El presidente Andrés Manuel López Obrador y su 4T han llegado al límite, su administración está quebrada, después de tres derrotas se encuentra en un laberinto donde puede perder todo. Desde el inicio de su administración, su política ha tenido el sello de la confusión, de la contradicción, porque prometió muchas cosas, pero en los hechos está haciendo todo lo contrario; negocios turbios, dónde están involucrados funcionarios de su gabinete, familiares involucrados en negocios ilícitos y la compra de casas por su hijo con dinero de procedencia dudosa.
Además, las ocurrencias son el sello de su administración, al destinar la mayoría de sus recursos a unas cuantas obras que no funcionan ni prestan beneficio al país, el mal uso del poder del Estado utilizado para someter las opiniones contrarias de líderes, periodistas, académicos, la actitud tomada ante el crimen organizado, con su política de abrazos y no balazos que le ha costado al país más de 50 mil muertos. El mal trato a los migrantes con su famosa austeridad, reduciendo los presupuestos y comprometiéndose con los estados unidos para que México haga el trabajo sucio, provocando la muerte de 39 hermanos en Ciudad Juárez, Chihuahua.
La realidad lo alcanzó, 39 muertos calcinados por la irresponsabilidad del Estado mexicano que mal dirige el presidente, comportándose como un presidente invencible, ajeno al dolor del pueblo pobre, ni un pésame a los familiares de las víctimas, se tuvieron que conformar con los regaños y burlas. Por otro lado, quedó claro de que son capaces los morenistas por imponer a sus corcholatas.
En pocos días, la administración ha sufrido la derrota del famoso plan B, la elección de Norma Piña al frente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), ha provocado que el presidente pierda piso, éste acontecimiento lo tiene fuera de sí, y hace que despida odio, ambición, venganza y negligencia criminal. En pocos días ha quedado desnudado ante la opinión pública nacional, perdiendo el respeto y sin autoridad para exigir los derechos humanos de nuestros paisanos que de igual forma viven un infierno en el país vecino.
La 4T no ayuda a los migrantes, los encarcela, los deja morir de sed, lo que pedían era agua, la respuesta fue un horno crematorio, así lo dicen los videos publicados a nivel nacional. No quieren aceptar que esto es solo una consecuencia del sistema neoliberal que nos ha demostrado en los años que ha gobernado, que es bueno para crear riqueza pero muy malo para repartirla de tal manera que en un extremo unos cuantos mega millonarios controlan la riqueza y en el otro polo millones de pobres se mueren de hambre por lo que tiene que abandonar su país en busca de trabajo.
Esta mala política nos puede llevar al quiebre de todo el país, el presidente piensa que tiene la razón, que no necesita la opinión de otros líderes, de personas que basadas en su experiencia puedan aportar ideas para ayudar al país. El presidente cree que es un gran mérito el no guardar discreción, que sus ocurrencias son una virtud. Así que ataca a todo mundo, miente y se burla del pueblo que votó por él.
Estos arranques supuestamente de sinceridad tienen como resultado una boca que pronuncia todo lo que se le ocurre, sin reflexionar, con ausencia de un análisis riguroso. Esta manera de alterar la realidad está llegando al límite que llevará al país al fracaso.
En Ciudad Juárez, Chihuahua, la gente le protestó al presidente, por la negligencia de la dependencia federal así como de la autoridad municipal del partido de Morena. La respuesta a los familiares de las víctimas por el presidente fue como de costumbre ,les contestó con prepotencia, diciendo que no eran maneras de manifestarse. Pero cuando él se manifestaba si era correcto, bien dice el dicho popular que no es lo mismo ser cantinero que borracho. Lo primero que se le vino a la cabeza fue echarle la culpa a la gobernadora Maru Campos.
Con una autoridad acelerada, que no se detiene a pensar un momento lo que va a decir, que no es capaz de autocriticarse, que quiere siempre imponer su capricho con una boca suelta, floja, un cerebro lleno de ilusiones fuera de la realidad. Así el país no podrá salir de sus problemas ,es más fácil mandar limpiar las calles de migrantes, de vendedores ambulantes para inaugurar bancos de bienestar, que son , bancos del malestar, no es capaz de encontrar el verdadero fondo del problema, que radica en su mala política migratoria que pone al país al servicio de los gringos, Estados Unidos le envía a México todos los migrantes que atrapa en sus fronteras, especialmente cubanos, venezolanos, nicaragüenses, haitianos, además el Gobierno federal tiene la orden de jugar el papel de barrera militar, policiaca y para someter a los miles de migrantes ocupa a la guardia nacional.
Si a esto le sumamos que la nueva administración redujo el presupuesto al Instituto Nacional de Migración (INM), el verdadero fondo del problema, además de la explotación, la inseguridad, el hambre, es que la 4T está perdida, se encuentra en un laberinto que por su prepotencia, por el abuso del poder violando la ley, matando lo poco de democracia al apoderarse del Instituto Nacional Electoral (INE) por sus pistolas puede llevar a México al despeñadero. Ahora tratan de culpar a los migrantes diciendo que ellos solos se quemaron, intentan culpar a funcionarios menores.
Señor presidente, maquillando la realidad no se arregla los problemas, es necesario enfrentarlos,con mentiras logrará que crezca el descontento nacional y seguirán los descalabros .
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