Dijo hace un tiempo el gran Bertolt Brecht que “el regalo más grande que les puedes dar a los demás es el ejemplo de tu propia vida”, y esto me recuerda a que, en más de una cartulina de diversas protestas realizadas por médicos, enfermeras, camilleros y en general de personal de salud despedidos, han hecho ver la valentía que han tenido para enfrentar la pandemia aún sin contar con las condiciones necesarias, son ejemplo del regalo más grande de un individuo sobre otro, cuestión que poco se ve de los gobernantes hacia el pueblo mexicano.
Y el ejemplo más claro de ejemplo de bondad hacia los demás, fue el video que la doctora Tania de Monserrat Mora Arango circuló en redes sociales, video en el que su rostro lastimado por las ligas de los cubrebocas que elaboraban con sus manos, -porque no les dotaban material para sus cuidados-, y con voz quebrada daban fé de que ella junto a muchos de sus compañeras, laboraban largas horas tratando de salvar vidas de pacientes COVID-19.
En pocas palabras, estos heróes que ayer arriegaron su vida, hoy claman justicia laboral porque aunque pareciera algo descabellado, hoy se enfrentan al despido masivo que ha implementado el gobierno federal, bajo el supuesto de “erradicar la corrupción”, ocultando en el fondo un menosprecio sobre los trabajadores marginados porque, si la corrupción estuviera en los trabajadores, muy fácil sería comprobar quienes sí cumplen con los requisitos y quienes no, pero no se debería despedir sin justificación con el solo argumento de señalamiento.
La crisis de los Servicios de Salud en Oaxaca son realmente alarmantes, pero AMLO y la 4T slo callan y se muestran omisos, por ejemplo, con lo que sucede en el Hospital General Doctor Aurelio Valdivieso en la ciudad de Oaxaca, donde se redujo la operatividad al mínimo, de tal manera que solo funciona el Área de Valoración Crítica y Urgencias, porque es lo que no se puede parar, pero todos los materiales e insumos que faltan se están pidiendo a los familiares, esto, según la declaración que dió el secretario de Organización de la Subsección 07 del Sindicato de Trabajadores de Salud, Aristeo Torres López, quien además remarcó la inconformidad de que se suspendan servicios porque todo está paralizado y lo último que quedaría sería cerrar el hospital que trabaja como un centro de salud de cuatro pisos, pues lo único que se hace es dar consulta.
Es decir, lo que en meses pasado anticipaban los médicos despedidos, poco a poco va pegando más a los oaxaqueños que no tienen las facultades y recursos económicos para atenderse y curarse en un hospital privado, porque la falta de medicamentos, insumos y estudios de laboratorio la enfrentan familiares de pacientes de cirugías de urgencias, pero hay atenciones que no se pueden dar a pacientes pediátricos o en terapia intensiva porque desde septiembre que despidieron a especialistas eventuales, no se ha repuesto ese recurso humano.
A esto se suma que por las complicaciones que genera la suspensión del servicio del Centro Estatal de Transfusión Sanguínea a partir del jueves 28 de octubre, que también carece de insumos, integrantes de la Subsección ofrecieran una conferencia de prensa, donde detallaron el rechazo a la decisión de que esta unidad hospitalaria pase al IMSS Bienestar, como parte del proceso de la entrega de la rectoría de los SSO a la Federación, esto fundamentado en los cambios que se hacen de manera sexenal y que implicarían inestabilidad laboral, sin que se garantice un presupuesto financiero.
Y, para colmo de males, este 29 de octubre, por la mañana, los oaxaqueños fuimos testigos del desalojo que el gobierno morenista de la capital oaxaqueña, ejerció sobre los comercios informales que se encontraban alrededor del centro histórico, cuestión que debe poner en alerta a los oaxaqueños de buena fe, para que en el caso de que se intente tomar esa “medida”con el plantón que mantienen los integrantes de la Coordinadora de Sindicatos de Oaxaca frente a Casa Oficial de Gobierno, sumemos fuerzas y defendamos a esos padres, madres de familias, hijos que entregaron sus vidas al estar en la primera línea de batalla frente al COVID-19, solo la unidad del pueblo lastimado por quienes hoy ostentan el poder para reprimir, cambiará el rumbo y destino de Oaxaca.
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