Un estudio de la revista científica The Lancet que se publicó hace unos días, señala a México como el país en el que más niños se han quedado huérfanos debido a que uno o dos de sus padres murieron a causa de la covid-19. El estudio “Estimaciones mínimas mundiales de niños afectados por orfandad asociada a la Covid-19 y muerte de cuidadores”, sostiene que nuestro país cuenta con 131 mil 325 casos de menores que han quedado en la orfandad durante la pandemia.
De ellos, desglosa el estudio publicado, 97 mil infantes en México sufrieron la muerte sólo de su padre, 33 mil 342 padecieron sólo el fallecimiento de su madre, mientras que hubo 32 casos en el que sufrieron la muerte de ambos. El estudio, con datos de 21 países, estima que, en lugares como Estados Unidos, Brasil y México, la tasa de mortalidad fue de, al menos, uno por cada mil niños.
Mientras tanto, las autoridades sanitarias del país, habían registrado hasta unos días, que han fallecido 109 niños por complicaciones relacionadas a la covid-19 y que hay 6,212 casos confirmados de contagios. Del total de menores de edad contagiados 1,741 son niños de 0 a 5 años, 1,559 tienen entre 6 y 11 años y 2,912 tienen entre 12 y 17 años.
De acuerdo con el doctor Emmanuel Sarmiento Hernández, director del Hospital Psiquiátrico Infantil “Dr. Juan N. Navarro”, señalo que los niños que son hospitalizados por casos de Covid-19 presentan estrés emocional, depresión, ansiedad de separación, procesos regresivos que dificultan el tratamiento médico, por lo que se recomienda la compañía de un familiar durante el proceso del tratamiento.
En Guanajuato los casos activos de covid-19 por grupos de edad han registrado un incremento del 49% en la población de menos de 19 años de junio a julio, de acuerdo a la información que dio Fátima Melchor Orozco, jefa de epidemiología de la Secretaria de Salud. El aumento de contagios se debe a que ni los niños ni los jóvenes han sido vacunados, por lo que es urgente que no sólo entre la población adulta, sino para toda la población en general se agilice la campaña de vacunación para evitar más contagios.
Y aunque este jueves se rompió récord de vacunación con un millón 376 mil dosis aplicadas y el promedio de vacunación en los últimos siete días llegó a 696,752 personas y en algunas partes del país se ha iniciado a inocular a los mayores de 18 años, sólo 23 millones de personas cuentan con el esquema completo de vacunación y otros 17 millones solo cuentan con una dosis de la vacuna, mientras sigue escalando la denominada tercera ola de contagios, los cuales se presentan principalmente en jóvenes y niños.
De ahí que, el llamado de López Obrador, para que se regrese a clases presenciales es una medida errónea, ya que las escuelas tuvieron que cerrar casi tan pronto como se abrieron pues se presentó un incremento de contagios. Cabe destacar y aplaudir, la lucha que vienen dando desde hace varios meses, por todo el país, los jóvenes de la Federación Nacional de Estudiantes Revolucionarios “Rafael Ramírez”, quienes, a través de marchas, cadenas humanas, denuncia en redes sociales y con la colocación de mantas en sus instituciones educativas, denuncian la mala gestión de la pandemia por parte del Gobierno federal, mostrando su inconformidad por mandarlos a la escuela sin vacunas. No hay duda, los estudiantes están en peligro y no deben regresar en agosto a clases, mientras no haya inmunidad colectiva.
Finalmente, y no menos importante, asociaciones y familiares de niños con cáncer han venido denunciando también que continua el desabasto de medicamentos oncológicos, mientras el gobierno federal minimiza la problemática. La Secretaria de Salud ha justificado las irregularidades del desabasto y retraso del medicamento como parte de los efectos del desmantelamiento de la complicidad entre autoridades pasadas y empresas, pero el dejar a los niños sin medicamento es sumamente irresponsable y dicha situación ha sido la causa de la muerte de más de 1,700 niñas y niños en nuestro país, aparte de las graves secuelas a otros miles de personas.
Estos problemas y otros como la inseguridad, el desempleo, el estancamiento económico, entre muchos otros más, demuestran que a través de la política implementada por López Obrador y su partido Morena no sacarán a nuestro país de la pobreza y por el contrario solo le han agudizado el dolor y sufrimiento lacerante que por muchos años han padecido millones de mexicanos que no tienen lo indispensable para tener una vida digna. Solo la unidad del pueblo trabajador educado y organizado lograrán un futuro mejor, menos injusto y más humano. Y ésa es la tarea.
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