Señor, con eso de "hágase tu voluntad así en el cielo como en la tierra” me parece que estamos muy mal aquí en la tierra. Los pobres ya no encontramos la salida, palabra de Dios que no.
En el cielo no sé cómo estén las cosas, supongo que mejor porque sino, no habría ninguna diferencia, por lo tanto, yo espero, que ahí tu voluntad sea distinta y estén mejor las cosas que aquí a donde nos mandaste a vivir.
De la tierra sí puedo hablar un poquito, pero, al ver lo que está ocurriendo, francamente se me ponen los pelos de punta y no me deja nada tranquilo.
Por ejemplo, algunos países como EE. UU. Alemania, Inglaterra etc., que son poderosos económica y militarmente, en tu nombre -porque dicen que su voluntad es la tuya (sólo tú puedes saber si es cierto, aunque lo dudo) se han propuesto someter, explotar y perpetuar su dominio a otros más débiles y a todo aquel que no se deja le arman una guerra en la que le destruyen hasta las amígdalas, dejándolos más pobres y miserables que como estaban antes, cumpliéndose ese dicho de que "después de corneado apaleado”.
El problema se presenta con los que no se dejan y se pueden defender como China y Rusia; entonces sí que se arma la bronca y como los intereses de los imperialistas no aceptan la mínima disidencia, oposición o competencia, casi han estado a punto de armar una tercera guerra mundial, que si se llega dar nos vamos a presentar casi todos al mismo tiempo ante tu presencia porque aquí en este mundo no va quedar nadie que te recuerde ni te alabe. Por eso me dan hasta escalofríos.
Espero que esa no sea también tu voluntad.
Y fíjate nomás, me pregunto, ¿cómo se te ocurrió? mandarnos a los mexicanos una plaga similar a las de Egipto, que en su tiempo tanto mal causaron; son de esas ocurrencias que sólo a ti se te ocurren, a lo mejor porque no tienes mucho qué hacer, pero nos mandaste un gobernante que te anda queriendo sustituir y creo que falta muy poco para que diga que él eres tú. ¡Así, sin exageraciones! Por ejemplo, él cree, dice y decide sobre quién es corrupto y quién no, quién es bueno y quién malo e incluso quién vive y quién muere.
Se ha inventado, y dice unas frasecitas: "lo que diga mi dedito” y "primero los pobres&rdquo, pues resulta que su dedito hace y dice lo que su "santa” voluntad determina y por eso en las últimas inundaciones en Tabasco decidió inundar a los pobres chontales y los dejó casi dos meses en las azoteas de sus casas o en los segundos pisos, porque por las calles no se podía transitar salvo, en lanchas y, algo casi increíble, se podía pescar, con decirte que hasta cocodrilos había.
Como te decía, prometió que "por el bien de todos, primero los pobres” y siendo francos lo está cumpliendo porque, con esta pandemia de la covid-19, que también tú nos hiciste el favor de mandar, los primeros que se están muriendo son: albañiles, amas de casa, taxistas, panaderos, tortilleras, enfermeras, carpinteros; es decir, el mero y puro pobrerío. Tú ya sabes, porque lo has visto, que este gobernantito morenista que tú nos mandaste está cumpliendo, dramáticamente, que se mueran primero los pobres. Claro, tambien se ha muerto algún que otro ricachón que se descuidó y que no supo ni para qué le servía el dinero que tenía. El presidentito debería ayudar primero a los pobres, pero si tú te fijas en la estadística de los muertitos que te están llegando por allá, los que te están llegando en su mayoría son pobres.
Cuando hizo campaña y empezó a gobernar nos dijo que él era el bueno, que iba a construir hospitales, tener médicos, medicinas, vacunas y atención como en los sistemas de salud de Dinamarca y Canadá, pero resulta que no ha construido nada ni ha destinado recursos para apoyar con despensas, medicinas o apoyos directos a los más pobres. No, ¡nada de eso! Por eso los más pobres están muriéndose como moscas, pues no los está ayudando en nada y te los está mandando a tu presencia, con decirte que ya van más de 136 mil muertos por la pandemia, producto de la negligencia e irresponsabilidad de este gobernante mentiroso que prometió lo bueno y está cumpliendo con lo malo.
¡Vaya "pejerico” inepto y mentiroso que nos mandaste!, que casi habla en tu nombre todas las mañanas y se dedica a encubrir y a apoyar a sus cuates y a su hermano Pio.
Por eso, con respeto te digo, por favor, ayudanos un poquito, que no se haga tanto tu voluntad aquí en la tierra.
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