Andrés Manuel López Obrador, presidente de la República, todos los días por la mañana presenta con cuentas alegres sobre el manejo de su administración con cifras que no corresponden con la realidad del país y habla de un México distinto al que vemos los demás.
La verdad es que existen carencias que pasan al grado de miseria y también se agravan los problemas de salud, seguridad, vivienda y educación. En todos lados faltan obras de infraestructura urbana, no hay dinero ni para los edificios escolares, gran parte de los impuestos se van en programas asistenciales que si bien es cierto ayudan en la economía familiar no resuelven las necesidades antes mencionadas, pero que se pretende tener conforme a la gente y abandone su aspiración por la mejora del entorno.
El Gobierno federal limitó a estados y municipios del presupuesto que se les debe destinar en razón a los impuestos que aporta cada entidad y que forman parte del presupuesto público, por tanto, a los gobiernos locales solamente les alcanza para el pago de nómina de sus trabajadores y casi siempre salen debiendo al final del año.
Es por esta razón que el Movimiento Antorchista invita a los mexicanos a que conozcan el trabajo que ha realizado en varios municipios en donde gobiernan los dirigentes de la organización, que vean que con los pocos ingresos, pero con gestión y lucha permanente se han hecho obras que han cambiado la vida de sus ciudadanos.
Considero que en México no estamos preparados ni educados para comprender los beneficios del trabajo colectivo y aunque en realidad los resultados del mismo son socialmente satisfactorios, el individualismo priva a la gente para ser partícipe de sus frutos, pero nunca está por demás seguir buscando la forma de mejorar las condiciones de vida de todos.
Por lo tanto, es necesario que orientemos nuestro pensar en cuanto a la práctica política porque los ricos de nuestro país sí se ponen de acuerdo para impulsar al gobernante que les de beneficios, pero perjudicando a los pobres pues las políticas públicas están al servicio de ellos.
Insisto para alcanzar ese anhelo, urge que los pobres nos organicemos para tener representantes que defiendan nuestros intereses, que pongan en práctica un modelo de desarrollo que promueva el trabajo para todos, el aumento del salario real para alcanzar una vida digna, así mismo, que obligue al cobro de impuestos progresivos donde pague más el que más tiene y finalmente, que dirija el presupuesto a obra pública en beneficio de toda la población.
Mexicanos, los invito una vez más a que si leen mi opinión no solamente crean en mis palabras, ahora en internet pueden encontrar información, fotos y datos de los avances que se tienen en municipios gobernados por Antorcha como Tecomatlán en Puebla, Chimalhuacán e Ixtapaluca en el Estado de México o en Armadillo de los Infante, San Luis Potosí, así como en el municipio de Trancoso, Zacatecas. En estos lugares se nota el desarrollo por las acciones implementadas por gobiernos encabezados por Antorcha y que son producto de la ciudadanía organizada que trabaja en colectivo para su beneficio, porque como dijo Martin Luther King: "sabemos por una dolorosa experiencia que la libertad jamás la concede voluntariamente el opresor, tiene que ser exigida por el oprimido. Hace años estoy oyendo esa palabra… "¡Espera!” ése "espera” ha significado siempre: "Nunca”. Así que si queremos una patria diferente a la ofrecida por Morena debemos construirla entre todos.
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