“Pareciera que los encuestados son gente que está de alguna manera pegada al sistema y son beneficiarios del proyecto de la 4T”
Morena está repitiendo los mismos errores de administraciones pasadas, la diferencia es que son más grandes en todos los aspectos, lo que tarde o temprano provocará la desilusión de los simpatizantes de 4T. Los medios de comunicación, tratando de cumplir con su papel, nos informan todos los días la alta aceptación que tiene el Presidente, pero dicha propaganda no corresponde con la realidad que se está viviendo en la sociedad mexicana.
El crecimiento económico es nulo, demostrando que un gobierno popular no es garantía que vamos a tener un país en desarrollo. Es cierto que en casi 5 años de gobierno se dieron algunos factores como el COVID-19, que no permitió trabajar durante 2 años, pero también es cierto que el Presidente nunca tomó en serio su papel y su responsabilidad como mandatario para combatir la pandemia, recurriendo sólo a ocurrencias que provocaron la muerte de 334 mil personas, pudiéndose salvarlas con una mejor atención, como lo hicieron otros países como China.
Otro factor, fue que los países como Estados Unidos del cual depende México económica y políticamente entró en crisis. También mucho tuvo que ver la inseguridad que se desbordó por la mala política de “abrazos y no balazos”, provocando que muchos inversionistas desconfiaran y dejaran de invertir. El resultado han sido casi 5 años con crecimiento cero, una deuda externa que creció, recortes a los presupuestos en educación y salud, lo que aunado a la corrupción en algunas dependencias abonaron para que los inversionistas estén desconfiados y preocupados por la nueva administración que se tendrá que elegir para 2024.
Además de 6.2 millones de pobres durante este gobierno, la CFE, Segalmex y algunas otras empresas padecen graves problemas de corrupción y con grandes pérdidas, son cosas que hacen pensar dos veces a los inversionistas nacionales e internacionales.
Las malas decisiones que provocaron que las obras del Tren Maya, la Refinería de Dos Bocas, y el aeropuerto “Felipe Ángeles” gastaran más de lo proyectado, así como las pérdidas en algunas dependencias, corrupción, la violación de la ley por el gobierno, la democracia pisoteada y la imposición de candidatos, los malos resultados de la Guardia Nacional y el Ejército mexicano, que no han podido mantener la estabilidad y la seguridad del país, son tan sólo una prueba de este mal gobierno.
Los ejemplos antes expuestos ponen en duda la famosa aceptación del pueblo al gobierno de la 4T. Pareciera que los encuestados son gente que está de alguna manera pegada al sistema y son beneficiarios del proyecto de la 4T por que el pueblo nunca es encuestado, el obrero, el campesino, el estudiante, el maestro, el ingeniero y el doctor simplemente no son tomados en cuenta, sólo unos cuantos que conforman una capa de la sociedad que cada día se vuelve más delgada.
En México tenemos un gobierno que se dice de izquierda de palabra, pero en los hechos es un gobierno sometido a los intereses de los poderosos, pues los apoyos que da no afectan los intereses del gran capital; mientras se esté buscando remiendos al sistema, las cosas no van a cambiar ahora ni después con la corcholata que sea.
Para que la economía crezca no es suficiente tener un presidente popular, aunque maneje el Estado a su favor, necesitamos una economía que esté pensada no para que sigan ganando los grandes ricos, necesitamos una economía para que el hombre tenga trabajo, con salario bien pagado, con empresas que paguen sus impuestos y que las ganancias se repartan más equitativamente, no sólo en 4 o 5 obras que le dan grandes cantidades de ganancias al Presidente, sino en una gran inversión que le dé impulso a la economía, a la ciencia, la educación, la salud y la seguridad.
Mientras no tengamos independencia económica, no tendremos independencia política. No es suficiente tener un presidente popular ni que se diga ser de izquierda, porque, aunque diga mil cosas es la misma gata, pero revolcada. Sólo un cambio profundo, apoyado en el pueblo, con una organización fuerte, educada y politizada puede enderezar el rumbo y beneficiar en los hechos a toda la sociedad mexicana. La tarea no es de un solo hombre sino de todos. Así que no hay de otra, tenemos que organizar al pueblo, luchar como uno solo, pensar que las cosas cambiarán con la lucha electoral es ver mal las cosas. El ejemplo más claro es AMLO que mucho prometió ayudar a los pobres y en los hechos los únicos que se están beneficiando son los ricos.
Todos los mexicanos debemos estar atentos por que la democracia en nuestro país se está pisoteando y manipulando a la opinión pública para oponerlos contra los grupos, organizaciones y partidos políticos que piensen diferentes a la 4T, por eso es urgente una organización fuerte que luche no sólo por mejoras, sino que luche para conquistar el poder y desde ahí corregir el camino. La solución no está en abandonar los colores, la solución está en la unión, fraternidad y lucha.
¡Únete al Movimiento Antorchista!
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