Después de tres días de plantón frente a la Secretaría General de Gobierno, el centenar de antorchistas, se retiró con el compromiso firmado de solución inmediata a sus legítimas demandas. Así como pasó inadvertida su instalación en Ciudad Administrativa, su retiro, apenas mereció unos cuantos comentarios de portales de internet. ¿Por qué se trató de ocultar su petición y ahora se oculta el resultado y en cambio, de nueva cuenta, se difundieron ataques en contra de un servidor en redes de comunicación de periodistas y funcionarios de gobierno?
Hagamos un recuento de la situación, para efectos de informar a la opinión pública acerca de estas comunidades, la legitimidad de su lucha y el importante papel que ha jugado el Movimiento Antorchista con su tesonero papel de concientización de estos humildes oaxaqueños, que han aprendido a conducir sus peticiones dentro del marco legal de nuestra sociedad, pero con la fuerza de su unión, unidad que, ante la negativa de las autoridades exige como lo hicieron en esta ocasión, hasta obtener la solución a sus demandas.
San Miguel Monteverde, perteneciente al municipio de San Antonino Monteverde, en la Región de la Mixteca, es una comunidad que se fundó hace 38 años, ante la petición de habitantes de la zona que estaban dispersos en la agreste orografía de la zona, que necesitaban agua potable, electrificación y demás obras y servicios, cuya obtención era imposible por la dispersión mencionada. Ante ello y por propuesta de Antorcha, se creó un asentamiento nuevo, difícil proceso que implicó convencer a los habitantes de dejar sus pequeñas parcelas y sus hogares. Hubo que dinamitar las rocas en el suelo para la introducción del drenaje, pero poco a poco fue tomando forma el centro poblacional, hasta llegar hoy a contar con mejor y más completa infraestructura que la cabecera municipal misma, con casi 5000 mil habitantes, que ha estado solicitando su escuela preparatoria desde hace cinco años, como parte del proyecto general que incluye una casa de cultura y una unidad deportiva integral. En todo este proceso, se instituyó en sus Usos y Costumbres el que la comunidad reconoce y acepta que el Movimiento Antorchista con su planteamiento teórico de enseñar al pueblo pobre a regir su propio destino, asumiendo el papel de dirigentes, ha instituido que la dirigencia antorchista es colectiva y nativa de su propia comunidad, vigilada por la asamblea comunal que es la máxima autoridad. Y esta esta perfecta comunión de ideales y objetivos entre el Movimiento Antorchista y sus miembros de Monteverde que ha dado como producto una comunidad ejemplar en todo el estado, reconocida por sus habitantes y por el gobierno mismo.
En cuanto a San Pedro Ocopetatillo, municipio enclavado en la Sierra Mazateca, en la Región de la Cañada, a donde llegó Antorcha hace 18 años, ha observado un desarrollo sobresaliente, como ejemplo en toda la zona, con toda su infraestructura social completa, desde calles pavimentadas hasta sus escuelas con techados y canchas necesarias, una casa de salud, con la remodelación de su Iglesia y la construcción en proceso de un mirador turístico, todo ello en una comunidad de no más de mil habitantes. Pues bien, hasta hace tiempo todo había sido tranquilidad y armonía, pero políticos de filiación morenista, azuzaron a un grupo reducido de personas que violando toda norma electoral, en 2019, cuando se realizó la elección de su comunidad, que evidentemente perdieron, presentaron una segunda acta de asamblea, firmada por el Comisariado de Bienes Comunales, haciendo votar a fallecidos y a menores de edad. La mayoría representada por el presidente municipal electo, demostró la ilegalidad de ese procedimiento, pero a pesar de ello, el tribunal estatal, argumentando que por existir un supuesto conflicto intercomunitario, no se podría llevar acabo la elección, finalmente la Sala Xalapa del Tribunal superior de la República, emitió el dictamen en 2020 para que se expidiera la convocatoria de una nueva elección. La SEGEGO por su parte y ante la falta de presidente municipal, ha enviado hasta esta fecha, dos Comisionados, violando a todas luces el derecho de los habitantes a elegir a su gobernante, pues la función unida de esta figura administrativa, es única y exclusivamente convocar a una asamblea para elegir al presidente municipal. En todo este proceso, y contrario a las medidas radicales y violentas, que normalmente toman las comunidades que con argucias son impedidas a elegir a sus autoridades por los grupos de poder con el contubernio de las autoridades estatales, los ocopetatillenses, gracias a la elevación política que han alcanzado por la influencia educativa del Movimiento Antorchista, nunca usaron la fuerza ni cayeron en provocaciones, a pesar de que los antorchistas son el grupo amplia mayoritario. Siempre siguieron el proceso legal y electoral, a pesar de que estuvo plagado de argucias y triquiñuelas de todo tipo.
Y estas son las comunidades que instalaron su plantón, una por estar esperando cinco años a que se oficialice la preparatoria que fundaron, cuyos maestros pagan ellos mismos y, la otra porque a un poco más de dos años, de haberse anulado la elección de su presidente municipal, seguía el bloqueo y la violación de su derecho de autodeterminación.
Para quien no tiene una mente prejuiciada y piensa con espíritu crítico, será obvio que estos ciudadanos no solo tienen derecho de exigir, sino que incluso se tardaron demasiado en hacer valer sus derechos. Y por tanto, es también claro, que las autoridades no tenían ni tuvieron nunca, un argumento que demostrara que esto no debía atenderse. La realidad cayó pues por su peso, en 25 días, máximo, deberá normalizarse la situación de la escuela de Monteverde y el 28 de este mes se realizará la elección a presidente en Ocopetatillo.
He aquí por que la conjura del silencio, conjura que se comprueba porque los ataques virulentos y criminales a mi persona, no se dieron en los medios de información porque no convenía generar polémica ni darme la oportunidad de usar esta tribuna de argumentar y demostrar que nos asiste la razón, pero sobre todo, que estos pequeños triunfos demuestran que la lucha abnegada, honesta y tesonera de Antorcha da resultados, al final de las cuentas.
Por lo tanto, por más ataques y calumnias que se viertan sobre nosotros, los antorchistas no solo existimos incólumes, sino que cada vez más mexicanos humildes se convencen que el camino que Antorcha propone para la solución de los problemas y carencias de los pobres, es el único camino posible.
Invito por tanto a quienes no se han animado a acercarse a nosotros, a que lo hagan, porque por los antorchistas, hablan los resultados como estos a que me refiero. Mientras la 4T se derrumba, antorcha se fortalece y tarde o temprano, la historia nos dará al razón.
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