De acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), la población ocupada en México registró un incremento de 5.9 millones en el tercer trimestre del 2020, respecto al trimestre previo. Sin embargo, aún quedan por debajo de lo registrado en el segundo trimestre en 4.3 millones, antes de la llegada de la pandemia. En dicha fecha la pérdida de empleos fue de 10.3 millones, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Durante el tercer trimestre del año, es decir, de julio a septiembre de 2020, México pasó de tener 57.2 a 53.8 millones de personas económicamente activas, lo que significa una disminución de 3.6 millones de personas de la PEA, comparado con el mismo periodo del año pasado.
Lo anterior significa que la tasa de desocupación para el tercer trimestre del 2020 se estimó en 5.1% de la Población Económicamente Activa (PEA), tasa superior al 3.7% del 2019.
De acuerdo con la ENOE, realizada por el Inegi, la disminución de la población ocupada se reflejó principalmente en restaurantes, servicios de alojamiento y comercio, con una reducción de 1.1 millones cada uno.
Al cierre de octubre de este año, Durango se ubicó en el quinto lugar con las mejores cifras de generación de empleo, aunque con números negativo. Según los datos del mismo Inegi, en la capital duranguense la tasa de pérdida de empleos es superior al 6%, mientras que en todo el estado es de 4.7%, que significan 38 mil desempleados. Además, cada día hay empresas que tienen que cerrar sus puertas, hay por lo menos 250 comercios con un anuncio de cierre.
Pero no hay que echar las campanas al vuelo ya que, del total de la PEA, un poco más de la mitad (51%) pertenecen al empleo informal, lo que significa que no tiene asegurado un salario fijo, por lo que tiene que salir a buscar el sustento de la familia día a día. La realidad es que las estadísticas no miden con precisión el impacto que genera el desempleo en el sector informal.
Pero podemos observar en los datos, que las cifras son muy duras y la pandemia ha venido a agravar un poco más la situación de nuestro estado, pues las restricciones de movilidad y cierre de negocios ha pegado principalmente en el sector informal y ya son más de 9 meses de incertidumbre causada por la covid-19, son muy duros los números de las personas que han cerrado sus negocios por haber quebrado, de quienes hoy no tienen trabajo, de quienes tienen pequeños negocios y comercios, que aun habiendo sobrevivido el confinamiento, viven la incertidumbre de un fin de año que implica pagos de salarios y aguinaldos, pero con ventas bajas.
Esta pandemia afecta no solo al sector empresarial, pega a la economía de nuestro estado, de sus familias, y trae consecuencias graves como desempleo, pobreza, alza en delitos, y todo esto ha sido consecuencia directa de las políticas erradas o nulas para controlar los contagios a nivel nacional.
Para muchos negocios es indispensable seguir abriendo diariamente, aunque no sean considerados esenciales, pues la mayoría de los dueños de esos locales viven al día y por lo tanto resulta necesario que las autoridades brinden apoyos para este sector de la población conformado por micro y pequeños empresarios los cuales, si no trabajan, no pueden cubrir sus necesidades más básicas.
Con la llegada de la autoproclamada cuarta transformación, las cosas han empeorado para los micro y pequeños negocios, es por eso que el Movimiento Antorchista hace un llamado a los pobres, a la clase media y a los empresarios maltratados por este mal gobierno, que nos organicemos en un frente común y en los comicios del próximo año no permitir por ningún motivo que Morena siga teniendo mayoría en el congreso, en los estados y en los municipios. La solución está en nuestras manos.
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