Hace 49 años, nació Antorcha Campesina en un pueblito de la Baja Mixteca poblana llamado Tecomatlán y lo hizo “a iniciativa de un grupo de profesionistas, y surge a raíz de una situación conocida en el estado: la Baja Mixteca poblana es una zona desértica de naturaleza muy dura, muy avara, con precipitaciones pluviales bajísimas, una topografía completamente accidentada y además, quizá por lo mismo, con una estructura social bastante rezagada. En esa zona, el cacicazgo, el abigeato, el pistolerismo, la falta de libertades, de desarrollo económico y social, es más agudo, probablemente, que en cualquier otra parte del estado. Esta situación en conjunto fue la causa que dio origen al nacimiento de Antorcha”, aseguró, en 1986, el dirigente nacional de Antorcha Campesina, Aquiles Córdova Morán, en entrevista para la revista Momento, publicada el 13 de marzo de 1986.
Los fundadores, mucho se ha dicho, fueron tan solo 30 personas, entre profesionistas y campesinos, urgidas por la necesidad de gestionar una escuela secundaria para que sus hijos tuvieran oportunidad de cursar ese grado escolar toda vez que, a fines del siglo XX, en ese pueblo olvidado solo existía una escuela primaria y nada más.
Ese hecho detonó el trabajo de construcción de una organización de masas que durante 49 años ha ayudado a cambiar las condiciones de existencia del entonces abandonado pueblo, con habitantes muy necesitados. Entonces había en México –y los sigue habiendo– tantos mexicanos a los que no hacían caso los gobiernos locales, estatales y federal que Antorcha fue muy bien recibida, pues, con arduo trabajo, gestiones y organización, fue posible mejorar las condiciones de vida de miles de poblanos, primero, y luego de millones de mexicanos.
En pocos años, Tecomatlán pasó de ser un pueblo productor de migrantes, a un pueblo que brinda empleos a sus habitantes, quienes gozan de todas las comodidades de la vida moderna y, lo que es más importante, con escuelas suficientes para dar educación en todos los grados académicos, donde sus niños, jóvenes y adultos se forjan un futuro en su propia tierra. Es más, la calidad de sus instituciones escolares y las condiciones de vivienda y alimentación a bajo costo para los estudiantes, han llevado a ese pueblo a cientos de jóvenes de los municipios aledaños, además de los estados de Guerrero y Oaxaca, quienes ahí han cursado sus estudios de secundaria, preparatoria, carreras técnicas y profesionales, las cuales les han abierto el mundo de las oportunidades y, por tanto, ahora les dan mejores condiciones de vida a sus familias paternas y a las propias.
Lejos quedó aquel pueblo falto de servicios urbanos básicos, de centros de salud, de escuelas y empleos que les brindaran un salario, aunque fuera modesto, para sobrevivir. Ahora, las cosas han cambiado tanto que hasta los choferes de autobuses que cubren la ruta México-Tlapa consideran que Tecomatlán se ha convertido en el oasis de la Mixteca, pues se nota la diferencia que hay entre los municipios que se encuentran antes y después del llamado “Atenas de la Mixteca” no solo porque cuenta con un importante desarrollo en infraestructura, sino porque –al igual que la Atenas de los antiguos griegos–, fomenta en su población la práctica del deporte, la cultura, el conocimiento y la sana diversión en un ambiente de paz, tranquilidad y, sobre todo, seguridad, pues este municipio poblano está libre de delitos de todo tipo toda vez que también se educa a la gente en el respeto y solidaridad con sus semejantes.
El importante desarrollo que Tecomatlán alcanzó desde hace varios años le ha permitido organizar y ser anfitrión de la feria familiar más importante de la región, en la que la gente se divierte sin preocuparse por posibles agresiones de aquellos que gustan excesivamente del alcohol, como sucede en otras ferias, como la del Caballo que, año con año, tiene lugar en el municipio mexiquense de Texcoco.
Luego de haberla suspendido tres años por la pandemia que azota a México desde el año 2020, vuelve la feria familiar más importante de la región, “la feria de la unidad de los pueblos” porque a acuden no solo los tecomatecos, sino gente de municipios aledaños y de los estados de Oaxaca, Morelos, Guerrero y, lo que es más importante, que muchos tecomatecos, actuales residentes de Estados Unidos (EE. UU.), vuelven a su tierra para disfrutar de la feria de su pueblo.
Todo el inmenso trabajo que los tecomatecos organizados en Antorcha Campesina han desplegado durante 49 años a favor de esta tierra, es la concreción del ideal originario de Antorcha: construir una sociedad en la que todos tengan mejores oportunidades de trabajo, vivienda, salud, educación, cultura y deporte, entre otros.
Aunque municipio chico, Tecomatlán se ha convertido en ejemplo para los pueblos de México: hay un progreso sostenido gracias a que tiene un gobierno del pueblo que verdaderamente trabaja para beneficio de la gente, pues le ha transformado la vida para bien.
Ahora, gracias a su completa infraestructura (instalaciones deportivas, educativas –desde ludoteca hasta nivel superior como el Instituto Tecnológico y Normal superior–; casa de la cultura; auditorio municipal, Iglesia del siglo XVI, balneario, plaza de toros,,hoteles, restaurantes, un hospital regional), Tecomatlán está en condiciones de organizar una feria que la próxima semana recibirá de 8 a 10 mil visitantes diariamente, los cuales disfrutarán de la cálida hospitalidad de los tecomatecos, además de que la feria será un impulso importante para reactivar la economía de la región.
La Feria Tecomatlán 2023 iniciará este domingo 19 de febrero y concluirá el 26 del mismo mes. Además de espectáculos musicales y eventos culturales gratuitos, otra actividad importante, que tendrá lugar durante seis días de la fiesta, es la muestra gastronómica que tiene como finalidad rescatar la tradición culinaria de la región, la cual estará a cargo de cocineras tradicionales, quienes están conscientes de que su cocina está en peligro de extinción por la influencia de la comida extranjera. Así que los visitantes podrán deleitarse con platillos tales como: adobo de puerco, pipián verde de pollo con tamales de frijol, mole poblano, chilate de pollo y chilate de cuahuayote, platillo temporal propio de la región.
Además de las presentaciones gratuitas de la banda El Recodo, del Conjunto Primavera, Los viejones de Linares y Luis Ángel “El flaco”, la Feria Tecomatlán 2023 también ofrecerá torneos de voleibol, basquetbol, futbol 7, beisbol, conciertos con orquestas sinfónicas, teatro y eventos culturales a cargo de los grupos del Movimiento Antorchista Nacional.
La paz, tranquilidad y seguridad que día a día viven los habitantes de Tecomatlán garantizan que la Feria Tecomatlán 2023 se lleve a cabo con respeto para todos los visitantes y todos los ciudadanos.
Vivir como lo hacen los habitantes de Tecomatlán, con paz y progreso, es la meta que el antorchismo nacional persigue para que la experiencia se extienda a todo México. Para ello, necesitamos unirnos todos los mexicanos que deseamos un país mejor y actuar al unísono para construir la única herramienta con la que el pueblo podrá pelear el poder político del país: un partido político que represente y trabaje para bien de todos, sobre todo, de todos aquellos que producen la riqueza de este país.
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