Influencias poderosas, un llamado a la paz y un minuto de silencio bastaron para resolver el problema del fútbol mexicano, que vivió uno de los momentos más lamentables en su historia luego de los acontecimientos violentos en el estadio Corregidora, en el partido entre Gallos Blancos de Querétaro y Atlas, de Guadalajara, Jalisco. Vergonzoso acontecimiento por el que todo el mundo tiene los ojos puestos en México, y que afortunadamente sólo dejó un saldo de 26 personas graves, que fueron dadas de alta de los hospitales en que fueron atendidos.
"Pedimos a los fanáticos que se unan a Concacaf y a los clubes para observar un momento de silencio, para reflexionar sobre los horribles actos de violencia que ocurrieron durante el fin de semana en Querétaro, México, y dejar en claro que este tipo de comportamientos no tienen cabida en el fútbol ni en la sociedad. ¡No más violencia!" dijo el representante del organismo, previo al partido de cuartos de final, entre los equipos de la MLS, correspondiente a la Liga de Campeones de la Concacaf, a realizarse en Seattle, EU. entre el Sounders FC vs León, de México
Según los presidentes de la Asamblea de Clubes de la Liga MX, Mikel Arriola y de la Federación Mexicana de Fútbol, Yon de Luisa, en su sesión extraordinaria realizada el 8 de marzo, dijeron haberse aprobado sanciones ejemplares para los responsables y una serie de medidas de control para los grupos de animación, para detener la violencia en los estadios y no se repitan actos de salvajismo en los juegos de fútbol; entre ellas:
Según el artículo 47 del Reglamento General, Gallos Blancos, las Fuerzas Básicas y Femenil deben ser sancionados durante un año al jugar todos los partidos como local a puerta cerrada; con una sanción económica; el Grupo de Animación de Querétaro (es decir, la barra de los Gallos) está impedido para asistir durante tres años a los partidos como local, etcétera.
Como Medidas de Control de la LIGA MX, se impedirá el ingreso de "Grupos de Animación" visitantes a cualquier estadio de la LIGA MX; la inhabilitación de la administración integrada por Gabriel Solares, Adolfo Ríos, Greg Taylor y Manuel Velarde por cinco años en cualquier actividad de gestión y /o administración relacionada a cualquier club afiliado a la FMF.
El titular original de los derechos de afiliación Jorge Hank Inzunza, tomará la administración del equipo con la condición de que lo ponga a la venta antes de la terminación del año 2022; a las personas culpables por los hechos acontecidos en el estadio La Corregidora se les prohibió de por vida el ingreso a cualquier estadio de fútbol; todos los clubes deberán contar con un proceso obligatorio de credencialización de sus “barras” para ingresar a su zona destinada en el estadio, y el manejo de estas será por las autoridades estatales, municipales y/o públicas, quedando prohibido los operativos con elementos de seguridad privada, etcétera.
Supuestamente se está “sancionando” al dueño del equipo, y se está sancionando a los jugadores víctimas del jugoso negocio del fútbol, a las barras de los Gallos y Atlas, a los participantes del salvaje espectáculo ya encarcelados, pero, ¿habrá igualmente castigo para los verdaderos responsables de semejante acto de barbarie que deja mal parados a los queretanos y mexicanos en general que sabrá Dios desde cuándo venían cometiendo estos actos de corrupción, al permitir eventos sin cumplir con todos los protocolos para garantizar la seguridad de todos los asistentes? Poco se dice de esto.
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