El primero de octubre de 1949 se realizó la concentración de los chinos en la plaza Tian An Men, con la finalidad de desarrollar la ceremonia de proclamación de la China. Fue entonces cuando Mao Zedong presionó un botón, y poco a poco fue alzándose la bandera roja con cinco estrellas; esto después de 28 años de lucha para derrocar al imperialismo, feudalismo y capitalismo clientelista, terminando así con el estado de la sociedad semicolonial y semifeudal imperante en la época. El fin era celebrar el triunfó de la nueva democracia emergiendo la nación con otros ideales y metas. 

Repasemos algunos datos. China, era entonces una nación anticuada, sin embargo, tenía un gran crecimiento económico, pues ya para el año 1820, el Producto Interno Bruto (PIB) representaba aproximadamente un tercio del mundial. Sin embargo, después de la Revolución Francesa e Industrial inglesa, sufrió rezago y se quedó atrás en el contexto internacional.

A pesar de ello, tras la Guerra del Opio, de 1840, China comenzó a caer en una sociedad mitad colonizada y mitad feudal. Este país firmó cerca de mil 100 tratados y acuerdos, se fue quedando sin oficios, el hambre fue creciendo, la sociedad se fue haciendo antidemocrática y sin derechos humanos. Es entonces cuando después de años, el partido representado principalmente Mao Zedong, se aplicó a corregir el rumbo del gigante asiático uniendo la teoría científica y la realidad que se vivía en ése momento.

Como consecuencia de las decisiones tomadas por los dirigentes del partido nuevo se logró establecer la autoridad del proletariado con características nacionales, logrando la unificación del país, fortaleciendo la autonomía nacional, y logrando la emancipación del pueblo, teniendo así la creación de La Nueva China.

La generación de líderes guiados por Mao Zedong hizo suyo el lema “avanzar hacia la ciencia”, así que China, siendo un país en desarrollo, implementó conocimientos científicos y tecnológicos, e impulsó sus fuerzas productivas para elevar su economía, teniendo desde entonces crecimientos económicos grandes.

A partir de 1975 y hasta 2020 se mantuvo en un ascenso sostenido; y pasó de 1.6 por ciento a 17.9 por ciento del PIB mundial, este crecimiento con mayor rapidez a partir del 2005 al 2020, esto fue debido a políticas económicas, industriales, y tecnológicas al lograr un estado con inversiones en infraestructura y tecnología, lo que le permitió la internacionalización progresiva del comercio y la inversión, contribuyendo con el mundo en los temas de comunicación, minería, agricultura.

Debido a ello, ahora podemos encontrar en nuestro país a Alibaba Group Holding Ltd (Alibaba), empresa fundada en 1999 como plataforma de comercio online, reuniendo exportadores de más de 240 países extendiendo su alcance a puntos muy distantes como México. El desarrollo industrial desde luego que puede llegar a Zacatecas, pues recientemente, el gobernador se reunió con ejecutivos de Chirey Automobile, una empresa fabricante de autos, para negociar la oferta de instalar una fábrica en el estado. Ésta ya cuenta con 10 filiales fuera de China y tiene centros de investigación en Alemania, Estados Unidos (EE. UU.) y Brasil, manteniendo así la intención de instalarse en el parque industrial cercano al aeropuerto del municipio de Calera y en el parque industrial de Fresnillo, cuya finalidad sería la distribución de tres modelos de autos chinos, por lo que se entiende que se avanza en la correspondiente investigación de mercado.

Es decir, el crecimiento del gigante asiático va para largo, y el ahora presidente Xi Jinping mencionó que en los próximos cinco años se reflejará un mayor crecimiento económico, además de que, bajo su liderazgo, China se consolidó como la segunda economía más grande del mundo y desplazó, poco a poco, la dominación de EE. UU., por lo que de materializarse esta iniciativa, Zacatecas podrá alcanzar mayor desarrollo y empleos suficientes en el futuro. Ojalá que así sea.