De acuerdo con los últimos acontecimientos ocurridos en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, en donde aviones de Volaris casi chocan. Y se decía: “¡Hay un avión en la pista!”, “Aviones estuvieron cerca en el AICM”, “¡Hay un avión en la pista!”, revelan audios de la torre de control previo a incidente. “¡Susto en el aeropuerto!”, anunciaron los medios de comunicación en sus principales noticieros nocturnos.
Poco a poco se fueron aclarando los hechos. Dos aviones de Volaris estuvieron a punto de chocar: el avión 799 proveniente de Sinaloa y el avión con destino a Guatemala que se encontraba en la pista. Otros pilotos que grabaron lo que sucedía, en la pista 05 izquierda, alertaron al piloto que reaccionó a tiempo, por lo que este hizo una ida al aire a pocos metros del avión que estaba en tierra, de esta forma evitó una tragedia de proporciones incalculables, por los pasajeros, el personal aéreo, por los miles de litros de combustibles flamables que se manejan y las numerosas colonias que rodean al Aeropuerto.
Los pilotos dependen especialmente de la torre de control y han alertado del tráfico aéreo, han advertido sobre la falta de controladores aéreos y de infraestructura. La fatiga del personal, la falta de patrones de espera no planificados para los vuelos, situación que provoca que varios aviones aterricen de último momento, con poco combustible.
De acuerdo con los datos proporcionados a los medios, este incidente ocurrió a escasos días de la advertencia hecha por la Asociación Internacional de Pilotos de líneas aéreas, sobre los riesgos de seguridad en su aproximación al aeropuerto de la Ciudad de México, a raíz de la apertura del recién inaugurado aeropuerto internacional Felipe Ángeles, AIFA, obra emblemática de Andrés Manuel López Obrador y su Cuarta transformación.
Para los que conocen su trabajo, los pilotos, han señalado la poca capacitación del personal que rediseñó el espacio y cómo manejarlo. Según la Asociación de Pilotos, se conocen 17 eventos de alarma de proximidad contra el terreno, y señalan que son más frecuentes este tipo de alarmas al llegar al AICM, pero el gobierno no ha tomado cartas en el asunto porque está empeñado en deteriorar la función del AICM, para darle función al AIFA, que está destinado según expertos, a ser un aeropuerto principalmente para vuelos locales, debido a que tiene que compartir pistas con los aviones militares.
Incluso la limitada expectativa para el AIFA no se alcanzará, por problemas de convivencia con el AICM. Es decir, Santa Lucia no llegará a ser como el aeropuerto de Toluca, según explica Enrique Quintana, en El Financiero, tras el posible incidente entre los dos aviones de Volaris.
Luego de una reunión con directivos de diferentes líneas aéreas, se estableció la meta, de que al final del año operarán 100 rutas en el Aeropuerto Felipe Ángeles, las cuales, sumando a los aviones chárter y cargueros, llegarán a 200 operaciones diarias, que, de tener éxito, equivaldrá a 6 mil operaciones mensuales y una base anual, de 72 mil operaciones.
Comparando esta perspectiva con el mejor periodo de servicio del aeropuerto de Toluca, cuya cifra fue de 101 mil 695 operaciones, las operaciones de aeropuerto de Santa Lucía equivalen apenas al 71 por ciento.
Como hace siempre, López Obrador ha negado, en sus conferencias mañaneras, que la causa que provocó el peligroso incidente, del fin pasado de semana, entre los aviones de Volaris fue el rediseño del espacio aéreo; y así, una vez más, impone su criterio solo porque es presidente, y quiere justificar los miles de millones de pesos que le dio al Ejército Mexicano para ese aeropuerto, además de los miles de millones que tuvo que pagar con dinero de los mexicanos, a las empresas que habían contratado para el aeropuerto de Texcoco. Esperamos ser testigos de una tragedia más.
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