El próximo 6 de junio, el pueblo de México está convocado a emitir su voto para elegir a 15 gobernadores, renovar el Congreso de la Unión y Congresos locales, así como cientos de presidencias municipales. Les han dado en llamar, por el número de puestos públicos en juego, las elecciones más importantes en la historia reciente del país. Creo yo que su importancia reside fundamentalmente en el hecho de que está en juego el futuro de la nación, pues el triunfo de Morena en las urnas sería no la continuación de la actual política, que tiene al país hecho un verdadero desastre, sino la profundización y, por tanto, el agravamiento, de la situación que hoy vivimos; seguiríamos en caída libre por la pendiente en que nos ha colocado Morena, sin un rumbo cierto y siendo víctimas de la improvisación, de los caprichos y de las ocurrencias del actual mandatario de origen morenista.
Que estos caprichos ocurrencias, improvisaciones y abusos de poder, son un verdadero y grave problema nos lo demuestran los siguientes argumentos:
Durante los dos años y medio que llevan transmitiéndose las mañaneras, éstas se han convertido no en foro para mantener informado al pueblo con veracidad y objetividad, sino en fuente de desprestigio, calumnias, ofensas, mentiras y linchamiento político, contra todas las voces críticas, inconformes con el actuar del actual gobierno. Empresarios, medios de comunicación, organismos independientes, organizaciones políticas, intelectuales, magistrados, médicos y varios etcéteras más, han sido víctimas del odio visceral y del abuso de poder del Gobierno morenista.
Estudios de investigadores serios y responsables afirman, sin que hasta el día de hoy haya habido algún desmentido rotundo del gobierno, que durante el tiempo que lleva gobernando Morena, el Presidente de la República ha dicho 45 mil mentiras. Esto quiere decir que durante este lapso nunca se nos ha hablado con la verdad, que hemos sido víctimas de la manipulación más grosera, fundada en mentiras.
Esto viene a explicar el porqué del ocultamiento por parte del gobierno del mal manejo de la pandemia, mismo que lo ha llevado a ocultar las verdaderas cifras de muertos por covid-19, y a linchar mediáticamente a quienes siempre contradijeron las cifras manejadas por la Secretaría de Salud y por su vocero especialista en argucias, Hugo López-Gatell. Hoy, obligado por sus propias cifras, el gobierno ha tenido que reconocer forzadamente que no son 205 mil muertos por covid-19, los ocurridos hasta el día de hoy, sino 322 mil 139 las defunciones provocadas por la irresponsabilidad del gobierno de la República. Estudios profesionales sostienen que son más de 500 mil, lo que nos coloca como la segunda nación con más defunciones a nivel mundial. Si hubiera alguna duda de que nos han estado gobernando a base de mentiras, estos datos demuestran fehacientemente que las afirmaciones y las críticas que hacen los estudiosos son absolutamente ciertas.
El diario británico The Guardian calificó la crisis causada por la pandemia como “una tragedia provocada por la arrogancia del presidente Manuel López Obrador, y la negligencia de su gobierno para contener la propagación del virus”. Destacó que López Obrador no toma en serio la pandemia y confunde a la población sobre las medidas para evitar los contagios de covid-19. (Cualquier similitud con el gobernador poblano, Miguel Barbosa Huerta, no es coincidencia sino absoluta correspondencia con la manera de pensar, actuar y gobernar de los morenistas).
El medio británico ejemplifica que el presidente de México, al igual que otros mandatarios como Jair Bolsonaro y Donald Trump, evita seguir las recomendaciones para evitar la propagación del virus, como el uso de cubre-bocas o el distanciamiento físico. “Bolsonaro, Trump y López Obrador tuvieron una actitud similar: la negación, la respuesta tardía, la minimización de la severidad y también la idea de no suspender actividades”, comentó Eduardo González Pier al medio británico. El exfuncionario subrayó que, de haber realizado una buena respuesta al virus, México habría evitado entre l00 y 200 mil muertes. He aquí una caracterización precisa de la conducta de López Obrador, y una conclusión exacta de los males producidos por dicha actitud, realizada por un medio extranjero.
Una razón más que prueba que los grandes males de la nación son producto de la mala administración que ejercen los gobiernos morenistas.
Como daños colaterales producidos por la pandemia, pero igual de importantes, está la pérdida de 12 millones de empleos y, por consiguiente, el aumento de pobres y la agudización de la pobreza en nuestro país. El aumento de las ayudas asistenciales, no es ningún afán de justicia y mucho menos una forma de acabar con la pobreza, es la manera más deshonesta de fingir preocupación por los pobres después de haberlos condenado a morir por covid-19 o por hambre.
En resumen, los 12 millones de desempleados, los cientos de miles de defunciones por covid-19, la zozobra en la que viven miles de mexicanos en varias regiones del país impuesta por bandas criminales, la falta de medicamentos que tienen en angustia permanente a miles de familiares de los enfermos, la cancelación de Procampo, del Seguro Popular, de las Estancias Infantiles, del Ramo 23, que tiene en el atraso ascendente a miles de poblaciones, todo ello, hace de Morena un partido imposibilitado para gobernar al país. Por tanto, este 6 de junio tu voto debe ser el instrumento para elegir a una Cámara de Diputados que se convierta en un dique que detenga los abusos de poder y los atropellos de Morena en contra de la población más desprotegida del país: como tú y como yo.
La Cámara de Diputados debe servir como contrapeso al poder que tiene el presidente para decidir en contra del pueblo de México, pues la mayoría morenista aprueba, sin modificar ni una coma, las propuestas presidenciales. Si se evita que Morena y sus adláteres hagan mayoría, el presidente debe justificar a plenitud sus propuestas y aceptar el rechazo de las mismas, si están fuera de la ley o se atropellan los derechos de los mexicanos. El Ejecutivo deberá rendir cuentas al Congreso de las malas decisiones o caprichos cometidos hasta el momento.
¿Quién puede lograrlo? El pueblo con su voto. De nosotros habla la fábula. En nosotros, por tanto, está el remedio. El ejercicio de un voto consciente, producto de un razonamiento frio y fundamentado, nos conducirá a la conformación de un Congreso capaz de poner un alto a todas las ocurrencias morenistas.
Por el contrario, la emisión de un voto producto de dádivas, de falsas soluciones o por la creencia en las mentiras que a diario se nos repiten en las mañaneras, nos llevará irremediablemente a la más caótica situación nacional, sin saber cómo ni cuándo saldremos de ella.
La única alternativa que nos queda es la coalición “Va por México”, conformada por el PRD, el PAN y el PRI. No es lo que necesitamos para la solución verdadera de nuestros males, pero es lo menos malo que nos pudiera ocurrir a los mexicanos, si lograran conformar un Congreso de la Unión más libre, más democrático y más soberano.
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