En Tehuacán, el segundo municipio más importante del estado de Puebla, a casi un año de la detención por diversos actos de corrupción de Felipe Patjane, existe un desorden político.Desde noviembre de 2019, Tehuacán quedó sin presidente municipal.Hasta el 26 de junio de 2020, en que Andrés Artemio Caballero López, protestó como edil suplente.Sin embargo, el Congreso del estado inició el proceso de disolución del cabildo de Tehuacán y, nuevamente, el municipio se desestabilizó políticamente, pues con 26 votos a favor, 9 en contra y 3 abstenciones, los diputados miembros del Congreso estatal aprobaron la disolución del Cabildo de Tehuacán y la formación de un consejo municipal, aclarando que ésta no entrará en vigor sino hasta que la Suprema Corte de Justicia de la Nación, tome la resolución final sobre la controversia constitucional del presidente municipal suplente.
En Ajalpan existe un vacío de poder, no se cuenta con presidente municipal desde hace siete meses cuando Ignacio Salvador pidió licencia por motivos de salud, pero que en verdad fue porque se le relacionó con el crimen organizado, después de una balacera entre sicarios y policías.A partir de ahí, tanto el presidente como su hijo, que había arribado como su suplente al cargo, están prófugos de la justicia pues cuentan con sendas órdenes de aprehensión, según lo dicho por el propio gobernador.A esto hay que agregar la solicitud desde el mes de abril en la que un grupo de ajalpenses pide la revocación de mandato de todo el Ayuntamiento por actos de corrupción y colusión con bandas delincuenciales.
Estos conflictos políticos tienen cosas en común que hay que destacar: Tanto Felipe Patjane como Nacho Salvador, hasta el momento de entrar en desgracia, eran de Morena.Patjane fue candidato de Morena y ganó con la ola morenista; Nacho Salvador ganó con el cobijo del PAN, pero apoyó a Barbosa en las elecciones de 2019 y se convirtió al morenismo.A ambos se les acusa por actos fuera de la ley y por actos de corrupción.Sin embargo, ambos habían caído de la gracia del señor gobernador.Felipe no se sometió a las órdenes de Barbosa, se salió de su "control político".Nacho Salvador, nunca pensó que su apoyo a Martha Erika, tarde que temprano le costaría no solo la presidencia sino su propia libertad; tanto fue así que pretendía el aval de Barbosa para que su hijo se convirtiera en candidato de Morena a presidente municipal de Ajalpan y él a diputado federal por el mismo partido.
La voz del pueblo, que es la voz de Dios, dice que en los dos casos se trató de que los personajes involucrados dieron motivos para que, bajo un ropaje de combate a la corrupción de parte de Barbosa, se llevara a cabo sobre ellos, con todo el poder del estado, una vendetta; es decir, una venganza derivada de rencillas entre clanes o grupos rivales.En la revista buzos de la noticia se lee que José Juan Espinosa diputado local afirmó: "es bien sabido que Miguel Barbosa apadrinó a Felipe Patjane y después, en venganza, lo convirtió en el primer preso político de su quinquenio.Se estuvo dilatando la toma de protesta del suplente porque así conviene al Gobierno del Estado y sus secuaces".
Tanto en Tehuacán como en Ajalpan, sin importar el tiempo ni las graves consecuencias del desgobierno en estos municipios, la mayoría morenista en el Congreso ha hecho hasta lo imposible por aplazar y aplazar la solución del conflicto; en ambos casos se adivina que pretenderán imponer concejos municipales a modo, para influir en las elecciones del 2021.
Los habitantes de estos municipios poblanos tienen la desgracia de haber sufrido serios recortes en sus participaciones y de no poder gestionar más recursos federales para obras públicas prioritarias y de impacto, como les pasa a todos los municipios de México.Pero, además, tienen ahora la desgracia de sufrir la ingobernabilidad, con lo que sus ciudades, colonias y comunidades perdieron prácticamente tres años de desarrollo y ahora se debaten en un fango de atraso, pobreza, inseguridad e insalubridad.Tienen la desgracia de ser gobernados por una siniestra combinación de ignorancia, manía por el poder, arrogancia y afán de venganza política contra sus opositores, tienen la desgracia de ser gobernados por Morena.
Para sacudirnos de este mal gobierno debemos concientizarnos y unirnos para que en este 2021 no demos ni un voto a Morena, porque Morena no sabe gobernar para el bienestar del pueblo.
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