redentores, ¡aprovechémosla!
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