En los próximos días la República Popular de China será sede de los XXIV Juegos Olímpicos de Invierno, un evento multideportivo internacional que se llevará a cabo del 4 al 20 de febrero en las ciudades de Beijing, Zhangjiakou y Yanqing, con la organización de estos juegos, Beijing se convertirá en la primera ciudad del mundo en celebrar unos juegos de verano y de invierno.
Estos juegos albergarán un aproximado de 3,000 deportistas, procedentes de más de 90 países diferentes, el presupuesto destinado para éstos es de 3 mil 900 millones de dólares, en dicha competencia los deportistas participarán en 15 deportes olímpicos invernales, algunos de ellos son; el patinaje artístico, hockey sobre hielo, patinaje de velocidad, saltos de esquí, bobsleigh, snowboard, entre otras.
Son pocos los países que piden ser sede de estos juegos de invierno, primero porque no todos cuentan con el clima requerido para llevar a cabo los deportes y, segundo, por el recurso económico que se tiene que invertir, pues es muy elevado. China es un país que ha tenido un desarrollo económico sorprendente, actualmente es la segunda economía más poderosa del mundo y se espera que para el año 2024 ocupe el primer lugar, además fue el primer país en reactivar su economía en 2020 y, al mismo tiempo, ser uno de los países que mejor han controlado la pandemia de covid-19. Cuenta con una población de más de 1.411 millones de personas y de éstas más del 90% confía en el trabajo que viene realizando el Partido Comunista de China.
Este impresionante desarrollo del gigante asiático ha causado preocupación en algunos países, pero principalmente a los Estados Unidos (actualmente primera economía mundial) ya que los chinos los están superando en varios terrenos, principalmente en el terreno económico, ante esto, el gobierno estadounidense se ha empeñado en atacar permanentemente al gobierno de Xi Jinping, argumentando que existe un régimen dictatorial, donde se violan los derechos humanos de la población, acusaciones que no han sido demostradas.
Ahora que se aproxima el inicio de los citados juegos, el gobierno de Estados Unidos ataca de nuevo, anunciando un “boicot diplomático”, a través de la vocera de la Casa Blanca, Jen Psaki diciendo “que no enviarán ninguna delegación oficial a los juegos, dado el genocidio y los crímenes de lesa humanidad en curso de la República Popular de China y otros abusos de los derechos humanos”.
Ante estas declaraciones hechas por la Casa Blaca, el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de China, Zhao lijian, dijo que “Estados Unidos debería dejar de politizar el deporte y de exagerar el llamado boicot diplomático para no afectar al diálogo y la cooperación entre China y Estados Unidos en áreas importantes”, además agregó que de sumarse otros países al boicot éstos pagarán el precio.
Países como Rusia han reaccionado a la decisión estadounidense y han considerado que la cita deportiva “debería estar libre de política”, recordemos que los atletas rusos fueron acusados desde 2015 de haber instaurado un sistema institucional de dopaje, por tanto, Rusia está suspendida de las grandes competencias internacionales hasta el 2022, su himno, bandera y nombre no figuran en estos eventos, estas acciones también son parte de la campaña de bloqueo y ataque mediático que está llevando a cabo USA a quienes considera sus enemigos.
Estos intentos de boicot no son nuevos, en el año de 1980 Estados Unidos boicoteó los Juegos Olímpicos de verano organizados por la Unión Soviética, donde 60 naciones no participaron, cuatro años después en el año de 1984 la Unión Soviética le devolvía la cortesía a Estados Unidos, decidiendo no enviar a sus atletas a los juegos de verano de los Ángeles. Pero regresando un poco en la historia, en el año de 1936 también se organizaron las olimpiadas en la Alemania nazi que dirigía Adolfo Hitler, en esa ocasión ni Estados Unidos y ninguno de sus aliados convocaron a boicot, a pesar de que sabían las intenciones del Führer y lo que estaba sucediendo en Alemania y lo que sucedió después. ¿No que muy interesados en hacer valer los derechos humanos e imponer la democracia por todo el mundo? No, aquí no hicieron y ni dijeron nada.
Este “mini boicot” al que está convocando el imperio yankie no surtirá efecto y, por otro lado, lo que sí se espera es que Beijing 2022 sea una de las mejores ediciones de estos juegos olímpicos de invierno, ya que cuenta con una organización e infraestructura deportiva impresionante, además de contar con una tecnología de punta que estarán mostrando a todo el mundo, sin duda, China hará alarde de su poderío económico y mostrará al mundo de lo que es capaz.
Por cierto, en la inauguración tal vez no habrá un gran número de líderes, pero junto al presidente Xi estará el presidente ruso, Vladímir Putin.
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