Y no se le puede llamar de otra manera, es un secuestro. Hasta el momento en que escribo estas líneas y desde la madrugada del día 21 de noviembre, la guardia nacional y los supuestamente desaparecidos, granaderos de la ciudad de México, mantuvieron cercados y literalmente secuestrados, a los manifestantes que se mantenían en plantón permanente en los alrededores de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión. La intención clara y evidente de los genízaros y sus amos morenistas, fue evitar con el uso de la fuerza, que los humildes mexicanos pobres que reclaman obras, apoyos y servicios, interrumpan la sesión oculta de a LXIV Legislatura, reunida en un lugar muy "fifí" y exclusivo, para autorizar en lo oscurito y con la mayoría morenista, el Presupuesto de Egresos de la Federación, PEF 2020.
El plantón cumplió once días con sus noches frías, y sus demandas nunca nadie las desmintió, la consigna, cuando menos del Movimiento Antorchista Nacional fue siempre la misma: ¡No al recorte del PEF 2020, exigimos obras y servicios!, pero el Presidente de ahora, igual que los anteriores, ni nos vio ni nos escuchó, y cual diálogo de sordos, sólo calumnió.
Las demandas de Antorcha, así como de las otras organizaciones campesinas del FAC y la UNTA son evidentemente justas y legítimas. Se sabe ya que el presupuesto de ingresos del año 2020, contempla un gasto de 6.1 billones de pesos, es decir, más de 6 millones de millones de pesos, que se obtendrán del cobro de impuestos a la renta, o sea, ISR; del IVA; del Impuesto a las gasolinas (IEPS); de las ventas de petróleo y electricidad, etc., y contempla, además, un endeudamiento para todos los mexicanos, de medio billón de pesos. Si todos los mexicanos, voluntaria o involuntariamente participaremos en reunir tal cantidad de recursos económicos, ¿por qué no habrían de participar también, proponiendo obras y servicios conforme a la ley, en la repartición de tan ingente cantidad de dinero que significa el PEF?
El reclamo de las organizaciones campesinas y sociales tiene razón de ser. El PEF 2020, contiene la misma maniobra electorera que del 2019; recorta presupuesto en algunos programas mientras que aumenta el financiamiento a otros, que consideran más redituables en votos. Ahora, de los 18 programas sociales que la 4T promovió el año pasado como prioritarios para el bienestar, sólo siete recibirán un incremento, vea cuales: pensiones a los adultos mayores, pensiones a discapacitados, siembra de arbolitos, precio de garantía, producción para el bienestar, y becas para estudiantes universitarios y de bachillerato. Por otro lado, recortaron un 36 por ciento a "Jóvenes Construyendo el Futuro"; quitaron un 41 por ciento a las becas para niños de nivel básico; recortaron más también, en vivienda, fertilizantes, microcréditos, ganado, desarrollo cultural, medicinas a no asegurados, etcétera. Pero lo más injusto sin duda es, que continúa el recorte a programas de construcción de obras sociales prioritarias en pueblos y colonias de todo el país. Una verdadera tragedia para los mexicanos más pobres.
El cerco policiaco a los mexicanos plantonistas comenzó desde el 20 de noviembre de madrugada. Así celebró el Presidente el 109 aniversario de la Revolución Mexicana, muy a su manera, con represión a los pobres. Pero el cerco se reforzó en la madrugada del 21. Y nadie entró ni salió del perímetro secuestrado por la 4T. Nadie. Hasta que diga el señor Presidente. Hasta que sus diputados logren aprobar el PEF 2020. Faltaba más.
Desde ayer busque en la prensa local algún comentario, aunque sea sólo uno, de aliento para los pobres colimenses antorchistas que dormían y comían a la intemperie capitalina de la ciudad de México. Buscaba yo por ejemplo, alguna mención del Gobernador Ignacio Peralta, que no hace mucho se quejó amarga y públicamente, que el PEF de AMLO quitará un 5.7 por ciento al presupuesto que por ley corresponde a Colima. Pero nada. Tal vez como premonición de lo que vendrá, no encontré nada. Ayer, en la página A6 del Diario de Colima, a pesar de que se sabe bien de la participaciones en el plantón de la UNTA, y el FAC, el medio menciona sólo a Antorcha Campesina, pero calumnia. Nos llama sin que haya necesidad, "organización priista" y con evidente mala fe afirma textual: "[...] exigen se les garanticen millonarias partidas. Se niegan a que el gobierno entregue de forma directa los apoyos a los campesinos." ¿De dónde saca tal afirmación el Diario de Colima?, ¿en qué le incomoda al Diario, que los antorchistas colimenses busquemos más y mejores condiciones de vida para las familias más pobres del estado?, ¿por qué repite, sin fundamento alguno, las calumnias mañanera del Presidente? Ojalá pronto presente las pruebas de su dicho, o quedará claro el séquito al que ahora sirve y con el que se congracia.
Seguramente los diputados de Morena, una vez avenidas sus tribus, terminarán por aprobar el dictamen del PEF 2020 tal como se los dijo el Presidente, de eso no hay duda porque el carácter electorero del mismo lo decidieron con mucha anticipación. Lo que demostrará que siempre y en todo momento, desde la semana pasada lo pudieron hacer. ¡Falso que el plantón lo impidiera! Todo fue un ardid para cabildear mejor a los morenos descarriados. Tuvieron a la gente en plantón, pero nunca pensaron siquiera negociar nada; esto es lo que queda de Morena y sus diputados: insensibilidad social y una burla vil hacia las necesidades más sentidas de todos los mexicanos humildes.
Sabiendo esto ahora, se preguntarán ¿por qué lo hicimos entonces?, es decir, ¿por qué el plantón si corríamos el riesgo de que esto pasara? Y la respuesta no puede ser más legítima: porque tenemos la razón. El México de hoy, no es ni de lejos lo que el Presidente prometió y el país entero lo sabe. Antorcha siempre lo dijo, pero con el plantón en el Congreso una vez más lo demostró. AMLO y su partido podrán aprobar otra vez lo que se les antoje. Pero no hay mal que dure cien años, y si lo dudan, nos veremos en las urnas. Dejemos al tiempo hacer lo suyo y veremos.
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