La Ley Federal del Trabajo, en su artículo 8º, menciona que un trabajador es la persona física que presta a otra, física o moral, un trabajo personal subordinado. Para los efectos de esta disposición, se entiende por trabajo toda actividad humana, intelectual o material, independientemente del grado de preparación técnica requerido por cada profesión u oficio.
Pero, ¿a qué se refiere dicha ley cuando menciona que el trabajador presta esfuerzo físico, moral, Intelectual o material? Aunque en el mencionado documento no se especifica, se sabe, de antemano, que lo que ofrece el trabajador es su fuerza de trabajo, que consiste en una cantidad determinada de energías que se necesita para desarrollar una actividad cualquiera y que en la mayoría de los casos, el beneficiado es otro ser humano, llamado también "patrón". Luego entonces no existe el trabajo sin el trabajador; es una alineación constante que depende una de la otra, es como decía Lovachevsky, la relación que guarda el espació y el tiempo, dependen de la materia. La fuerza de trabajo de un obrero entonces está condicionado por el patrón y sus intereses, compra la fuerza de trabajo de éste por una determinada cantidad de dinero, habiendo calculado con anticipación cuanto le va hacer ganar en una jornada laboral, que con la implementación de mayor maquinaria en los centros de trabajo, basta un par de horas, para que el obrero genere lo equivalente al valor de su fuerza de trabajo, y todo lo demás, llegue a las manos del patrón, ya que éste siempre gana, aunque eso signifique mayor explotación del trabajador. Quiere esto decir, entonces ¿que éste primero de mayo los obreros festejan la relación laboral que guardan con sus patrones o la explotación constante en la que viven? La respuesta es un NO tajante.
El 1° de mayo se conmemora en todo el mundo el Día Internacional del Trabajador en homenaje a los llamados Mártires de Chicago, grupo de sindicalistas anarquistas que fueron ejecutados en 1886. Ese mismo año, la Noble Order of the Knights of Labor, una organización de trabajadores, logró que el sector empresarial cediese ante la presión de las huelgas por todo el país. Fue un golpe socialista que obligó incluso a que el Papa PIO XII reconociera y abrazara el día internacional del trabajo. Pero ¿por qué los trabajadores se pusieron en huelga? Se pueden dar varias razones es este cuestionamiento, incluso los mismos medios de comunicación al servicio de las clases adineradas han sacado su versión, pero la respuesta más certera, es que los obreros protestaban porque sus condiciones de vida eran bastante penosas; no solo se la pasaban mal en las fábricas, sino que prácticamente no contaban con los servicios básicos con que todo ser humano debe contar, mientras que sus patrones se enquiquecían cada vez más.
Aquí es importante mencionar, que la represión que sufrieron los obreros de Chicago es una de las tantas que han sufrido la mayoría de los obreros del mundo por exigir condiciones dignas de vida. Para el caso de nuestro país, como ejemplos están los casos de Cananea y Rio Blanco, 1906 y 1907 respectivamente. Incluso, hace pocos meses, fueron reprimidos brutalmente decenas de obreros de la empresa Tamsa en el estado de Veracruz.
Entonces ¿para qué sirve el primero de mayo?
Para homenajear a todos esos hombres caídos que lucharon intensamente en busca de mejores condiciones de vida de todos los explotados. Y para alzar la voz y decir que la bandera de los obreros de chicago, de Cananea, de Rio Blanco, de Tamsa, etc., siguen siendo el objetivo de millones de trabajadores. Ha llegado la hora de organizarse y exigir un futuro mejor, en el estado de Colima, Antorcha Revolucionaria es la bandera de los obreros.
"En cuanto alguien entienda que obedecer las leyes injustas es contrario a su dignidad como hombre, ninguna tiranía puede dominarle"
Mahatma Gandhi.
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