MOVIMIENTO ANTORCHISTA NACIONAL

Coronavirus en México: pocos contagios y lo que vivimos los pobres

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Las noticias surgen de la realidad y nos pueden servir como punto de partida para investigar las causas más profundas de las cosas que se ven y sacar conclusiones verdaderas si tenemos datos ciertos.

Hasta las 21:00 horas del 15 de abril, según el mapeo de datos que recopila con los gobiernos nacionales el Centro de Ciencia e Ingeniería de Sistemas (CSSE) de la Universidad Johns Hopkins (JHU) de los Estados Unidos (USA), los países con más infectados de coronavirus (covid-19) en el mundo son: Estados Unidos con 637,357; España con 180,659; Italia con 165,155; Alemania con 134,753; Francia con 134,582; Reino Unido con 99,489; China con 83,356; Irán con 76,389; Turquía con 69,392; siguen otros países y México se ocupa en el lugar 36 con 5,399 casos.

Llama la atención sobre la gran diferencia en el número de contagiados entre Estados Unidos y México que, incluso está por debajo de países latinoamericanos más pequeños, con menor población y que tomaron medidas radicales de prevención más rápidamente, mientras aún el gobierno mexicano adoptaba una actitud indolente ante la pandemia. Países como Perú, Chile y Ecuador reportan más contagiados que México.

Científicos, periodistas y políticos nacionales e internacionales han manifestado que los números que maneja el gobierno mexicano ante la contingencia son increíbles. El flujo migratorio en la frontera nortemexicana, la deportación de miles de connacionales y sudamericanos que laboraban en Estados Unidos, el gran intercambio comercial con los norteamericanos, la tardía e irresponsable reacción de los gobiernos de ambos países con la falta de medidas de prevención y el deplorable estado del sistema de salud mexicano, dan la impresión de que en México se maquillan los datos.

La única deficiencia de muchos opinadores es que sólo intuyen el problema. Porque los pobres de este país lo vivimos y sí sabemos por qué el gobierno el gobierno mexicano sólo reporta esos números a los diversos organismos que van contabilizando los contagiados, muertos y recuperados.

En México, el gobierno federal está más preocupado por la próxima elección que por la vida de los mexicanos. El procedimiento que se sigue para obtener ese número es fácil:

1) Se evita insistir del peligro de contagio, para que la gente salga a trabajar y no se quede en casa. Eso, para no echarse encima a la actividad informal de la que vive mucha gente.

2) Y si la gente procura cuidarse, quedándose en casa, se le promueve la idea de que la contingencia pasará pronto, así se le vacuna y no exigirá un apoyo alimentario y/o que se le condone pago de servicios públicos.

3) Se procura mantener viva la economía a costa de la salud de los empleados y sin decir nada a las empresas que mandan a cuarentena a sus trabajadores sin percepción alguna.

4) No se aplican pruebas para no elevar los números: si no sabes que tienes coronavirus ¿para qué quieres la prueba? Y si ya lo sabes, ¿ya para qué quieres la prueba?

5) Se ha indicado a los trabajadores de salud de que no reciban a enfermos de coronavirus (lo dicen ellos), porque se pueden contagiar. En los hospitales, reciben llamadas: si tienes los síntomas, aíslate; si saliste vivo, bien y si no, la covid-19 no puede cargar con la culpa.

6) En la prensa se presume adquisición de insumos para hospitales, pero médicos y enfermeras rechazan a los enfermos por miedo al contagio, debido a la carencia de equipo adecuado, según sus propios testimonios en "las benditas redes sociales".

7) En las clínicas y hospitales en que se ven obligados a recibir a pacientes, se presiona a los médicos a diagnosticar cualquier tipo de enfermedad: así no hay aumento de contagios por covid-19, sólo han aumentado los muertos por "neumonía atípica".

8) Si algún médico atiende a algún enfermo de coronavirus es bajo su cuenta y riesgo. Así que para evitarse cualquier problema, prefieren no realizar ningún tipo de diagnóstico a pacientes y los dejan morir. Simplemente avisan a los familiares que para evitarse más complicaciones, mejor que consigan dinero para cremar a su próximo difunto.

Pongo dos casos, como ejemplo de lo que vivimos los pobres:

A) El pasado 30 de marzo, un señor de Tepetzintla (municipio de la sierra norte de Puebla), hoy fallecido, me solicitó por teléfono le orientara cómo obtener un estudio de Rayos X. Según me dijo, un médico le solicitó radiografía de sus pulmones, porque, al parecer, tenía enfisema pulmonar. Antes de recibir sus resultados, su padecimiento lo obligó a internarse en otro hospital donde creyó que sería mejor atendido por su enfermedad. Dos días después fue trasladado a un nosocomio de mejor nivel, donde no fue atendido y sólo se le dio pase al Hospital de Cholula donde sólo fue recibido y conducido sin informar sobre su diagnóstico a sus familiares, después de 2 días, el 4 de abril se le dijo a la hoy viuda el enfermo falleció y tenía que pagar la cremación. Por las dudas, pueden servir estos enlaces:

https://www.elsoldepuebla.com.mx/local/investiga-derechos-humanos-deceso-de-hombre-de-tepetzintla-covid-19-coronavirus-5076543.html y https://twitter.com/ContigoPuebla/status/1247180264515596296

B) Días después, un joven, conocido de compañeros de trabajo, tuvo una situación similar. También era originario de un municipio serrano del norte de Puebla (de Huehuetla) y que, igualmente fue a dar al Hospital de Cholula. Usted puede tener más detalles en estos enlaces:

https://www.periodicocentral.mx/2020/gobierno/item/7527-joven-originario-de-huehuetla-que-murio-en-el-hospital-de-cholula-no-estaba-contagiado-de-coronavirus-salud y https://pueblaonline.com.mx/2019/portal/index.php/estado/item/95552-mujer-de-huehuetla-exigen-le-den-cuerpo-de-su-hijo-en-hospital-de-cholula#.XpfFrv1KjIU.

Las cosas y los casos, apuntan a algunas conclusiones macabras y brutales:

1) Que el mexicano tenga confianza, porque el gobierno federal dice que no pasa nada. Y como el contagio "está controlado", no se necesitan pruebas ni insumos y, si hay pacientes que llegan al hospital con la sintomatología, la causa de muerte será otra, pero no covid-19.

2) Que se mueran los que necesiten morirse (lo insinuó López Gatell, vocero del gobierno federal ante la pandemia: "sólo morirá el 2% de los mexicanos", dijo), ahorraremos en pruebas e insumos, se reduce el personal médico (por muerte), baja la presión social general (los muertos no protestan) y, se disminuye el número de ancianos a sostener por jubilación.

3) Se aplica la máxima de Harry Truman: "Si no puedes convencerlos, confúndelos." Así, sin datos reales ni creíbles, con la desinformación generalizada se polariza la opinión pública.

4) Por la confusión en la gravedad de la enfermedad y porque necesita vivir, el pueblo tiene que salir a ganarse el pan (aunque no lo logre en muchos casos), se evita que pueda exigir apoyo alimentario al gobierno y de paso la economía sobrevive a costa de los pobres de siempre.

Y todo ello, con miras a lograr un triunfo seguro para el partido del gobierno en las próximas elecciones.

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