El pasado 1 de septiembre se instaló el nuevo Congreso de Yucatán y entraron en funciones 105 de los 106 ayuntamientos electos el pasado 6 de junio, faltando sólo Uayma, debido a que las elecciones fueron anuladas por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, por lo que habrá comicios extraordinarios el próximo 14 de noviembre. Así, la entidad entró a un nuevo escenario político, en el que el Partido Acción Nacional (PAN), gobernará 42 ayuntamientos, entre ellos los de mayor peso político, demográfico y presupuestal: Mérida - “joya de la corona”-, Kanasín, Valladolid, Tizimín, Progreso, Umán y Ticul; esto le permitirá gobernar al 75 por ciento de la población total de la entidad, es decir, a 7 de cada 10 yucatecos.
El nuevo Congreso local, tampoco es la excepción; 14 de las 15 posiciones de mayoría relativa las ganó el PAN, lo que le permitirá sacar holgadamente todas las propuestas promovidas por el jefe del Ejecutivo, también de extracción panista. La ola azul triunfó y Yucatán se convirtió en el solitario bastión del PAN en el Sur-Sureste, que resistió la embestida morenista, pues también ganó tres de las cinco diputaciones federales.
Esta recomposición de las fuerzas políticas, donde el PAN lleva la delantera y es secundado por Morena, debe llevar a los yucatecos a la interrogante acerca de, ¿cómo se conducirán ahora los “nuevos” representantes populares? Y si en verdad, ¿los “cambios” prometidos se darán? Por lo pronto, en un evento de clausura del ciclo de cursos y talleres dirigidos a alcaldesas y alcaldes electos de Acción Nacional, impartidos durante julio y agosto, el presidente de ese instituto político en la entidad, Asís Cano Cetina, pidió a estos: “gobernar con humildad y responsabilidad en beneficio de todos los ciudadanos y sus comunidades…, ofrecer resultados positivos a la gente y demostrar que lo gobiernos del PAN gobiernan y lo hacen bien”.
Pues bien, en varios de los municipios gobernados por alcaldes de extracción panista, grupos importantes de ciudadanos afiliados al Movimiento Antorchista, han trabajado de manera organizada desde hace años, luchando para encontrar una alternativa de solución a distintos problemas que enfrentan de obras y servicios en comunidades y colonias pobres, donde carecen de lo más indispensable para una vida decorosa.
Las demandas enarboladas son mínimas: introducción de agua potable, energía eléctrica, escuelas, regularización de asentamientos humanos urbanos, pavimentación de calles, insumos agropecuarios, proyectos productivos, caminos saca-cosechas, mejoramiento de vivienda en sus distintas modalidades (cuartos, baños, cocinas, techos, pisos, etc.), canchas de usos múltiples, parques, clínicas de salud, despensas, becas, por mencionar algunos.
No solamente las hemos planteado en los ayuntamientos respectivos, sino también ante el Gobierno del Estado que encabeza el licenciado Mauricio Vila Dosal; sin embargo, desde hace tres años, no hay voluntad política ni oídos receptivos a éstas, a pesar de que hemos hecho antesala en las oficinas correspondientes y entregado en tiempo y forma lo que se nos ha requerido.
Son nuevos tiempos que presagian barruntos sociales y políticos de descontento popular, pues los ciudadanos no están dispuestos a seguir esperando respuestas de quienes en el discurso se rasgan las vestiduras, pero en los hechos, no hay avances mínimos en la solución de los problemas que los aquejan, es más, ven con menosprecio a los peticionarios y menos se duelen de sus necesidades.
Las autoridades en turno, no debieran olvidar que el lugar que ocupan se los otorgó el voto ciudadano, que ellos cumplen con una responsabilidad otorgada por el pueblo y que, por tanto, están obligados a responder a su mandato y a sus necesidades.
A partir de esta semana, comisiones representativas de los grupos antorchistas de distintos municipios nos acercaremos a las nuevas autoridades municipales, a hacer entrega de un modesto pliego petitorio de demandas de primer orden para los grupos vulnerables con los que trabajamos, las cuales solicitamos sean atendidas.
De igual forma, el próximo martes 14 de septiembre, un grupo compuesto por 200 antorchistas, acudiremos a la sede del Ejecutivo estatal para solicitar respuestas positivas a nuestras añejas demandas de obras y servicios mencionadas más arriba.
Solicitamos al Sr. Gobernador y a los presidentes municipales su atención e intervención oportuna en la solución de las demandas planteadas por el pueblo organizado, que ya probó de sobra que ir cada quién por su lado, el único resultado que han encontrado es la indiferencia y burla a sus necesidades. Quienes dicen que gobernarán con humildad y responsabilidad en beneficio de todos los ciudadanos, tienen que demostrarlo.
Los antorchistas no vamos a renunciar a defender nuestros derechos, los derechos de los yucatecos pobres, aunque el presidente de la república y sus emuladores, se afanen en acusarnos de intermediarios, de chantajistas, de medrar con la pobreza; el pueblo sabe distinguir quienes representan sus genuinos intereses. Que conste.
0 Comentarios:
Dejar un Comentario