Desde hace casi 21 años, el Movimiento Antorchista en Aguascalientes ha encabezado demandas de pequeños productores, de estudiantes y maestros; trabajado en las colonias y comunidades donde los apoyos asistenciales, obras y servicios, por parte de gobierno del estado y municipal, no son muy conocidos por los habitantes.
Existen en el municipio colonias donde todavía carecen de los servicios más elementales, de caminos en buenas condiciones y de transporte que lleve a los pobladores a las escuelas más cercanas y a donde se puedan surtir de la canasta básica para sus hogares.
Es en el oriente de la ciudad donde se concentran, mayoritariamente, estos asentamientos que, día a día, tienen que ver su suerte para arreglárselas con las inclemencias del tiempo y con la delincuencia.
En una ciudad donde se concentra el 80 por ciento de la población total del estado y que se encuentra entre las tres ciudades mejores para vivir, todavía podemos ver casas que se sostienen por material reciclable y láminas, habitantes que tienen que caminar hasta más de 30 minutos para tan solo llevar a los niños a la escuela con caminos de tierra, sin la posibilidad de tener un ingreso estable que al menos pueda asegurar la buena alimentación de la familia.
“Tenemos que decidir, en ocasiones, cuál de los hijos tiene que estudiar porque simplemente no nos alcanza. Ya tengo 22 días sin ganar nada de dinero, el día se va tan rápido que no alcanzo a juntar nada de plástico o cartón para vender”, así es como la señora Estela Esparza Esparza, oriunda de la colonia El Socorro y madre de 10 hijos, sufre por falta de recursos para solventar todas las necesidades de sus hijos.
Es por estas situaciones y muchas otras, que Antorcha trabaja todos los días para luchar contra el enemigo número uno: la pobreza, y ha logrado etiquetar recursos federales para las personas más vulnerables del estado y mejorar su calidad de vida.
La señora Virginia Morales Martínez, habitante de una colonia ahora desaparecida, El Chiflido dijo que a este lugar no lo visitaba nadie.
“Creo que no estábamos en el mapa de Aguascalientes. No teníamos agua, luz ni drenaje. Los techos y cuartos los hicimos como pudimos, sin emabrgo cuando nos organizamos en el Movimiento Antorchista vimos el cambio; pues con la lucha se logró que se nos apoyara con cuartos adicionales y techos, pero antes a esa colonia nadie la tomaba en cuenta”.
La posibilidad de crear un mundo mejor es posible y así lo ven personas, como la señora Inocencia Tiscareño Llamas, quien está convencida en seguir en las filas del antorchismo.
“Yo voy a seguir en Movimiento Antorchista para mejorar las condiciones de la colonia. No solamente por los apoyos que se nos entregaron sino porque hacen falta muchas cosas para que nuestros hijos puedan crecer en un entorno favorable y estoy segura de que en Antorcha se puede lograr tal cosa”.
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