Para entender la pobreza en México, conviene recordar que la mediación oficial considera el ingreso promedio de los hogares y las carencias de nutrición adecuada, de acceso a servicios de salud, de educación, de seguridad social y de espacios y servicios básicos en la vivienda. Se considera que una persona se encuentra en situación de pobreza si tiene un ingreso que no alcanza para comprar la canasta de satisfactores alimenticios y no alimenticios que definen la línea de pobreza y al menos se tiene una carencia no monetaria, y en la pobreza extrema si tal ingreso no es suficiente para comprar la canasta básica de alimentos y se tienen tres carencias no monetarias.
Entre el tercer trimestre de 2018 y el equivalente de 2020, el aumento en la pobreza estuvo determinado fundamentalmente por el deterioro del ingreso de las personas y la caída en el acceso a los servicios de salud. Por una parte, el porcentaje de población que no tenía un ingreso suficiente pasó de 49.9 por ciento a 52.8 por ciento, mientras que la que careció de acceso a servicios de salud aumentó de 16.2 por ciento a 28.2 por ciento en el periodo mencionado. El resto de las carencias o se redujeron o quedaron prácticamente igual.
En agosto de 2023, el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) dará a conocer las cifras oficiales de pobreza para el año pasado, mismas que estarán basadas en la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares 2022 que el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), dará a conocer en julio del presente año.
La magnitud en la que se habrá situado la cantidad de personas pobres en 2022 no se anticipa que sea similar a la que se presentó en 2020 (43.9 por ciento de la población), pero es particularmente complicado saber si habrá un progreso respecto a los niveles de pobreza de 2018 (41.9 por ciento), afirma el Director del Programa de Desarrollo Social con Equidad del Centro de Estudios Espinosa Yglesias, Rodolfo de la Torre.
En cuanto al tema de la salud, el Gobierno federal ha hecho muy poco pues es un “desastre”, aunado a que el presidente Andrés Manuel López Obrador intenta cancelar 32 Normas Oficiales Mexicanas (NOM) que reglamentan la atención médica de las principales enfermedades del país, como diabetes, hipertensión arterial, cáncer de mama, cáncer de próstata y obesidad.
Estas medidas arbitrarias anunciadas el 1 de junio en el Diario Oficial de la Federación (DOF), les traerá mayor pobreza y enfermedad a millones de mexicanos que padecen estos males, pues el gobierno se quitará la obligación de atenderlos como estipulan las normas que intenta suprimir.
La intentona gubernamental ha provocado ya fuertes protestas entre colegios de médicos, trabajadores de la salud, quienes ya están recurriendo a la Organización Mundial de la Salud para la cancelación de esas normas.
Pero es necesario además, que la gente de a pie se organice para evitar estas arbitrariedades. El médico Éctor Jaime Ramírez Barba, secretario general de la comisión de Salud de la Cámara de Diputados comenta alarmado: “Las 32 normas oficiales que intentan suprimirse son las que regulan alrededor de 90% de la carga de enfermedad que hay en México. Con esta medida el gobierno de López Obrador se sacudirá la obligación de darle atención reglamentada a los pacientes que padecen las principales enfermedades, como diabetes , cáncer, hipertensión u obesidad”, informa el periodista Rodrigo Vera, en Proceso (18/06/2023).
Si se quita la norma para la hipertensión se estaría afectando a cerca de 22 millones de mexicanos. Y al suprimir la norma de la diabetes se afectaría a 13 millones que tienen ese padecimiento y quienes ya no podrán pedir insulina y otros medicamentos que requiere su enfermedad. Y ni qué decir del cáncer de mama, la principal causa de muerte de mujeres entre 20 y 50 años. Pero el cáncer de próstata causa todavía mayor mortalidad entre los hombres.
“Habrá más muertes por accidente cardiovascular debido a que la hipertensión arterial no se controló por falta de normatividad. Igual ocurrirá con el cáncer y otros males” agrega el director antes mencionado".
Como podemos observar, urge que la gente se organice. Se une como solo un solo hombre para defender su derecho a la salud, defenderse de tanto atropello que provoca este sistema capitalista cruel y desalmado a quien solo le interesa la ganancia económica sin importarle absolutamente que la gente sufra y muera.
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