La Pobreza laboral es una situación en la que el ingreso laboral de un hogar no es suficiente para alimentar a todos sus miembros. Hogares en pobreza laboral pueden lograr alimentarse a partir de ingresos no laborales como remesas, transferencias o acceso a programas sociales.
Ante la falta de recursos los individuos no pueden acceder a alimentos, educación, transporte y por tanto, no pueden generar recursos para salir de la situación.
El 38.3% de la población (48.7 millones) se encontró en condición de pobreza laboral no puede adquirir la canasta básica con los ingresos laborales de su hogar (2T-2022)
Las seis entidades con mayor porcentaje de su población en pobreza laboral al tercer trimestre del año son: Chiapas, Oaxaca, Guerrero, Veracruz, Tlaxcala y Puebla con más del 50% de sus habitantes en esta situación.
Las seis entidades con menor porcentaje de su población en pobreza laboral al tercer trimestre del año son: Baja california Sur, Nuevo León, Baja California, Colima, Jalisco y Coahuila, con cifras menores al 28%.
A nivel nacional, 38,8% de los hombres se encuentran en pobreza laboral, mientras que el 42.5% de las mujeres se encuentran en esta situación. Además, en todas las entidades federativas del país, hay más mujeres que hombres en pobreza laboral, en promedio por cada 100 hombres en pobreza laboral, hay 110 mujeres en esta situación a nivel nacional. No obstante, esta brecha varía entre estados. Campeche, Michoacán y. Guerrero son los tres estados con la menor brecha por sexo en cuanto a pobreza laboral, mientras que Colima, Chihuahua y Coahuila presentan las brechas mas amplias.
La relación entre pobreza e informalidad laborales el análisis de este indicador permite evaluar el desempeño del mercado laboral en cada estado y la calidad de trabajos disponibles en cada uno. La informalidad laboral contempla a aquellos trabajadores cuyo empleo no les proporciona un vínculo laboral reconocido ni les garantiza el cumplimiento de sus derechos laborales, los cuales incluyen el acceso a una pensión para la vejez, el cumplimiento de una jornada laboral, liquidación y vacaciones por ley, entre otras prestaciones. A su vez también tienen proporciones elevadas de sus trabajadores en informalidad laboral.
La pandemia fue y sigue siendo una crisis de salud que derivó un conjunto de crisis relacionadas entre sí, la crisis económica, la crisis social, y la crisis de los ciudadanos .los periodos de confinamiento, las segundas y terceras olas, y la espera por la tan ansiada vacuna fueron algunos de los componentes para una de las más grandes crisis económicas y sociales de las que afectó principalmente al sector de los servicios, cuyo nivel de empleo formal todavía dista sustancialmente del nivel pre pandemia.
En las 32 entidades federativas se revisa el avance en el bienestar de las personas en esta ocasión, los resultados no muestran una fotografía del año, si no una película del retroceso del progreso social en el país, comparando el progreso entre estados y también a nivel federal (página digital como vamos México).
Por eso es necesario un cambio de modelo económico y lo que propone el Movimiento Antorchista son 4 ejes: 1. Empleo para todos que estén en edad para trabajar
2. Mejores Salarios. 3. Impuestos Progresivos que estos se cobren de manera proporcional al nivel de ingresos. 4. Justa repartición del gasto social que, de lo recaudado a través de los impuestos, se invierta en obra y servicios que beneficien al pueblo pobre de México, que se construyan Aulas Hospitales etc. Ya que México es uno de los países de América Latina que menos invierte en infraestructura de acuerdo al banco mundial.
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