El próximo 6 de junio, como cada año, nos reuniremos para rendir homenaje a nuestros compañeros antorchistas que han perdido la vida en la lucha por un México mejor. Esta vez, este importante evento dedicado a los mártires antorchistas, que históricanmente se realiza en la cuna del Movimiento Antorchista Nacional, Tecomatlán, Puebla, se traslada a Chilpancingo, Guerrero; y tiene un propósito adicional: exigir, ante la mirada de todo el país, que las autoridades políticas, de seguridad y justicia, encuentren y castiguen a los asesinos que privaron de la vida a Conrado, Mercedes y a su pequeño hijo, el pasado 12 de abril. La capital guerrerense será testigo de nuestra determinación y de nuestra voz que clama por verdad y justicia.
Han transcurrido más de 50 días desde aquel escalofriante suceso, en el que nuestros queridos compañeros fueron víctimas de la violencia despiadada que busca acallar a aquellos que se atreven a alzar la voz contra las injusticias. Es así, porque la honradez con que se conducían los compañeros esta fuera de duda.
Desde jóvenes, siendo estudiantes, se integraron a las filas del Moviento Antorchista Nacional (MAN), y desde ahí, se formaron como profesionistas y ayudaron a que miles de estudiantes, contaran con condiciones suficientes para estudiar y concluir las carreras universitarias que se propusieron. Su labor política y organizativa entre los pobres de la ciudad y del campo, ayudó a que miles de colonos y campesinos cuenten hoy con un espacio digno donde vivir, donde educarse y en donde curarse cuando se enferman. En muchas colonias y pueblos de la capital guerrerense, se reflejan los resultados de la tenaz lucha que condujo Conrado, buscando dignificar la vida de muchos guerrerenses.
Es sabido por la mayoria de los mexicanos que la justicia parece estar paralizada en nuestro país. Después de los muchos miles de homicidios que se llevan acumulados, ya no es sorpresa darse cuenta, que para las autoridades, los pobres y sencillos no importan, no cuentan. Es triste constatar que México sigue siendo un lugar donde los sacrificios de personas valientes y comprometidas pueden ser sepultados e ignorados con impunidad. Sin embargo, los antorchistas tenemos memoria, y en nuestros corazones y mentes tenemos presente que las autoridades deben hacer justicia, que deben detener y castigar a las bestias que se atrevieron a arrebatar la vida a tres seres inocentes.
Los antorchistas nos hemos movilizado y hemos protestado exigiendo justicia. En Guerrero, La gobernadora Evelyn Cecia Salgado Pineda y la fiscal Sandra Luz Valdovinos Salmerón, se han solidarizado con nuestra demanda y han empeñado su palabra ante una comisión de nuestra Dirección Nacional, a que pondrán todo su empeño y los recursos con que cuentan sus instituciones para castigar a los asesinos. Por su parte, el pasado 25 de mayo, la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Isela Rodriguez Velázquez, a indicaciones del presidente de México, ha manifestado el compromiso de apoyar a la fiscalía estatal con todos los medios a su alcance, para que este lamentable hecho sea esclarecido y castigados los responsables.
El martes 6 de junio, miles de antorchistas de todo el país marcharemos por las calles de Chilpancingo y realizaremos un evento político cultural en la Plaza Cívica Primer Congreso de Anahuac, en el que daremos muestra de la determinación antorchista para que el estado cumpla con su obligación de investigar, procesar y sentenciar a los responsables de estos crímenes atroces. No permitiremos que el tiempo y la indiferencia oficial de las autoridades hagan que esta agresión a lo mejor de la humanidad quede impune.
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