El pasado día 8 de septiembre, el Congreso de la Unión recibió el Paquete Económico 2021 enviado por el presidente Andrés Manuel López Obrador; con eso, se inició formalmente el proceso de discusión de la Ley de Ingresos (LIF) y del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF).De acuerdo con la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, una vez recibido el Paquete Económico en la Cámara de Diputados, se inicia el examen, discusión, modificación y aprobación de la iniciativa de la LIF, que, a su vez, deberá ser aprobada por el Senado de la República a más tardar el 31 de octubre próximo.Aprobados los ingresos, ahora es facultad exclusiva de la Cámara de Diputados la discusión y aprobación del egreso, es decir, del PEF, mismo que tiene que ser aprobado, a más tardar el 15 de noviembre del año que ya termina.Es decir, que, en materia presupuestaria, ahora estamos en manos de los Senadores y Diputados.Ellos van a decidir entonces, cuánto aportaremos los mexicanos por impuestos, y cuánto nos regresarán a cambio los gobiernos por nuestro esfuerzo.
No abundaré por ahora en los detalles que implican los ingresos (LIF) y los egresos (PEF), por lo que ya dije, habrá después tiempo de sobra para eso.Como todo colimense que paga en tiempo y forma sus impuestos, me preocupa sumamente la situación económica del Estado, y de esta, la suerte que están sufriendo decenas de miles de colimenses por la pobreza incrementada a causa de las crisis económica, sanitaria, educativa y de seguridad, que ya conocemos.No obstante, esto, además sabemos que no dan cuartel las tormentas tropicales del Pacífico que, como en el caso de "Hernán" por Manzanillo, dejan siempre a su paso desolación y miseria entre las familias más pobres y desprotegidas.Por eso es que creo mi deber ahora, llamar la atención de todos los colimenses de buena fe, para reclamar y oponernos al maltrato insolente de que somos víctimas, por parte del presidente y su gobierno, en materia presupuestaria.
Según se puede leer en todos los medios escritos y electrónicos, el Paquete Económico 2021 del presidente, lleva en sí, lo que ya en los casi dos años de su gobierno se ha denunciado: un marcado carácter electorero, mediante la compra de votos con los programas asistencialistas ya conocidos.Solo que ahora, llevará también como un estigma, los yerros gubernamentales y las marcas de las crisis ya mencionadas.Pero ya lo dije antes y hoy solo lo repito: el presidente ya no entiende de razones ni de evidencias funestas.él cree que está bien sólo lo que a él se le ocurre.Y por eso cree que es mejor recortar en su Paquete Económico, el presupuesto asignado a los estados y municipios, en vez de recortar lo asignado a las obras faraónicas como el Tren Maya o la refinería de Dos Bocas, mismas que pudieran concluirse en otros tiempos mejores que ahora, cuando lo registrado en el PIB está a 18.9 por ciento.
Pero, grosso modo, veamos la variación porcentual de lo propuesto a ejercer por el presidente en las entidades federativas, en relación a lo ejercido el año pasado.Según información que se puede leer en el Diario de Colima del viernes 11 de septiembre pasado, el presidente propone aumentar, con base en lo ejercido, los recursos federales a cinco estados del país: Nuevo León, en un 3 por ciento; Ciudad de México, 5 por ciento; Quintana Roo, 6 por ciento; y Tabasco y Yucatán, en un 17 por ciento cada uno.Por otro lado, propone disminuir los recursos al resto de los 27 estados, donde se pretende recortar del 0.1 al 8 por ciento a 24 entidades, mientras que a Hidalgo se le quitará un 11 por ciento, y a Colima y Baja California Sur, un 17 por ciento menos.Y aquí es donde empiezan mis preguntas: ¿qué criterios usó el presidente para tomar estas decisiones? Pero, además, ¿acaso es que aportamos menos impuestos los colimenses, por lo que merecemos menos en la repartición del PEF? Y, ¿qué dicen de esto, los señores y las señoras representantes de Colima en el Senado y en el Congreso de la Unión? Pero como ya dije líneas arriba, las discusiones apenas comienzan.Debemos estar muy atentos a las acciones de los legisladores federales colimenses, es momento de que les exijamos cuentas de su representatividad.
Pero, de aprobar los diputados federales este injusto presupuesto para Colima, no sería esta aun toda la tragedia completa.En el ámbito local, es muy sabido ya por todos los medios, el regateo que se ha hecho entre el Congreso estatal morenista y el Gobierno del Estado, por los pocos recursos de que dispone el estado.Todos recordamos cómo respondió el gobierno estatal, despidiendo a más de 600 trabajadores del estado, por el recorte aplicado a su presupuesto, por parte de los diputados de Morena.Las consecuencias de todos los yerros gubernamentales siempre los va a pagar el pueblo trabajador, aún los errores más absurdos, como los que estamos viendo en el Gobierno federal.
Pero volvamos a la propuesta del Paquete Económico 2021.¿Qué motivó al presidente proponer recortar el presupuesto destinado para Colima? Aquí otra vez se distingue la incongruencia de sus discursos populistas de justicia y equidad social.Veamos.No hace mucho, el mismísimo presidente en persona vino a Manzanillo para informar que la Administración Portuaria Integral (API), así como la Aduana ubicada en este Puerto, quedarían en manos de la Secretaría de Marina y de la Defensa Nacional.Argumentó estrategias de seguridad, pero todo mundo entendió lo evidente: el presidente vino a poner en resguardo seguro sus principales fuentes de ingresos federales.Y la opinión pública no se equivocó.Según datos que son ya públicos, entre los años 2018 y 2019, sólo la Aduana de Manzanillo ingresó en promedio 90 mil 688 millones 350 mil pesos al año, es decir, 2.5 veces más ingreso, que los 35 mil millones que el presidente propone asignarle a Colima en el año 2021.Y ya tan solo con este antecedente, queda claro que el presidente atropella la integridad económica de todos los colimenses.Ojalá que no olvidemos esto a la hora de votar de nuevo.
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