Inician las campañas y es triste volver a ver las mismas caras de siempre, con uno u otro color, verlos pintados ahora de guinda o de verde, pero siempre lo mismo. Por eso es necesario meditar sobre el tema: ¿y qué han hecho durante todo este tiempo? Aunque la respuesta es casi la misma, siempre habrá matices; como dijo aquel, unos engañan más que otros.
Particularmente en Baja California, muchos “ahora candidatos”, sin haber terminado sus cargos, ya se postularon. Hablemos de los presidentes de todos los municipios que buscan otro hueso, pero sin haber terminado de cumplir sus promesas; hablemos de diputados que buscan también otro hueso, como dice el mexicano común, asegurando el pan del siguiente año.
Particularmente en Baja California, muchos “ahora candidatos”, sin haber terminado sus cargos, ya se postularon, así como presidentes de municipios que buscan otro hueso, pero sin haber cumplido.
A todos estos personajes les es fácil salir de un puesto y llegar a otro, mentir y volver a mentir, pero es tarea de todos los bajacalifornianos recordarles para qué y por qué están en el poder; recordarles a todos que hay promesas por cumplir, que hay mucho pendiente y que es necesario que cumplan; recordarles que la deuda que tienen con el pueblo es grande y se tiene que saldar, pues de lo contrario seguirá ocurriendo lo mismo.
Ante este panorama que se avecina, es necesario que el antorchismo levante la voz y se pronuncie para llamar a la unidad, a formar un bloque y de esta manera juntos, vayamos a exigir lo que por derecho les corresponde a los mexicanos; que vayamos y exijamos obras y servicios, que exijamos un programa de vivienda popular al que todos tengan acceso, que exijamos leyes que garanticen el bienestar social de todos los mexicanos y no sólo de algunos.
Es el momento de que mostremos que Antorcha es una organización bien estructurada y que caminamos todos juntos hacia el mismo rumbo, que nuestra lucha se haga valer y que estos veinte años que hemos cumplido aquí en el estado, nos sirvan de fuerza y aliento para seguir encabezando al pueblo trabajador.
Un llamado a todos los desamparados, para que no caigan con los cantos de sirena y busquen refugio en sus hermanos de clase, porque hoy es más necesario que nunca que todos los antorchistas, todos, nos pongamos a la cabeza y alumbremos el camino del vecino, el camino del desamparado, así como alguna vez alguien lo hizo por nosotros; ya lo decía la poesía: ¡Enseña a tus hermanos el camino de luces! ¡Únete a sus esfuerzos por tener libertad! ¡Dile cómo librarse de engaños, que son cruces, y tendremos un mundo donde todo sea paz!
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