Tanto las casas encuestadoras prestigiadas, como los institutos públicos, nacionales e internacionales, encargados de medir rubros como economía, el empleo, la calidad de vida, desarrollo humano, vivienda, poder adquisitivo, etc., han diagnosticado en sus proyecciones que el panorama de México no sólo es sombrío, sino aterrador y alarmante.
México, en el segundo trimestre de este año, tuvo una estrepitosa caída en el PIB del 18.9 por ciento, lo que significa que nuestro país dejó de producir muchas mercancías.No hay trabajo, por tanto, no hay dinero en las manos de la gente; al bajar el consumo, las industrias despiden personal, generándose así un círculo vicioso de crisis generalizada.La Comisión Económica para América Latina (Cepal) pronostica en los días próximos, el cierre de por lo menos 500 mil empresas mexicanas, debido, en parte a la pandemia, pero fundamentalmente a que el Gobierno Federal se negó a apoyarlas para que mantuvieran los empleos, o pudieran recuperar el nivel de empleo que tenían antes de la pandemia.
Lo más preocupante es que no se ve que el gobierno cuente con una estrategia para remediar la caída del PIB, el desempleo, el número creciente de contagios y muertes por covid-19; o los estragos causados por los huracanes, un plan nacional que le permita a los mexicanos mínimamente reducir los estragos económicos en los que están más de 70 millones de mexicanos según el Coneval.El presidente sólo habla del caso Lozoya y de la rifa del avión.
El Gobierno Mexicano sufre de senilidad precoz, no ve las decenas de miles de mexicanos contagiados, no escucha que somos ya el tercer país en el mundo con el mayor número de muertes por la pandemia, no tenemos un gobierno que atienda las necesidades de los mexicanos que día a día enfrentan el hambre y la miseria, por falta de políticas públicas adecuadas.
Más de la mitad de la población, el 54.9 por ciento no tiene recursos ni siquiera para adquirir la canasta básica; en el sector formal el empleo cayó en 13.7 por ciento, y el empleo para adultos mayores se redujo en 30.2 por ciento en el primer trimestre del año, de acuerdo con el Coneval.Un estudio llamado: "Magnitud del Impacto Social del Covid-19 en México, y alternativas para amortiguarlo", señala que pasarán de la clase media a la pobre 12.2 millones de mexicanos.La caída del ingreso en las familias es del 6.2 por ciento, es decir, si antes no alcanzaba para comprar lo básico para alimentarse, ahora nos moriremos de hambre.La pobreza laboral, al haber subido de 35.7 por ciento en el primer trimestre de 2020 a 54.9 por ciento en mayo, significa que no hay ingresos suficientes en las familias mexicanas para adquirir alimentos indispensables para subsistir; menos aún, para su desarrollo y nutrición.
Los mexicanos estamos atravesando la tragedia nacional más grave y agraviante de los últimos 50 años; por un lado abandonados por un gobierno carente de iniciativa, diligencia y responsabilidad; por otro lado, la pandemia que vino a mostrarnos que el verdadero interés de López Obrador es perpetuarse en el poder, a pesar de sus malas políticas públicas que han costado hasta ahora más de 48 mil muertos por causa de covid-19, según cifras oficiales, y más de 53 mil 628 personas asesinadas en los últimos 18 meses de este gobierno, cantidad muy alta comparada con los tres sexenios anteriores, desde que los muertos se empezaron a contar.
La población ha exigido desde el inicio de esta pandemia, que se dé un apoyo alimentario básico a las familias afectadas por la crisis; que el gobierno formule un programa nacional incluyente, que permita a los mexicanos hacer frente a esta devastadora situación de emergencia.Sin embargo, el gobierno sigue mudo.
Así las cosas, se hace necesario que se forme un frente común entre todos los sectores de la población: campesinos, obreros, estudiantes, empresarios, amas de casa, pequeños comerciantes, etc., que se lance a una cruzada nacional para llevar al poder legislativo, en el 2021, un proyecto de país que además de la mejora sustancial en las condiciones de vida de la gente, detenga las tendencias negativas en la economía, el desempleo, la falta de alimentos y medicinas, etc., por lo menos, por un proyecto de país que mejore en serio las condiciones de vida de la gente, pues la situación no puede ni debe seguir como está.Detengamos de una vez por todas a la 4T y su pretensión de eternizarse en el poder.
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