La Nueva Escuela Mexicana tiene objetivos nobles, como desarrollar habilidades socioemocionales, pero no debe dejar de lado las bases de la educación, que son las asignaturas básicas como el español.
El joven debe saber leer correctamente y, si logra dominar la lectura, también sabrá escribir correctamente.
La educación en México enfrenta el reto de combinar la riqueza cultural con las exigencias de un mundo tecnológico.
Somos uno de los países que no lee o lee muy poco. Ahora, con la tecnología, sólo copia y pega sin saber qué contenido está entregando para ser evaluado.
Nos estamos alejando de nuestro pasado lleno de cultura y tradiciones. En estas fechas, por ejemplo, recordamos a nuestros muertos mediante la elaboración de altares y ofrendas que son expresión de nuestro pueblo, al igual que las catrinas y las calaveritas literarias, donde el sarcasmo, la ironía y la creatividad son esenciales para desarrollar composiciones que expresen nuestro sentir hacia lo que vivimos.
Por ello, las calaveritas literarias son un ejemplo excelente de cómo el ingenio mexicano puede combinar la creatividad con la ironía y la crítica social. Para lograrlo, es necesario revivir la tradición de la lectura y la escritura a través de los clubes de estudio literario.
Además, debemos incorporar la tecnología para facilitar el acceso a libros y recursos educativos.
La celebración del Día de Muertos es una oportunidad fundamental para encontrar un equilibrio entre la tecnología y las actividades tradicionales y priorizar la educación básica para asegurar que las futuras generaciones sean capaces de expresarse de manera efectiva y creativa.
Por ello, hay que regresar al origen: leer, escribir y tener un pensamiento lógico para expresar nuestro sentir. Y para muestra, un botón:
Calaverita
Estaba la Calaca haciendo un recorrido
En la tierra del ámbar sólo para saber
Cuál era el bachillerato más creativo
Que con trabajo y astucia granjeara su querer
¿Cuál es la escuela del nivel medio superior
Que en todo Simojovel demuestre ser mejor?
Al instante responde un joven “Cecyt 10, sí señor”
Ahí hacen al alumno inquieto y trabajador
Quiso entonces la muerte asegurarse
Que el pelo no le fueran a tomar
Y al Cecyt 10 comenzó a encaminarse
Para que el joven no lo fuera a engañar
Cuál sería su gran sorpresa
Que a los chicos fue a encontrar
Casi quebrándose la cabeza
Preparando un gran altar.
“No molestes, señora flaca”,
Le dijo el más lento del salón
“Estoy inventando versos a la calaca
Y si no termino va a ser mi perdición”
La muerte con tristeza se dio cuenta
Que un joven una bruja pintaba
Muy enojada se dio la vuelta
Buscando que alguien la aberración le explicara
¿Qué es esa calabaza y esa escoba?
¿Y esas arañas en los cristales?
La transversalidad, contestó la directora:
¡Qué transversalidad ni qué ocho costales!
¡Esas no son costumbres ni de aquí ni de ahora!
Aquí no debe confundirse ni el señor González
Hay que respetar hasta a la señora que llora,
Pero si de México algún día sales,
La tradición no olvides, querida señora.
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