Es muy grato para todos los antorchistas de Veracruz saber que nuestra compañera licenciada Janeth García Cruz, dirigente de Antorcha en Córdoba y la región, ha sido confirmada como aspirante única a la precandidatura del PRI, para encabezar a la coalición Va por México, integrada además por el PAN y el PRD, en la contienda electoral por la diputación federal del Distrito 16 con cabecera en la ciudad de los 30 caballeros.
Los antorchistas fuimos de los primeros en advertir que los diputados federales de Morena traicionarían al pueblo que los eligió con su voto y se convertirían en sumisos empleados del presidente López Obrador, fanáticos por ceguera e interés, cuya función sería levantar la mano en el Congreso de la Unión para aprobar sin cuestionamiento todas las reformas constitucionales y legales, así como el presupuesto y gasto del Gobierno federal, tal y como los propusiera el presidente de la República. Sin importar que tan beneficioso o perjudicial fuera para los mexicanos.
La realidad nos ha demostrado que estábamos en lo correcto. Fueron los diputados federales morenistas, los que con su mayoría en el Congreso de la Unión, aprobaron la eliminación de programas sociales claves para la población como Prospera, el Seguro Popular, las estancias infantiles, los programas de empleo temporal, los apoyos en fertilizantes y semillas mejoradas a los campesinos en época de siembra; fueron ellos quienes eliminaron el ramo 023 dentro del Presupuesto de Egresos de la Federación (compuesto por el dinero que pagamos todos los mexicanos) y recortaron los recursos destinados a los estados y municipios, con lo que impidieron que éstos pudieran atender adecuadamente la dotación de servicios básicos requeridos por su población como agua potable, drenaje, luz eléctrica, pavimentaciones, condenando a millones de mexicanos a más miseria.
Fue la mayoría de los diputados federales de Morena quienes rechazaron las propuestas de diversos sectores de la población de que se instrumentara un plan económico para apoyar a la gente que perdió sus empleos o fuentes de trabajo en el sector informal como consecuencia de la pandemia, provocando que el número de mexicanos pobres se elevara en 10 millones más. Fueron quienes no presupuestaron el dinero suficiente para el sector salud, para el equipamiento de hospitales y clínicas, para la compra de instrumentación e insumos para el personal médico y para la adquisición de medicamentos suficientes, provocando que México ocupe el deshonroso tecer lugar mundial en el número de fallecidos por covid-19, con más de 160 mil víctimas.
Así las cosas, los antorchistas planteamos con toda claridad que era necesario que, en las elecciones de 2021 se impida a Morena ganar la mayoría de las 500 diputaciones del Congreso, por lo que se volvía imperante la unión de todas las fuerzas opositoras del país. Afortunadamente así ocurrió. Sin embargo, los antorchistas también fuimos enfáticos en decir que tal alianza solo podía tener posibilidades de triunfo si escuchaba y recogía las demandas del pueblo pobre de México, la absoluta mayoría en este país, y si permitía la postulación de representantes genuinos de estas clases sociales.
En este sentido, no se falta a la verdad si se afirma que la licenciada en Educación, Janeth García Cruz, cumple cabalmente este requisito. No sólo porque es hija de gente humilde, sino porque prácticamente toda su vida, desde su época como líder estudiantil, se ha dedicado a defender las causas de los más desfavorecidos del país. Su capacidad de trabajo y su sensibilidad con la población, le han valido el cariño y el respaldo de más de 30 mil antorchistas de la región de Córdoba, uno de los trabajos más grandes de Antorcha en Veracruz.
Como luchadora social ha logrado la fundación de colonias, dotando de un pedazo de patria a más de 5 mil personas que no tenían ninguno; ha contribuido en la fundación de escuelas y ejidos; ha gestionado apoyos de vivienda, servicios básicos como agua potable, drenaje, electrificaciones y pavimentaciones para cientos de colonias y comunidades campesinas, así como la construcción de carreteras y centros de salud, ha impulsado el deporte y la cultura con la gestión de espacios dignos para practicarlos y con la formación de clubes de todas las edades, llevando felicidad a la gente.
Naturalmente no lo ha hecho sola, sino con el respaldo de la propia gente organizada, por ello, quizá, su mayor mérito sea haber convencido a la gente humilde de que una vida mejor y más digna es perfectamente posible, haber contribuido en educar al pueblo, enseñándole a defender sus derechos. No es, por tanto, ninguna improvisada en la política, a pesar de ser una mujer joven. Fue diputada local en la LXIV Legislatura de Veracruz, desde donde hizo escuchar la voz de los sectores humildes del estado.
Janeth García Cruz es solo la cabeza visible de todos esos mexicanos y en el Congreso de la Unión contribuirá a evitar que se sigan cometiendo más injusticias en contra del pueblo pobre durante los últimos 3 años del gobierno de López Obrador, ya no solo de los habitantes del Distrito 16 de Córdoba, sino del resto de ciudadanos del país.
Ya como candidata, seguramente en algunos meses, recorrerá los 9 municipios de su distrito en busca de la unidad de todos los sectores progresistas para ganar un escaño en la Cámara de Diputados. Ojalá todos los que comparten en común el repudio a los atropellos cometidos por Morena le den su respaldo, indistintamente del sector o clase social a la que pertenezcan.
Ciertamente todos los mexicanos deben ser escuchados y sus demandas deben ser atendidas; sin embargo, también es cierto que se debe evitar que la brecha de desigualdad social en México, el verdadero problema del país, se siga ensanchando como con Morena, es de vida o muerte impedir que la pobreza de la mayoría de los mexicanos se agudice más, porque podría provocar una ruptura en el tejido social que ponga en peligro la vida y la seguridad de todos, incluyendo a quienes tienen mejores posibilidades de vida. Una legisladora federal surgida de las entrañas del pueblo pobre no es un peligro para la sociedad, por el contrario, puede ser una esperanza genuina para que las cosas vayan mejor que ahora.
0 Comentarios:
Dejar un Comentario