Por todos es sabidos del gravísimo problema de desigualdad que padece México, América Latina y varias regiones del mundo, agravado aún más, durante los ultimos dos años de pandemia provocada por la covid-19 que avanza a grandes pasos y deja en su trayecto el aumento de la pobreza, falta de alimentos, desnutrición, mayor desempleo, inflación, estancamiento económico, mayor rezago educativo y sanitario.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI), en solo dos años, la población de clase media en México disminuyó en 6.3 millones menos, ya que pasó de 53.5 millones de personas en 2018 a 47.2 millones en 2020. Mientras que la población de clase alta también se redujo, pues del 1.8 millones de individuos, que había en 2018, bajó a poco más de un millón en 2021; y que la clase baja aumentó de 69.9 millones a 78.5 millones, es decir, casi nueve millones más de pobres en dos años de pandemia.
Pero no solo son datos del INEGI, sino tambien de organismos internacionales, como la Comisión Económica para América Latina (CEPAL), el Banco Mundial (BM) y la Organización Internacional del Trabao (OIT), que coinciden en que la desigualdad creció con la pandemia y que los más afectados han sido mujeres, niños, adolescentes, jóvenes y trabajadores informales; además, que el mayor número de personas que han caído en la pobreza son de clase media debido a la pérdida de empleos e ingresos.
La CEPAL estima que en América Latina y el Caribe, el número de pobres aumentó en 209 millones de personas (33.7 por ciento) y la pobreza extrema en 78 millones de personas (12.5 por ciento), debido a que en ella se concentraron el 18.5 por ciento de los casos positivos de covid-19 y 30.3 por ciento de las muertes provocadas por esa enfermedad. En nuestra región, además, ha habido una fuerte pérdida de empleos y, por tal motivo, en los ingresos familiares.
En sus datos más recientes de 2020, el INEGI aceptó que pese a las rígidas políticas migratorias implementadas en Estados Unidos (EE. UU.), el flujo migratorio no se ha detenido; el motivo principal de las personas que emigran a otro país es de índole laboral, como buscar trabajo, motivos familiares y cuestiones educativas. El 67 por ciento de las personas que emigran son hombres, y el 33 por ciento mujeres, por lo que la migración internacional que se origina en México es predominantemente masculina, van a los EE. UU., en busca del sueño americano.
Esta desigualdad se hizo más evidente aun entre los individuos y en los países que cuentan con recursos económicos, infraestructura, personal médico y científico para atender a las personas contagiadas, desarrollar vacunas y la adquisición de éstas, frente a los países que carecían de infraestructura hospitalaria suficiente para atender el creciente número de casos de urgencias derivadas de los contagios por covid-19.
Estos problemas podrían convertirse en una bomba social que estallará en cualquier momento, especialmente en algunas naciones que, como México, tienen a la vuelta una competencia electoral.
Con el descontento por las condiciones económicas, y en parte por el aumento de la inflación en 2020 y 2021, el malestar social podría ser mayúsculo en México y estallarle al gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien no podrá hacer nada frente al descontento social, lo que además podrían reflejarse en los próximos procesos electorales en los que su partido Morena, pierdan el poder político.
El gobierno morenista debe generar mejores condiciones al pueblo trabajador de México, mientras está la polémica por la consulta para la revocación de mandato y proselitismo para que se vote a favor de que se quede el presidente, yo los invito a todos ustedes a que reflexionen, pues es necesario hacer un análisis profundo de lo que él ha realizado en beneficio de los habitantes, tenemos una oportunidad para expresar su falta de atención a los problemas sociales.
Los mexicanos debemos organizarnos, concientizarnos y luchar por un país menor desigualdad social y un gobernante realmente capaz para defender los intereses del pueblo. Yo convoco a los que se quedaron sin apoyo, a los que perdieron su empleo o parte significativa de su ingreso, a los obreros que buscan mejores salarios y prestaciones; a todos ustedes, los llamamos a un frente común para rescatar a México, cambiar de rumbo y evitar caer al despeñadero al que se dirige nuestro país.
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