Se suele emplear esta expresión para advertir sobre el peligro de dejarse seducir y llevar a la perdición por falsas promesas o incitaciones ilusorias. Las sirenas eran unas ninfas marinas, que, en la mitología, atraían con sus cantos dulces e insinuantes a los marinos hacia los escollos de la costa, donde, tras hacerles naufragar, los devoraban, no dejando de ellos más que huesos amontonados. El primero en relatar esta cualidad terrible fue Homero en La Odisea. Homero las describe como seres que “hechizan a todos los hombres que se acercan a ellas”.
Ahora, esta expresión sale a relucir en temporada electoral; comienzan los cantos de sirena de uno u otro partido, tal o cual candidato y que a falta de verdaderos proyectos para terminar con la terrible situación que aqueja a los más desprotegidos, se centran en repetir una y otra vez lo que quieren hacer sin saber cómo hacerlo, el fin de esto es endulzar el oído a los posibles votantes y acercarlos a ellos para obtener el favoritismo popular y alcanzar sus metas, y una vez ahí, olvidarse de lo que prometieron. En el caso de la 4T no solo se olvidaron, sino que destruyeron lo poco que había o medio funcionaba; comportamientos así, se han repetido a lo largo de muchos años, con personajes que van de lo sombrío hasta lo mezquino, con gobiernos represores y fallidos; pero, ahora más que nunca, se merece mención honorífica el gobierno en turno; el gobierno de la 4T no sólo mintió, sino que recicló los peores vicios de los gobiernos anteriores. En Tabasco y el país nos hemos encontrado amigos, familiares, compañeros que se dejaron encantar por los discursos de López Obrador; discursos cuyo único mérito, fue tomar el sufrimiento del pueblo y hacerlo propaganda de campaña, tomaron la voz del pueblo, tomaron su sentir, los hizo creer en que él haría todo lo que el pueblo le decía, y que sólo gracias a él todo cambiaría; ése es el único mérito del gobierno de AMLO, aprovecharse del sufrimiento de un pueblo que pide a gritos que se haga justicia social, se colgó de esas necesidades para llegar al poder y una vez estando ahí comienza el viacrucis doloroso del pueblo de México. El arrepentimiento de millones de mexicanos que votaron por él no se hizo esperar y ahora solo pueden esperar a que termine este mal gobierno. La imagen es simple la evaluación es gráfica, sin irnos más lejos, podemos recordar lo que decía en sus discursos; que acabaría con la corrupción, pues era la madre de todos los males, olvidándose que en realidad el origen de la pobreza es el sistema económico del país, como consecuencia existe una repartición inequitativa de la renta nacional y de ahí se derivan los problemas que hasta el día de hoy aquejan al pueblo de México; además, saltando la línea del sentido común y pasándose a la de la ignorancia creyéndose economista, el presidente decretó el fin del neoliberalismo en México, cosa que la realidad le recordó con una crisis económica de magnitudes sin precedentes en el país; solo para dar un par de ejemplos más, dijo que terminaría con la injusticia social, que bajaría el gas, la luz, la gasolina, que el Seguro Popular no servía y era corrupto. Pero ni bajó la gasolina, ni bajó el gas y cada día el poder adquisitivo de la canasta básica cae, es decir, el obrero gana lo mismo pero le alcanza para menos, miles de mexicanos no pueden pagar sus estudios o tener acceso a operaciones o medicamentos porque ya no tienen el apoyo del Seguro Popular, que con todo y deficiencias servía a los más pobres y en lugar de corregir lo que él detectó estaba mal, simplemente lo eliminó y a su capricho creó el INSABI que, ya todos sabemos, es un fracaso total.
Este gobierno sigue siendo igual que los anteriores, y una vez más volvemos a ver y sentir las promesas que los políticos nos hacen llegar; vuelven a visitar a los que dejaron abandonados mientras gobernaban, llegan a prometer casas y apoyos, llegan brigadas a pedir que se formen comités; y ¿para qué?, los mismos de siempre vuelven a ser candidatos, no llevan un proyecto real, no se comprometen a nada, pero lo que si hacen es comprar la voluntad del pueblo, valiéndose de su necesidad; cuando estos siervos de la 4T vayan a comprar el voto, debemos reflexionar y preguntarles ¿dónde estaban cuando más los necesitaban?, ¿qué hicieron para cambiar la situación de pobreza del país?, ¿dónde están los medicamentos de los niños con cáncer?; ¿dónde está el apoyo a las mujeres?, ¿ya disminuyó la delincuencia?, ¿ya hay más trabajo con salarios bien remunerados?, ¿por qué no se le dieron los apoyos alimenticios a la gente que sufre hambre por la pandemia y en el caso de Tabasco por las inundaciones?, ¿por qué no se le dio o se pensó en la gente que perdió su empleo por la pandemia y no legislaron para darle un seguro por el desempleo mientras se recuperaban los que se perdieron?, muchas preguntas se podrán hacer; pero la definitiva sería ¿para qué quieren permanecer en el poder y por qué ofrecer ahora lo que ofrecieron hace tres años y no han cumplido?; el país está enfermo y no necesita que lo sigan engañando, hago un llamado a la reflexión, a la organización y educación del pueblo de México, a exigir un proyecto real, con resultados, con verdadera conciencia de clase, para erradicar la pobreza de nuestra nación; el Movimiento Antorchista ha estado del lado del pueblo, ha estado cuando más se necesita y ha luchado de la mano por mejorar, en la medida de nuestras posibilidades, la vida de miles de mexicanos. Ahora más que nunca debemos unirnos, no debemos dejar que sigan destrozando nuestro país y no debemos dejarnos llevar por los cantos de sirena que estarán a la orden del día, organízate y lucha porque la realidad del país así lo exige.
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