El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) anunció, desde finales de mayo, la presencia de 40 huracanes, 19 en el Océano Pacífico y 21 en el Océano Atlántico; esta semana el huracán Blas, el segundo de la temporada en el Pacífico después de Ágatha, ha provocado las primeras inundaciones en la capital de Nayarit.
La humanidad está viviendo la era de la ciencia y la tecnología donde ahora podemos fácilmente y de manera rápida saber lo que sucederá en cuanto a fenómenos naturales se refiere; los medios de comunicación también juegan un papel importante en la difusión de las noticias, la radio, la televisión, y ahora la internet, nos informan a detalle; ambas cosas conjugadas, medios de comunicación, ciencia y tecnología, ayudan a prever los peligros que pudieran sucederle a la humanidad.
A pesar del gran avance en la ciencia y la tecnología, los mexicanos vamos unos pasos atrás comparados con otros países desarrollados; aquí poco se invierte para desarrollar la ciencia, precisamente el gobierno morenista de López Obrador ha hecho recortes a este valiosísimo sector, con su ya famosa austeridad republicana. Con todo eso, el Servicio Meteorológico Nacional cumple su papel correctamente, informa con tiempo de los fenómenos naturales, así sucedió hace escasas semanas cuando se hizo el anuncio de la temporada de huracanes. Lamentablemente poco caso hacen las autoridades sobre estos anuncios, o, en el mejor de los casos, avisan que habrá lluvias. ¿Para qué el SMN informa realmente? Claro, la población debe estar alerta, debe protegerse, tratar de cuidar lo poco o mucho que haya de pertenencias, sin embargo, quienes realmente deberían tomar en cuenta los anuncios del SMN, debe ser el gobierno en turno.
El claro ejemplo es la capital nayarita, Tepic, que desde las campañas políticas y ya ahora en el poder morenista de Geraldine Ponce se ha dicho y divulgado que Tepic sonríe, una parte de la población ha creído en ello, otra parte, no.
Ahora que comenzaron las lluvias se ha inundado gran parte de la capital, usuarios de redes sociales dieron a conocer a través de fotografías y videos las inundaciones en el boulevard Gobernadores y las avenidas Independencia, De la Cultura, Insurgentes, colonia Caja de Agua, el canal cercano a la clínica 24 del IMSS se desbordó, se registraron también inundaciones en colonia La Peñita y la 2 de Agosto; trabajadores del Hospital Civil compartieron imágenes del área de pediatría inundada y aun así atendieron los pacientes.
La gente ha comenzado a hacer uso de las redes sociales para mostrar su inconformidad hacia el gobierno morenista, hacia la alcaldesa que, lamentablemente (y como anillo al dedo) se contagió de covid-19. La ciudad es un caos y las lluvias apenas comienzan. Tepic no sonríe.
A casi un año de que morena tomara el poder en Tepic y en Nayarit, las obras que se hicieron fueron de embellecimiento de la ciudad, cosa que, como bien ahora podemos percatarnos, sirve, pero de no de mucho cuando los problemas reales, graves y que más le duelen a la población están sepultadas entre el lodo, aguas negras y son llevadas por la fuerza del agua.
Por su parte, la presidenta municipal Geraldine Ponce calificó como lluvia atípica lo ocurrido, en contraste con su comentario, se encuentra la opinión del doctor Mario Alberto Ortiz Jiménez que menciona: “Ayer cayó una tormenta de 80 mm en la ciudad. ¿Atípica? En realidad, fue extrema”.
Nosotros estamos de acuerdo con la opinión de Ortiz Jiménez cuando menciona que hacen falta obras de infraestructura pluvial en la ciudad, es urgente que los tres niveles de gobierno – morenistas todos, preocupados todos por la vida del pueblo- hagan algo importante y relevante por los nayaritas.
Los tepicenses reclaman a la presidenta municipal Geraldine Ponce que no se hayan realizado los trabajos para prevenir daños a casas y automóviles. La falta de una infraestructura pluvial no ha sido prioridad en este nuevo gobierno morenista, se han limitado - y bajo presión- al cobro de multas e impuestos olvidando la necesidad urgente que tiene la capital de que su gobierno se ponga a trabajar en beneficio de los más de 400 mil habitantes que hay en ella.
Hacemos un llamado respetuoso a las autoridades correspondientes, municipal, estatal y federal para que se
considere la solución urgente a este problema que enfrentan los capitalinos.
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