Esta semana un pequeño grupo de antorchistas de diversos municipios de la entidad, nos congregamos en la Plaza de Armas de la ciudad capital, para levantar la voz y exponer ante la opinión pública nuestra inconformidad por el trato que han recibido, por parte de funcionarios del Gobierno del estado, familias que tienen casi un año yendo y viviendo de las dependencias con las manos vacías.
Se trata de tres dependencias principalmente. La Secretaría de Bienestar del Gobierno del Estado (Sebised) cuyo titular (Jaime Rivas Loaiza) se comprometió en diciembre del año pasado, frente a campesinos de diversos municipios, que a mediados de marzo les iba a entregar apoyos domésticos como estufas ecológicas, boiler solares, láminas galvanizadas y tinacos; tres meses más tarde, en otra reunión para revisar los avances del compromiso, el funcionario dijo que no había recursos pero que en cuanto hubiera con todo gusto se le atendería a la población, hoy, a casi un año de aquel compromiso, la gente sigue esperando que esos apoyos lleguen.
El segundo caso es el de la Secretaría de Educación del Estado (SEED). Un grupo de maestros de diversas escuelas del oriente de la ciudad capital, encabezado por Antorcha Magisterial, le entregó un pliego petitorio al secretario Rubén Calderón Luján, para demandar la autorización de contratos a maestros que están laborando desde hace años sin recibir un sueldo y, aunque ha habido reuniones con el director de planeación y evaluación, Jesús Luna Espinoza, no ha habido una solución.
Por último, la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas del Estado (Secope). En la administración de Enrique Peña Nieto, el Movimiento Antorchista logró bajar recursos para la construcción de diversas obras en varias localidades de la entidad, la gran mayoría fueron ejecutadas en tiempo y forma, pero otras, al día de hoy, no han sido concluidas y otras más, ni siquiera han empezado y nadie se compromete a resolver este problema.
Ante esta situación, el Movimiento Antorchista se vio en la necesidad de levantar la voz para denunciar la conducta de los funcionarios ante demandas tan urgentes -porque ni siquiera dan esperanzas de una solución real, pero, sobre todo, para solicitar una audiencia con el gobernador o cuando menos, su intervención para que se destraben los compromisos.
Creemos que a nadie le queda duda que hoy más que nunca urge la mano solidaria del gobierno y más en las comunidades abandonadas durante sexenios por los distintos órdenes de gobierno, hoy que la gente se ha quedado sin ingresos, pedimos que una parte del dinero que entregamos vía impuestos, se destine a los sectores más desprotegidos en beneficios directos y palpables ¿O será mucho pedir?
Si no le llega este escrito al gobernador, seguiremos insistiendo a través de diversas vías hasta ser escuchados, creemos que es lo menos que debe hacer un gobernante, escuchar a sus gobernados, sino, ¿entonces para qué está ahí? Vienen elecciones el próximo año y muchos de los que hoy están trabajando en distintas oficinas de gobierno los veremos tocando nuestra puerta y vendrán a convencernos de que quieren ayudarnos porque les duele ver cómo vivimos, pero ¿con este trato, seremos capaces de creerles nuevamente? ¡Solicitamos audiencia señor gobernador!
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