MOVIMIENTO ANTORCHISTA NACIONAL

Sin aclarar ejecuciones en Tequisquiapan

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México ha sido nota mundial en los últimos años por los graves problemas de inseguridad que atraviesa. En lo que va del sexenio de Andrés Manuel López Obrador han sido asesinados más de 140 mil personas, muy por encima de los crímenes cometidos durante los seis años gobernados por Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto. Sólo en el último fin de semana de abril pasado se registraron 285 asesinatos.

Sin embargo, en Querétaro, las cosas en materia de seguridad, particularmente en algunos municipios, han ido de mal en peor. Aunque las autoridades callan para no alarmar a la población, ésta lo percibe, lo siente y vive el peligro todos los días. Ejemplo de ello es lo ocurrido en Tequisquiapan, municipio anteriormente tranquilo y conocido por los mexicanos por su vocación turística, gobernado por el alcalde independiente, Antonio Mejía Lira.

Tres hombres y dos mujeres fueron asesinados por un comando armado en el Rancho “Los Seis Hermanos”, ubicado en la comunidad de El Tejocote, lugar donde elementos de la Fiscalía General del Estado encontraron armas, droga, celulares y dinero.

En su momento, la dependencia detalló que fueron localizadas 44 armas de fuego, 57 cartuchos útiles, equipos celulares y documentación con la fotografía de una persona, presuntamente hijo de una de las víctimas, Álvaro Sánchez, que operaba en el Estado de México, Querétaro y Veracruz.

Asimismo, en inmuebles cateados en los fraccionamientos Zakia y El Campanario en los municipios de El Marqués y Querétaro respectivamente, se encontró equipo tácito, mariguana y 3 mil 58 dólares en efectivo, sin que hasta la fecha hayan sido aclarados los hechos por las autoridades correspondientes.

Según fuentes federales consultadas por Sergio Arturo Venegas, director editorial y columnista del periódico Plaza de Armas, sostienen que tras el asesinato de A?lvaro Sa?nchez Sa?nchez, alias El Tartamudo, li?der del Ca?rtel de los Hermanos Sa?nchez, con influencia en Chiapas, Veracruz y Estado de Me?xico, que vivi?a aqui? con su familia, se le dejo? libre el 27 de diciembre pasado cuando fue detenido por autoridades de El Marque?s, entregado a la delegacio?n de la Fiscali?a General de la Repu?blica (FGR) y puesto en libertad a pesar de que trai?a armas.

El asunto se agrava porque, según las autoridades consultadas por el columnista, las armas, cartuchos y equipo ta?ctico, que estaban registrados ante la Secretari?a de la Defensa Nacional (Sedena) a nombre de su mujer, no aparecen; algunos escoltas militares que resguardaban al duen?o del inmueble; solamente se localizaron sus armas.

Porque Álvaro Sánchez fue detenido una segunda ocasio?n sin más consecuencias a pesar de haber una ficha de localización por el gobierno del Estado de México, acusado de narcotráfico, y que quien debio? informar a la autoridad estatal y federal de la presencia de este hombre, era el alcalde de Tequisquiapan, Antonio Mejía Lira, ocupado en hacer campaña política a favor de una hermana, no lo hizo.

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