Diario Cambio desató una campaña de calumnias contra el diputado local por el Distrito 23 de Puebla, Nibardo Hernández Sánchez. Afirmó que un grupo de 16 presidentes municipales, de los que no da los nombres, lo denuncian porque les pidió "entre 50 mil y 100 mil pesos, a cambio de gestionar obra pública para sus municipios”. Según el periódico, que ahora es el desinteresado portavoz de los ediles afectados, la relatoría del crimen le fue contada por "un grupo de presidentes municipales que fueron timados por el legislador priista”. Diario Cambio no tuvo la delicadeza de pedirle al diputado la respuesta ante las graves acusaciones. Cuando Nibardo se enteró de las acusaciones, se defendió exigiendo pruebas contundentes a los ediles. Pero no demostraron nada y callaron. Este silencio indicaba ya, obviamente, que la acusación era una calumnia de cabo a rabo. Nosotros creímos que ahí quedaría el asunto.
Días más tarde, Diario Cambio insistió en la difamación y publicó las hojas de una supuesta denuncia ante la Fiscalía General del Estado contra el diputado, "por el delito de fraude", realizada por "uno de los afectados que pidió la gracia del anonimato”. Es decir, según sus fuentes, el periódico tendría en su poder todos los elementos para probar, con hechos, testimonios y datos precisos, el delito de Nibardo Hernández. Pero, si usted revisa las dos notas publicadas, se dará cuenta de que ni una ni otra se sostienen en sus argumentos. Se trata de una sarta de acusaciones sin sustento para descalificar a un diputado local que es militante del Movimiento Antorchista Nacional. Y vienen las preguntas: ¿Por qué se golpea a Nibardo Hernández? ¿A quién le beneficia el desprestigio de Antorcha en la zona de la Mixteca poblana? ¿Quién lo golpea? ¿Y con qué objetivo? Pongamos, pues, los puntos sobre las íes.
Primero. La publicación de la supuesta denuncia realizada por el "edil anónimo” ante la Fiscalía General del Estado de Puebla contra Nibardo Hernández Sánchez no demuestra que el imputado sea culpable. Eso está claro para cualquier cabeza con cuatro dedos de frente. Pero prueba que la mano que mece la cuna busca culpabilizar, mediáticamente ante la opinión pública, a un hombre inocente. Se pretende sustituir un juicio por una acusación directa en la prensa. ¿Es Nibardo el primero sobre quien la prensa hace "justicia” antes que la ley intervenga? No lo es. La sentencia de culpabilidad vertida sobre las planas de los diarios es una trampa usada desde hace años por quienes tienen acceso dinerario a los medios para someter, injustamente, a sus enemigos políticos. Ninguna novedad, pues: solo que ahora Nibardo es el "culpable” según Cambio.
Segundo. Los acusadores se guardan muy bien de dar sus nombres y los de sus municipios, porque tienen un problema: si entregaron dinero en un acto de corrupción desde las cuentas de la presidencia, entonces ellos están metidos hasta la médula del crimen. Y son, todos el tan culpables como aquel que les pidió el dinero. Porque oyeron, actuaron y pagaron. La fila para pasar años en la cárcel iniciaría con el diputado, pero seguiría con los 16 ediles que le "dieron dinero”. Están metidos, señores presidentes, en un problema grave.
Tercero. Ni en la denuncia publicada por Cambio ni el "edil anónimo” denunciante ni los otros 15 presidentes municipales demuestran que Nibardo Hernández haya tomado el dinero ellos supuestamente le dieron. Es un secreto bien guardado. Veamos: se denuncia que el diputado les pidió de 50 a 100 mil pesos y que los presionó para que se los dieran antes del 20 de julio de 2020 y que la entrega debía hacerse "en un sobre traspapelado con hojas, para no levantar sospechas”; es decir, se detalla lo que se debía hacer. Pero… ¿se hizo? ¿Se entregó dinero? ¿Nibardo lo recibió? ¿Algún presidente municipal fue tan tonto como para sacar de la presidencia 100 mil pesos para dárselos a un diputado? ¿Alguien es capaz de regalar 100 mil pesos nomás porque alguien te hace una promesa? ¡Claro que no! Y ése es el principal problema de la denuncia: nadie demuestra que Nibardo Hernández Sánchez haya recibido dinero desde las manos de los ediles. Su mentira queda descubierta.
El 11 de enero, en alcancediario.mx, se publicó la respuesta de uno de los ediles que "denunciaban” a Nibardo: "Favián Calixto afirmó que es falso lo que el medio publicó y que se ha reproducido en redes sociales: <
¿Quién está detrás de la acusación? Sobre este tema, el periodista Gerardo Pérez hace unos días publicó una columna; de ella tomo algunos datos que me parecen relevantes: "Al descubierto está jugada perversa de Jorge Estefan Chidiac, quien de día ama y jura lealtad al antorchismo, pero de noche confabula con el grupo que detenta el poder… la extinción Antorcha Campesina (…) Pero… La máscara empezó a desprenderse, la cual ocultaba rostro del autor del "movimiento” de 16 presidentes municipales que "demandaron” al diputado de Antorcha. Demanda que tiene como fin evitar que Nibardo Hernández Sánchez vaya por la reelección y la candidatura de Acatlán sea para Amadeus Cuadrado Galeano, alcalde de San Pablo Anicano. Por cierto, Nibardo Hernández fue el único candidato del PRI que ganó la elección de 2018. Con la suma: La hermana del edil Amadeus Cuadrado es pareja sentimental de Juan Carlos Santiago Pimentel. Y Juan Carlos es el secretario particular de Jorge Estefan. Así queda al descubierto la perversidad”.
El PRI y don Jorge Estefan deberían valorar la fuerza electoral de Antorcha y, en estos tiempos tan decaídos para el priismo en el estado, dar un trato respetuoso y digno a la única organización que, pese a los golpes de Moerna, no sólo no se ha caído, sino que se ha imulsado con más fuerza en el estado y, en especial, en la Mixteca, esa región en la que Estefan buscará ser candidato a diputado federal. No prendan fuego cerca del barril de pólvora. No les vaya a estallar.
0 Comentarios:
Dejar un Comentario