MOVIMIENTO ANTORCHISTA NACIONAL

Oaxaca: pueblos pobres con burócratas caros

image

Los oaxaqueños, por una parte, tenemos que enfrentarnos y cargar como podamos, la falta de suministro de agua potable, falta de medicinas e insumos en hospitales y la creciente inseguridad en el estado y, por otra, a pesar de los discursos de austeridad en las altas esferas del gobierno, se da a conocer que hubo un aumento de 780 mdp en pago de burócratas ¿cómo la ve usted?

Lo peor de todo esto es que todo apunta a que, otra vez, como ya están acostumbrados los gobernantes y sobre todo, los del color guinda, con los dichosos subejercicios, a pesar de contar con recursos, la primavera oaxaqueña preferirá dejar sin obras y servicios elementales a los oaxaqueños. 

En Oaxaca, no hay progreso, no hay desarrollo, no hay obras sociales básicas, pero sí unos burócratas que se sirven con la cuchara grande, con el erario de los oaxaqueños.

Hacia allá apunta el informe de la Secretaría de Finanzas del gobierno de Oaxaca, que registró ingresos para el estado por el orden de 26 mil 399 millones de pesos, únicamente entre el primero de enero y el 31 de marzo de 2024, con lo que, de acuerdo con información oficial emitida por el Gobierno estatal, Oaxaca tuvo un aumento de 6.28 % en relación con los recursos obtenidos el año pasado durante el mismo periodo y que ascendieron a 23 mil 675 millones de pesos.

Sin embargo, a pesar de tal cantidad de recursos transferidos o cobrados directamente por el estado, únicamente fueron reportados como devengados 23 mil 366 millones de pesos; es decir, un total de 2 mil 973 millones de pesos no fueron utilizados y “quedan subejercidos”.

Ante dicha situación, aunque el gobernador del estado y su secretario general, Jesús Romero, en sus semaneras traten de limpiarse la cara y ataquen a las movilizaciones constantes (si no es que diarias) bajo el refrito de no más intermediarios, lo cierto es que, al parecer, el descontento social se debe a las fallas en el acceso a derechos y servicios que sin duda alguna se han agudizado durante los últimos meses.

Un ejemplo claro es San Simón Zahuatlán pues, cuatro años después de ser declarado el municipio más pobre del país, continúa hundido en el rezago, según el Coneval.

Esta situación es aún más grave cuando vemos que las condiciones no solo no cambiaron favorablemente sino que empeoraron, pues ahora, la población es afectada por una sequía que devastó el 90 % de su producción de maíz y frijol y que hoy mantiene en un 40 % sus reservas de agua.

Aunado a ello, la vida de las familias se ha complicado, según Fortino Nicolás, edil de San Simón Zahuatlán, pues en ese poblado, una pipa cuesta 5 mil pesos porque la trasladan desde la cabecera municipal, Huajuapan de León, que está a dos horas de distancia.

Por otra parte, refiere que la migración permanece en los niveles de antaño pues, a partir de marzo, Zahuatlán se vuelve un municipio semiabandonado ya que el 60 % de la gente se va al norte y centro del país y, del sistema de salud, mejor ni hablar pues está colapsado.

El hecho se retrata cuando los habitantes tienen que comprar hasta sus jeringas cada que van a la clínica o cuando las embarazadas tienen que dar a luz a mitad de camino.

Y como refiero en mi título, como vemos, Oaxaca es un estado con carencias sociales básicas, pero esto no es producto de la casualidad; por el contrario, se demuestra una vez más que quienes ostentan el poder solo en el discurso se refieren al desarrollo y bienestar, pues en los hechos lo que vemos es que mantienen a su pueblo en la pobreza y marginación, mientras esos que dijeron acabarían con la corrupción y serían austeros, en la entidad por lo menos, nos salen más caros.

Así lo refieren los mismos datos de la Secretaría de Finanzas, que es puntual al agregar que los mayores gastos ejercidos por el aparato de Gobierno ascendieron a 11 mil 541 millones de pesos por concepto de sueldos al personal de todas las dependencias, así pues, en pago de nómina, en una comparación entre el primer trimestre de 2023 y el primero de 2024, se registró un aumento de 783 millones de pesos, al pasar de 10 mil 758 millones de pesos a los 11 mil 541 millones de pesos antes descritos.

En resumen, en Oaxaca, no hay progreso, no hay desarrollo, no hay obras sociales básicas, pero sí unos burócratas que se sirven con la cuchara grande, con el erario de los oaxaqueños.

En resumidas palabras, nuestra entidad tiene un pueblo pobre con burócratas caros. Pero los oaxaqueños no debemos seguir permitiendo esto; cada día se hacen más visibles las injusticias de este Gobierno autollamado “primavera oaxaqueña” y por ello, es necesaria la unión de todos, para a una sola voz, exigir que se respeten nuestros derechos elementales a contar, por ejemplo, con agua potable, con servicios de salud y condiciones dignas en las escuelas, etcétera. No hay otro camino, la unidad hoy es prioridad.

0 Comentarios:

Dejar un Comentario

Su dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados *

TRABAJOS ESPECIALES

Ver más