El Instituto Nacional de Migración informó que más de 16 millones de migrantes arribaron a nuestro país en los últimos seis años con la intención de cruzar hacia los Estados Unidos. Sin embargo, México es el segundo país con mayor número de migrantes a nivel internacional, pues uno de cada 23 migrantes en el mundo es de origen mexicano.
De cumplirse las amenazas del presidente electo de los Estados Unidos, Donald Trump, el panorama será más adverso, pues él ha prometido impedir a toda costa que los mexicanos pisen territorio estadounidense.
Este dato alarmante señala que, de 2018 a 2023, alrededor de 1 millón 200 mil mexicanos emigraron a los Estados Unidos, según la Encuesta de Dinámica Demográfica publicada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía. Esto representa un aumento de casi 58 % en comparación con el periodo 2013-2018, es decir, unas 459 mil personas más. Ya en 2022, el 23 % de los migrantes que vivían en los Estados Unidos eran mexicanos, el mayor grupo de inmigrantes, lo que equivale a unos 47 millones 800 mil personas.
Durante el sexenio pasado se intentó hacer creer a la población que la migración mexicana hacia los Estados Unidos había disminuido. En un discurso, la exsecretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde, afirmó: “La migración mexicana hacia los Estados Unidos ha venido disminuyendo, gracias a la reducción de la pobreza y también porque existen mejores oportunidades de empleo y bienestar”.
No sé de qué país hablaba esta señora, porque, en primer lugar, esto no es verdad. Los datos oficiales la contradicen, pues la migración mexicana ha ido en aumento, al igual que la pobreza y la marginación, sin olvidar otros factores como la desigualdad, el difícil acceso a los sistemas de salud, el rezago educativo, la carencia de seguridad social, la inseguridad y la falta de vivienda, que afectan la calidad de vida de las familias mexicanas.
Muchas familias sobreviven gracias a las remesas, que representan su principal fuente de ingresos. En 2024 ingresaron a México cerca de 66 mil 500 millones de dólares. Más de 1 millón 700 mil hogares, es decir, 6 millones 100 mil personas, dependen directamente de estos recursos.
Es triste saber que la migración es una necesidad para muchas familias, que se ven obligadas a abandonar sus hogares debido a la pobreza, la desigualdad y la violencia.
El gobierno de la Cuarta Transformación ha presumido en innumerables ocasiones que la migración en México se ha reducido, que sus apoyos monetarios la han contenido porque ahora las familias están mejor. Cabe mencionar que en muchos estados reina el crimen organizado y las propias familias han denunciado que estas becas que promociona el gobierno federal muchas veces son arrebatadas a las familias por los delincuentes.
Por ejemplo, en Guerrero y varias partes de Michoacán, la gente no puede transitar tranquilamente las carreteras por la noche porque viven vigilados por el crimen organizado.
En una encuesta realizada por el Grupo Interdisciplinario de Temas Migratorios se buscó determinar las causas de desplazamiento de personas mexicanas. La edición de la encuesta realizada en 2019 y en 2022 arrojó que las principales razones de desplazamiento están asociadas a la inseguridad y la violencia.
En 2022, el 63 % de los encuestados señaló las amenazas, extorsiones e inseguridad ejercidas por el crimen organizado como la principal razón para salir de sus comunidades. El informe señala a Michoacán, Chiapas y Zacatecas como los principales estados expulsores por motivos de violencia.
Esta es una realidad muy triste para México. No es verdad que las cosas hayan mejorado, no es verdad que las familias mexicanas vivan mejor. La situación cada día se vuelve más complicada y recordemos que esta válvula de escape, la migración de mexicanos hacia los Estados Unidos, podría cerrarse pronto. Si se cumplen las amenazas del presidente electo de los Estados Unidos, Donald Trump, el panorama será más adverso, pues él ha prometido impedir a toda costa que los mexicanos pisen territorio estadounidense.
Es urgente que las autoridades dejen de mentir y se concentren en acabar con este flagelo, con esta situación que maltrata a los mexicanos y los orilla a dejar sus hogares, sus familias y su patria en busca de un mejor futuro para sus hijos, cuando ese futuro deberían tenerlo asegurado aquí, en México.
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