Cuando aún hay estaciones cerradas de la Línea 12 del Metro de la Ciudad de México debido al desplome de un tramo elevado, que causó la muerte de 27 personas, Claudia Sheinbaum Pardo, en sus constantes giras proselitistas por Jalisco, el estado por el que más desfilan las corcholatas de AMLO, además de alardear que hizo grandes obras de agua potable, drenaje, no para de presumir las obras realizadas en el Sistema de Transporte Colectivo Metro de la CDMX y que ello le dio una aprobación muy grande de la ciudad. Afirma que “por eso allá estamos bien aprobados, pero igual estamos bien aprobados en todo el país”.
También existen serios problemas y quejas de usuarios de la Línea 1 del Metro, que cumplió un año cerrada para realizar trabajos de modernización y mantenimiento de Pantitlán a Pino Suarez, y que en un principio, la exjefa de gobierno aseguró que concluirían en seis u ocho meses, es decir, en febrero pasado tuvo que haber sido reabierto, lo que no sucedió y hasta el momento no hay fecha para reabrir la primera parte y afecta no solo a los capitalinos, sino también los ciudadanos de otros estados, que por cuestiones de trabajo tenemos la necesidad de ir a la capital del país y movernos en transporte público.
Pero el Metro no solo tiene estaciones cerradas, lo primero que se aprecia al ingresar a alguna estación son vagones sucios, viejos y descoloridos por el paso del tiempo. Abordar cualquier línea de este transporte colectivo, es un verdadero viacrucis no faltan los apagones, las constantes paradas y el miedo de los usuarios de sufrir algún percance es inevitable. La falta de mantenimiento es inocultable. Tan solo con esto queda demostrado que Sheinbaum les ha estado mintiendo a los jaliscienses y a los mexicanos en sus giras proselitistas por el país.
Ahora bien, surge la pregunta por qué precisamente en la ciudad más grande del país el transporte colectivo que mueve millones de personas, se encuentra en esta lamentable situación. A pesar de las evidencias, se hace necesario buscar fuentes de información para encontrar una explicación más convincente y evitar el riesgo de emitir juicios superficiales por parte de los que no hacemos investigación directamente.
La organización no gubernamental Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), documentó que hay corrupción, recortes y subejercicios en el Metro. En una inspección rápida de los datos oficiales del propio gobierno de la Ciudad de México, salta a la vista de manera inmediata que los dichos de Sheinbaum son falsos.
Para el año 2020, el presupuesto aprobado para el Sistema de Transporte Colectivo Metro fue de 15,652.7 millones de pesos, mientras que el gasto efectivamente ejercido fue de 14,290.5 millones. Es decir, hubo 1,362.2 millones de pesos, equivalente a 8.7 por ciento de su presupuesto, que originalmente iban a gastarse en el Metro, pero que al final del año no se utilizaron ni a dónde fueron a parar. O sea, no es casual, lo sabido públicamente que el metro es la caja chica de AMLO y Morena.
Al revisar los estados financieros consolidados, se encontró que el subejercicio reportado por la Secretaría de Administración y Finanzas es menor, pues reconocen un subejercicio por 587.8 millones de pesos. Esta cifra es menor a la reportada con anterioridad, lo cual en sí mismo ya evidencia la mentira al negar la existencia de un subejercicio, pero se debe a que en lugar de considerar el presupuesto de 15,652 millones de pesos que originalmente habían sido aprobados para que gastara el Metro, se toma el dato del presupuesto modificado por 14,878 millones.
¿Qué quiere decir esto? En primer lugar, que las declaraciones de Sheinbaum referente a que no hubo disminución del presupuesto, es falso, pues a lo largo de 2020 se modificó el presupuesto y se hizo una reducción de 774 millones de pesos para disminuir el gasto del Metro a 14,878 millones. Y, a pesar de esta reducción en el presupuesto estimado, el gasto real terminó siendo aún menor. Por lo tanto, sí hubo recortes y subejercicios en el gasto del Metro durante 2020, revela la organización no gubernamental.
De los 32 estados de la república, sólo tres poseen una red de Metro: Ciudad de México, Guadalajara y Monterrey. Estamos a un año de la sucesión presidencial y los problemas que están enfrentando los usuarios de este sistema de transporte público de la CDMX, pueden extenderse en igual o mayor medida a las otras dos ciudades. No es necesario ser un gran analista para prever que las corcholatas que aspiran llegar al poder a toda costa, cualquiera de ellos seguirá impulsando las mismas políticas.
Por lo que el pueblo de Jalisco no solo debe repudiar las mentiras de la corcholata preferida de AMLO y Morena, tiene que unir fuerzas con el resto de los mexicanos y exigir, en todo momento, un transporte público moderno, seguro y más eficaz. En ninguna circunstancia se tiene que perder de vista que hay corrupción, recortes y subejercicios en el Metro, y Sheinbaum miente.
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