A más de un año de pandemia es evidente que la educación a distancia no está dando los resultados previstos, el aprendizaje deficiente además de que aún no estamos en condiciones para esta nueva realidad.
La situación en la que se encuentran la gran mayoría de las instituciones educativas en estos momentos que se habla de un eventual regreso a clases presenciales, al implementar los programas para continuar con la educación desde casa, generó el vacío en las escuelas de todos los niveles educativos y como consecuencia de ello el aumento paulatino del deterioro de las instalaciones ante la falta de mantenimiento, sin mencionar el hurto de equipos de trabajo de las aulas y talleres de las instituciones.
El abandono en el que se encuentran los planteles educativos en el país, son la consecuencia directa de haber cerrado sus puertas como medida sanitaria a causa de la pandemia provocada por el virus del SARS-CoV-2, medidas necesarias para evitar la propagación del virus y así preservar la vida de millones de niños y jóvenes.
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) informó que sólo el 62% de los planteles educativos en México disponía de agua todos los días de la semana, 19% carecía de inodoros suficientes para los estudiantes y 58% no ofrecía agua potable. Respecto al porcentaje de los baños en escuelas que cuentan con condiciones de limpieza y seguridad para niños y adolescentes, la UNICEF detalló que es del 40%.
En Durango, de acuerdos a los datos de la Secretaría de Educación del Estado de Durango (SEED), 32 escuelas de nivel básico han sido afectados ante el incremento de los robos, el 15 por ciento tienen más de un robo como antecedente y existe una con hasta ocho atracos, en algunos de estos atracos se han llevado equipo de cómputo de estos centros educativos, desafortunadamente el Gobierno morenista, no tiene un plan concreto, además de no querer invertir el recurso necesario para la rehabilitación de los miles de escuelas que se encuentran en deterioro.
En México como consecuencia de las medidas de confinamiento implementadas por el gobierno federal, se estima que 2.83 millones de estudiantes de educación básica abandonaron la escuela entre septiembre del año pasado y mayo de 2021, En Durango dos de cada 10 alumnos desertaron de la educación básica durante el presente ciclo escolar, debido a las complicaciones derivadas de la pandemia. De continuar así, las cifras continuarán incrementando, es necesario el regreso a las clases presenciales, pero para ello el Gobierno federal debe dar las condiciones necesarias.
Los motivos por las que miles de estudiantes y padres de familia optan por no continuar con los estudios, son principalmente la falta de recursos, ya que la mayoría no cuenta con internet siendo servicio vital para poder tomar clases en línea, además de que las familias debían desembolsar dinero para la compra de celulares, tabletas o computadoras, con continuas recargas telefónicas.
Me veo en la obligación de exigir desde aquí, en apoyo a los estudiantes adheridos a la FNERRR, que se vacune a la totalidad de los estudiantes y al personal educativo, antes de regresar a las aulas de manera presencial, estoy seguro de que el aprovechamiento es mayor, cuando los estudiantes acuden a la escuela presencialmente e interactúan alumnos y maestros, por eso insisto en que es necesario el retorno a las aulas, pero no en las condiciones actuales.
Apoyo las demandas de los estudiantes de la FNERRR y los maestros adheridos a Antorcha Magisterial que quieren regresar a clases de manera responsable, es por eso que exijo al Gobierno federal y a la Secretaría de Educación Pública, para que agilicen la vacunación e implemente las medidas necesarias para salvaguardar la integridad y salud de todos los estudiantes, docentes y padres de familia.
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