En días pasados se llevó a cabo una elección, pudiéramos decir que fue un ensayo llevado a la práctica por el partido de Morena. Pero más que un ensayo es una radiografía de lo que vamos a ver más adelante. Lo más visible y que estuvo a la vista de todos fue la participación a estos cargos por elegir con gente de otros partidos, aunque no es de extrañarse en Morena, pero no en una elección programada de un día para otro y si a esto le sumamos la participación de los electores, la cuota de los ayuntamientos exigida por el gobernador Miguel Barbosa, la forma en que se llevó a cabo la elección, un ring de lucha libre, acarreo, pago de votos, golpes, autobuses pagados con nuestros impuestos, frutsis y tortas, algo que durante años criticó Andrés Manuel López Obrador antes de ser el presidente de México. De todo esto y más fuimos testigos que hasta los rincones más alejados de nuestro país, en este caso desde la Sierra Norte de Puebla.
¿Por qué nos manifestamos a través de la palabra escrita? ¿Por qué nos llama la atención este tipo de prácticas? ¿Es posible que los serranos crean en políticos que ya fueron y regresaron a nuestras comunidades pero que la situación sigue igual o peor? Trataré de señalar algunas cosas que ocurren, y que no solo es responsabilidad de una sola autoridad sino desde el mismísimo gobierno federal, por ejemplo, obras de primera necesidad, como carreteras en pésimas condiciones (intransitables), agua potable, drenajes, luz eléctrica, apoyo a madres solteras, becas para los estudiantes, apoyo al campo, hospitales, clínicas y de educación mejor ni hablamos, no solo no le dan mantenimiento a las escuelas las ya de por si existentes, sino que las han abandonado, las han saqueado, se han robado todo lo que un día con mucho esfuerzo se logró a través de la lucha organizada.
El crimen organizado, imparable; asaltos de todo tipo, secuestros; bueno… pudiera seguir, pero solo es un breve recordatorio para ver si aquellos que van en busca del poder tienen claridad de todos estos compromisos que un día en campaña prometieron; y que hoy siguen repitiendo como loros los morenistas que hicieron un papel de buenos karatecas en la elección; deberían organizarse para exigir beneficios para sus distritos, municipios y comunidades, deberían voltear y ver el atraso que anteriormente señalaron y, no ser cómplices del despilfarros que hace López Obrador en obras a capricho e innecesarias que en nada benefician a las familias pobres y desempleadas, pero de antemano sabemos que eso no va a ocurrir, y la tarea debe ser la que plantea el Movimiento Antorchista Nacional, organizar y educar a las masas trabajadoras para que en un tiempo no muy lejano forme su propio partido político y así tomar el poder político y ponerlo en manos del pueblo para el pueblo. Ni más ni menos.
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