* El estado mantiene la tasa de homicidios más alta del país, con un incremento alarmante en los últimos años
La ola de violencia desatada en el estado de Colima en los últimos años ha traído graves consecuencias para cientos de familias que han perdido a un padre, un hijo, un hermano o algún otro familiar. No es para menos, pues desde hace un par de años, Colima ha ocupado el nada honroso primer lugar a nivel nacional en homicidios.
En los últimos diez años hubo en Colima un total de 6 mil 899 asesinatos, de los cuales 2 mil 718 corresponden a los tres años y dos meses de la actual administración estatal, es decir, del gobierno morenista de Indira Vizcaíno Silva.
De acuerdo con cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), por octava ocasión en la última década, durante 2024 esta entidad ocupó el primer lugar nacional en incidencia de asesinatos, con la tasa más alta del país.
Según ese organismo, el año recién concluido hubo 845 asesinatos en el estado, seis de ellos clasificados como feminicidios, lo que arrojó una tasa de 110.05 víctimas por cada cien mil habitantes, casi cinco veces superior a la tasa promedio nacional en ese periodo, que fue de 22.72.
A Clementina Zárate, vecina de la colonia Unidad Antorchista, la violencia le arrebató a sus dos hijos con una semana de diferencia. La muerte los alcanzó en la banqueta de su casa, sin que ella pudiera hacer nada para salvarlos.
Los asesinos no han sido encontrados; por el contrario, se han cometido más crímenes en el municipio y en todo el estado.
Clementina sabe que la vida de sus hijos no regresará, pero hace un llamado a las autoridades, principalmente a la gobernadora Indira Vizcaíno Silva, para que intervengan con estrategias de seguridad que eviten que otras madres sufran el mismo dolor que ella. Asegura que siente rabia e indignación porque los gobiernos no hacen nada para detener esta ola de violencia.
“La estrategia de ‘abrazos y no balazos’ que implementó el gobierno federal morenista y que el gobierno de Indira Vizcaíno replicó no ha servido de nada, pues los delincuentes reciben abrazos y la ciudadanía, los balazos”, puntualizó.
Ante este panorama, enfatiza, urge la verdadera intervención de todos los órdenes de gobierno para frenar la ola de violencia, no sólo en Colima, sino en todo el país.
0 Comentarios:
Dejar un Comentario